Muy buenos días/tardes/noches generales a todos, sé que os he hecho esperar, pero espero que haya merecido la pena. Como quizás sepáis, el 21 de Octubre se celebró en San Feliú (al lado de Barcelona) el 4º Torneo Internacional Corredores de Sombras de Warhammer Fantasy 6ª edición con MDNR, y tuve la fantástica experiencia de poder acercarme a la Ciudad Condal y participar, además de conocer a un montón de gente fantástica. Originalmente pensábamos llevar toda una expedición de jugadores del grupo de Madrid, pero por motivos varios (tiempo, trabajo, dinero...) al final no pudo ser, por lo que ejercí de embajador. En esta crónica voy a intentar reconstruir la experiencia, desde la preparación hasta el final del torneo, incluyendo la confraternización intermedia. Dentro Whaaagh.
Aviso a navegantes: Es largo (muy largo, no te voy a decir cuantas páginas para no asustarte), así que igual preferís leerlo a trozos.
Normalmente es buena idea empezar por el principio, y eso voy a hacer. Quizás algunos lectores solo estéis interesados en el torneo en sí, pero yo quiero contaros la experiencia completa, porque así es más probable que os animéis a estos eventos en un futuro. Y una cosa os aseguro, merecen la pena.
Para que os hagáis una idea, cuando se empezó a hablar de este torneo, yo estaba trabajando en en el extranjero, y no tenía nada claro si podría asistir. Poco antes había tenido la oportunidad de participar en el I Torneo Leyendas en Miniatura, y había salido encantado, y en los últimos tiempos había estado colaborando con el Inner Circle de los MDNR, con el cual había intercambiado muchos (pero muchos muchos) correos. En resumen, tenía unas ganas locas de participar y conocer a varios jugadores, además que el grupo MDNR de Barcelona tiene más integrantes y más solera, por lo que hacer un buen papel me parecía un reto atractivo.
Durante el verano, decidí cambiar de aires y buscar un nuevo trabajo, por lo que aunque tenía tiempo, no sabía si empezaría en algún sitio. De todas maneras en ese momento había un total de 8 jugadores del grupo de Madrid planteándose asistir al torneo, por lo que pensábamos en alquilar coche/coches, ir allí el sábado y volver después. En mi caso concreto, tengo algunos amigos en Barcelona (cosas de la experiencia Erasmus), por lo que pensaba en quedarme un par de días más para amortizar el viaje y disfrutar de su compañía.
Comenzamos a pensar en prepararnos. Nosotros estábamos acostumbrados a jugar 7ª edición, por lo que empezamos a darle caña a 6ª para acostumbrarnos. Además empezamos a compartir y debatir las listas, ya que el punto de vista de otros oponentes (o jugadores con experiencia en general) tiene un gran valor, te ayudan a ver las cosas que se te escapan. Quiero agradecer a David, Juanma, Dani, Jorge, Alberto, Manu y Raúl sus consejos, porque me han sido valiosos. A lo largo del mes de septiembre y octubre, por motivos varios, se me fueron cayendo los compañeros de expedición, pero aún así conté con rivales voluntarios para ayudarme a practicar, pese a que sabían que iba a jugar una lista más bien afilada. Mis agradecimientos a Manu (Reyes Funerarios), Raúl (Altos Elfos por duplicado), Jorge (Machotez de Grimgor), Dani (Hombres Lagarto) y Álvaro (Caos Mortales) por esas partidas de práctica, que me sirvieron para valorar qué riesgos podía asumir y cuáles no. A final de septiembre empecé de nuevo a trabajar, así que la posibilidad de conseguir un par de días de vacaciones para mis planes fue complicada, pero por suerte en el último momento me las aprobaron. Lamentablemente, al final nadie pudo acompañarme, ya que éramos pocos para ir en coche, y el precio del AVE se había disparado bastante. Pero al menos mis Orcos y Goblins estaban preparados para lo que pudiera encontrar.
