[Trasfondo] El Infeliz de Torreviuda

 ¡Buenos días! En el torneo de 2023 Leokul nos sorprendió con una lista silvana de caballería, y durante el VI Torneo Leyendas en Miniatura (ahora que hay una lista de Praderas del Sur) ha demostrado lo caprichoso del carácter élfico volviendo a algo más tradicional...pero sin dejar de acompañarlo de su buen trasfondo.

—Lo encontré, mi señor —el libro se desploma sobre la mesa y esta emite un quejido—. El desdichado tenía razón, Luigi de Torreviuda habló de ello hace varias centurias.

—No tiene ningún sentido…

Las palabras del actual señor de Torreviuda se apagan como el fuego que carece de lecha y arrastra el dedo a través del manuscrito. Espíritus del bosque que aparecían aquí y allá entre el arbolado, elfos y gigantes de madera. ¡Las leyendas eran ciertas! Las historias que su abuelo le contaba junto a la seguridad de la hoguera eran tan reales como la espada que segó su mano.

—¿Y qué vio?

—El infeliz habla de que nada más internarse en el bosque, nada más poner un pie entre la maleza creyó escuchar voces que susurraban al oído. Las palabras los atravesaron y las piernas les comenzaron a pesar. Los brazos, las armaduras. Salgamos de aquí, gritó uno, no seas un cobarde marienburgués, le retó el sargento.

—¿Tuvieron tiempo de formar?

—Las flechas comenzaron a volar por todas direcciones. El infeliz habla de que los propios árboles los disparaban… No recuerda todo, pero el sacerdote ha comprobado que fueron flechas élficas. Imaginamos que alguna unidad de arqueros. Esos cobardes comeflores no presentan batalla como Sigmar manda… Si por mi fuera…

El mensajero golpea la palma de la mano con el puño y niega con la cabeza.

—Continúa —lo interrumpe el señor de Torreviuda.

—Junto a las flechas, o más bien paseando entre ellas, un grupo grande de jinetes los rodeó mientras él mismo y alguno de sus camaradas lanzaron una primera descarga de arcabuz. A su lado surgieron más jinetes en los que parecían rebotar la pólvora…

—Magia del bosque.

—Eso es, mi señor. Alguna extraña fuerza los ayudaba desde el interior. Creemos que serían ayudados por algún mago o quién sabe… La unidad del pobre infeliz se desmoronó como un castillo de arena…

A partir de ahí el relato se vuelve confuso, la niebla crece, las ramas caen y un montón de extraños espíritus del bosque los arrollan. Habla de seres oscuros con enormes garras que se confunden con abedules y de elfos salvajes que gritan y bailan como bárbaros del norte.

—¿Del tamaño de tres hombres? —pregunta sorprendido el señor.

—Quizás cuatro o cinco. Capaces de partir por la mitad a un troll de las cavernas.

—Se avecina una nueva tormenta.

—Legendaria, mi señor, ni seis plegarias podrían evitarlo.

—¿Y su líder?

El mensajero guarda silencio, su rostro se arruga, la mirada se consume como un pergamino devorado por el fuego. Traga saliva. La garganta se convierte en el desierto del norte de Kislev. El señor de Torreviuda insiste, dime quién es su líder, ¡quién! Y el mensajero acaba por hablar.

—Mi señor, tememos que sea Siul Esoj. Un gigante entre gigantes. Las balas rebotaban en su corteza y sería capaz de derribar murallas con sus puños de madera. Un ser milenario y enfurecido por el paso de los siglos que parece haber despertado para esta nueva tormenta que se avecina.

—Maldito bosque… Trae tinta y papel, debemos avisar a… Maldito bosque.

• Milenario con Molestos Geniecillos y Un Racimo de Fuegos Fatuos

• Cantor de los árboles de nivel 1 con 2 Pergaminos de Dispersión
• Cantor de los árboles de nivel 1 con Pergamino de Dispersión
• Noble silvano en corcel élfico, con arma a dos manos, armadura ligera, escudo y Flecha Lluvia de Muerte

• 11 dríades
• 10 dríades
• 10 guardia del bosque
• 10 guardia del bosque
• 5 jinetes del bosque con músico

• 3 arbóreos
• 8 bailarines guerreros
• 5 jinetes de Kurnous con grupo de mando y Estandarte de Guerra

• Águila gigante