¿Qué tal lectores? Hace poco os introduje a la ciudad de Kislev con una reseña sobre el libro de warhammer El Embajador, de Graham McNeill. Ya he acabado su segunda (y última) parte, Los Dientes de Ursun, y de nuevo dejo aquí en el blog la introducción y una pequeña valoración, ya que lo mejor es que si os interesa, os lo leáis.
De nuevo la acción se desarrolla en torno a Kaspar von Velten, embajador imperial en la corte de la Reina de Hielo, un antiguo militar de Nuln sacado del retiro por petición expresa del Emperador Karl Franz. Tras lidiar en la entrega anterior con el asesino en serie conocido como El Carnicero, además de con otros variados problemas, con delincuentes, contrabandistas, guardias indisciplinados, nobles peleones...en esta segunda parte los conflictos suben de tono.
De nuevo la mayor parte de la novela se desarrolla desde la perspectiva del embajador, aunque no en exclusiva, con retazos de otros personajes de mayor o menor importancia. El libro es aún más oscuro, ya que la ciudad sufre una epidemia, relacionada entre otras cosas con la gran cantidad de refugiados que llegan a la ciudad debido a la invasión de un ejército del Caos, a las órdenes del Gran Zar Aelfric Cyenwulf, de los Lobos de Hierro. Kaspar debe lidiar en paralelo con el general de las tropas de Stirland, que había sido un antiguo oficial a sus órdenes, con la inminente llegada del ejército del Caos, con la epidemia en la ciudad, con el líder del crimen kislevita, con sus deberes para con la corte, colaborar con los temibles Chekist, intentar averiguar más sobre las motivaciones de El Carnicero...además de sus problemas amorosos, y sus conflictos con Pavel, su antiguo camarada kislevita. Además se rumorea el avistamiento de unos seres de aspecto ratuno, pero de tamaño humanoide...
En este tomo, el protagonismo es para la epidemia y los preparativos para enfrentarse al ejército enemigo, pero toda la acción se canaliza en torno al desarrollo de una trama/conspiración que ya se intuía desde el libro anterior. Eso sí, la batalla que se nos prometía en el comienzo de El Embajador, la podremos disfrutar en Los Dientes de Ursun con bastante detalle, recordándonos la famosa maniobra de los destacamentos imperiales, las huidas simuladas de la caballería ligera, los flanqueos, e incluso los pánicos...ya que Kaspar toma parte como oficial gracias a su dilatada carrera militar.
En este tomo, el protagonismo es para la epidemia y los preparativos para enfrentarse al ejército enemigo, pero toda la acción se canaliza en torno al desarrollo de una trama/conspiración que ya se intuía desde el libro anterior. Eso sí, la batalla que se nos prometía en el comienzo de El Embajador, la podremos disfrutar en Los Dientes de Ursun con bastante detalle, recordándonos la famosa maniobra de los destacamentos imperiales, las huidas simuladas de la caballería ligera, los flanqueos, e incluso los pánicos...ya que Kaspar toma parte como oficial gracias a su dilatada carrera militar.
Para acabar, el libro me ha gustado más incluso que su primera parte, bastante adictivo, aunque he de decir que el tema de la conspiración acaba siendo menos sorprendente de lo deseable, ya que se puede intuir bastante de antemano. Se agradece mucho la parte de la batalla, cambiando un poco el ritmo de la novela, y fácil de imaginar como una mesa de juego de Fantasy, y también está bien que sin añadir muchos más personajes, se haya sacado bastante jugo a los ya presentados en el primer libro, con alianzas peculiares, traiciones, pasados oscuros e intenciones ocultas. Estos dos libros me los recomendó Nalter, y acertó de lleno, muy entretenidos. ¡Si los leéis no dejéis de comentarlo!
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