Para completar mi ejército necesitaba adquirir algunas cosillas, así que aprovecho de nuevo para agradecer. A Raúl por los 5 jinetes de lobo, a Luis por hacerme más fácil conseguir los garrapatos dezpachurradores, y a Jorge por prestarme 5 lobos, 1 chamán y 1 fanático para completar la lista. También pude comprar los snotlings que me faltaban, que fue lo último que pude pintar antes del torneo. Fue una pena no tener pintados los garrapatos, pero me quedé sin imprimación y sin tiempo.
Sobre la lista, he preparado un artículo completo de análisis, que podéis leer aquí, pero la idea básica es bombardear al rival con magia y máquinas de guerra, usando el hechizo ¡Morko, zálvanoz! para ganar fiabilidad y pegada. Para maximizar eso utilizaba unidades de ralentización de avance, dos garrapatos dezpachurradorez para causar el caos y destrozar bloques, y una pequeña unidad de orcos negros para repetir animosidades y rematar unidades tocadas. La lista es la siguiente:
Pues allí que me fuí, en AVE, el jueves por la mañana, con un maletón poco maniobrable. El avión era más barato, pero transportar en avión las miniaturas me daba cero confianza, así que me rasqué el bolsillo (además me gusta mucho más viajar en tren). Estuve con mis amigos de jueves a sábado, disfrutando de la ciudad, poniéndome al día, y aunque nuestra excursión programada a Port Aventura se torció por la lluvia, pude conocer Tarragona, que es una ciudad muy bonita con unas ruinas romanas impresionantes, que recomiendo visitar. Puede parecer una chorrada, pero esto es algo que he aprendido de leer reportes de torneos de Magic the Gathering. Si viajas a un torneo, aprovecha para conocer el lugar y redondear el viaje ampliando tus horizontes. Estos viajes son una experiencia, no simplemente una competición.
El sábado por la tarde, me junté con Elendor, que venía desde Bruselas con un plan bastante parecido, y nos dimos una vuelta. Pasamos por el "triángulo friki" pero fuimos capaces de evitar entrar en las tiendas...porque no nos daba tiempo. Esa tarde-noche, Namarie había convocado una cervezena, y aunque los asistentes fuimos pocos, lo pasamos muy bien en el bar del alemán. Gracias a Nama, Elendor, Funda y Álvaro, la verdad que estuvo muy bien, y el tapeo posterior tampoco estuvo nada mal. La cantidad de anécdotas de Namarie es brutal, y da gusto saber más de como surgieron los Manuscritos de Nuth. ¿Vosotros habéis matado un león? Pues si no habéis matado un león, no os voy a contar ese origen. Haber asistido. Lo que si os puedo contar es que Nama me obsequió con algunos elfos oscuros que tenía por ahí, así que ahora me veré forzado a darles buen uso.
Como no podía ser de otra manera, esa noche dormí 3 horas, algo perfecto antes de hacer un ejercicio mental prolongado. A la mañana siguiente, el Namabus tuvo el detalle de recogerme para ir a San Feliú, y en el trayecto conocí a Ermengol y su porta con arma a dos manos, a Juan el Héroe (¡oh capitán, mi capitán!), a Mathy (el escriba skaven) y a Paski (un pobre engañado para el torneo, de vuelta a 6ª). Fue muy divertido, con mogollón de bromas, anécdotas, banda sonora acorde, críticas de cine...¡esa era precisamente la idea de haber ido a Barcelona en coche compartido!
Llegamos al pabellón un poco justos, casi los últimos, pero aún a tiempo, y encontramos 22 mesas preparadas y una pequeña plataforma con un proyector para la dirección del torneo. Además nos agasajaron con zumos y algunos bollos para desayunar (¡qué nivel!). La sala estaba repleta, casi todo el mundo de charla amistosa o saludando a conocidos. Yo aproveché para acercarme a Álvaro y comentar un poco por encima nuestras expectativas del torneo y el ambiente brutal. ¡44 participantes! Eran más del doble que el año anterior, una convocatoria muy alta. Y yo que pensaba que cuando en las bases ofertaron 68 plazas era coña...
Bueno, sé que estoy poniendo a prueba vuestra paciencia. ¡Vamoz a laz tortaz!
Antes de entrar en materia, una mención sobre puntuaciones:
-Las partidas podían otorgar de 0 a 20 puntos. El empate es un reparto 10-10, y el máximo (jezzailado) que es 20-0 requería ganar por 1600 puntos si mal no recuerdo, es decir, estaba un peldaño por encima de masacre.
-Al ser tres partidas el máximo de puntos eran 60 para la clasificación de mejor general.
-La clasificación de pintura otorgaba hasta 14 puntos.
-Había una clasificación mixta que unía ambas cosas, siendo el máximo por tanto 74 puntos.
Como os podéis imaginar, no conocía a Viçens, pero solo puedo tener buenas palabras. Traía un ejército muy bien pintado (y con una lista tan extensa tiene mérito), bien pensado y que a mí personalmente, es la variante de Condes Vampiro que me gusta. Además durante la partida tuvimos varios debates tácticos, con lo cual los dos aprendimos al ponernos en la piel del otro, y me comentó que solía jugar Elfos Silvanos, así que estaba aún aprendiendo a sacarle jugo a sus no muertos. Os digo esto para que os déis cuenta de que pese a estar en la ronda 1 de un torneo lo principal era pasarlo bien. Viçens jugaba la lista alternativa de nigromantes, es decir, iba sin vampiros. Aparte de eso, la principal ventaja de esta lista, son zombis y esqueletos más baratos y el acceso al Sagrario Mortis como unidad especial. No tengo su lista detallada, pero era tal que así:
-Maestro nigromante (general) nivel 4, llevaba la Capa de sombras y niebla que lo hacía etéreo y sino me equivoco el objeto de un dado de energía y un dado de dispersión adicionales.
-Nigromante nivel 2, llevaba 1 pergamino de dispersión y Libro de Arkhan (portahechizos danza macabra de Vanhel).
-Nigromante nivel 2, llevaba el Bastón de la condenación (portahechizos vigor antinatural en área).
-Señor tumulario, llevaba el Libro Maldito (las unidades enemigas a 15 cm tienen -1 a impactar en cuerpo a cuerpo).
-20 esqueletos con arma a dos manos y grupo de mando (aquí iba el señor tumulario).
-25 zombis con grupo de mando (un nigromante nivel 2).
-25 zombis con grupo de mando (el otro nigromante nivel 2).
-25 zombis con grupo de mando (el maestro nigromante nivel 4).
-5 caballeros negros.
-5 espectros condenadores.
-1 sagrario mortis.
-5 murciélagos vampiro.
-1 doncella espectral.
-1 doncella espectral (otra).
Personalmente, en cuanto ví la lista sabía que tenía enfrente el que para mí era mi peor emparejamiento (de todas las facciones posibles), ya que llevaba mucha magia (y por ende dispersión), no le podía provocar pánicos, iba a levantar lo que le matara con facilidad, daba miedo (ideal para mis liderazgos 5, 7 de mi general), y además tenía 4 terrores y 3 gritos de la doncella. De todas maneras, me gustan los retos, y me preparé para hacerlo lo mejor posible.
En cuanto a hechizos, recuerdo que él tenía por supuesto un porrón de Invocaciones de Nehek, una Mano de Polvo, y una o dos Maldiciones de los Años, y creo que Vigor Antinatural. Además por mi experiencia jugando con Pumu intuía sus dos portahechizos. Por mi parte mi generación de hechizos fue pobre. Sé que tenía mis 4 Miradas de Morko, unos Puñoz de Gorko, un Kabezazo, el ¡Morko, zálvanoz!, un Pie de Gorko y un par de hechizos de combate. Realmente hubiera sido muy importante para mí sacar tanto Pie de Gorko como Gorko kamina con noz, pero es lo que hay.
En el tablero, en mi lado había colina (lo escogí por las máquinas de guerra claro) y bosque, en el suyo un bosque frente a mi colina, y en el centro una torre y unas rocas que acordamos impasables. Pensé que dado que su ejército tenía un buen emparejamiento querría acercase rápido (4 terrores, voladoras, caballería, gritos...) y se colocaría centrado, así que hice eso, y puse en mis flancos los lobos pensando en coger cuadrantes o retaguardias. Los garrapatos dezpachurradores son inmunes a psicología, pero si recibían una carga de algo etéreo se morirían al momento (al no matar a lo que le carga) así que los puse en los lados para intentar salvar al menos uno. Los snotlings estaban delante de las máquinas de guerra porque son la ostia. Y no es discutible. Viçens hizo un flanco rehusado, apiñando todo en la zona limpia, que de paso tenía cierta protección gracias a la torre de máquinas en la colina, dejando los murciélagos en el otro extremo (supongo que pensando en mis máquinas en colina evidentes) y una doncella en la linde del bosque.
A estas alturas los turnos se me difuminan y mezclan, pero intentaré ser cronológico.
Empecé yo, por suerte. Avancé ligeramente para darle rango de hechizos a mis chamanes, saqué a los lobos de visión de los chamanes, y moví los garrapatos en direcciones poco agresivas (uno tocando bosque para que moviese la mitad) para no ponerme en rango de carga de los etéreos. Mis fase de magia fue prolífica, ya que maté a la doncella espectral del bosque, y le hice gastar a Viçens su pergamino en turno 1. Lamentablemente el disparo me falló, aunque intenté con todo ir a por el Sagrario Mortis. No estoy seguro si en este turno conseguí hacerle 1 herida con lanzapinchoz, pero lo que si sé seguro es que estimé muy mal con la catapulta y la piedra se fue fuera del polideportivo.
En su primer turno, mi oponente avanzó, apiñándose en el paso amplio, escondió a la doncella tras la torre (pero no llegaba a gritar a los orcos negros) y levantó zombis y esqueletos. Yo tenía una posición delicada. Os explico. Cuando alguien se te acerca a 20 centímetros de los goblins nocturnos, los fanáticos salen en la dirección que eliges. Pero si alguien te invoca zombis dentro de ese rango, los goblins se sorprenden, y los fanáticos salen en direcciones aleatorias. Por este motivo, tenía que ser muy conservador con aguantar los dados para los últimos hechizos. Por ese motivo, una unidad de zombis se fue a los casi 30, y los esqueletos a los 28. Creo que paré una invocación más, y una maldición de los años le entró a una unidad de nocturnos matando a 4, ya que hice una tirada floja para dispersar.
En mi turno 2, el garrapato de la derecha se movió para evitar estar en rango de carga de los 30 zombis, y el de la derecha para salir de la visión de los espectros condenadores. Los snotlings que se pusieron en la cara de los espectros condenadores para retenerlos. Los lobos de la derecha fallaron animosidad. Llevaba un total de 5 unidades con animosidad, y los orcos negros casi exclusivamente para repetir esos chequeos. Pues fallé 4 animosidades (todos los nocturnos, y los lobos de la derecha), y solo salvé una por la repetición. Muy goblin la verdad. En este turno el Pie de Gorko liquidó a la segunda doncella, y el Sagrario Mortis resistió varios proyectiles, además de que dispersé la maldición de los años. No teníamos nada claro si funcionaba solo en sus turnos (ahora está erratada) o también en el mío, y no podía comerme otro pánico ahí. La catapulta se volvió a pasar bastante, pero los lanzapinchoz si que lo dejaron con 3 heridas.
El turno 2 de Viçens fue raro, ya que sus caballeros negros no cargaron a mis lobos, y se le olvidó cargar con los murciélagos a las máquinas. Eso sí, los espectros condenadores se enzarzaron con los snotlings. El sagrario mortis pasó al lado de mi garrapato (la peana está sobredimensionada), dispersé uno o dos hechizos y el portahechizos, y me coló otra invocación en la unidad grande de zombis. Sé que gasté un pergamino en evitar que me plantara una de zombis delante de los nocturnos de mi flanco izquierdo.
Mi turno 3 siguió en la misma línea. Intenté cargar con los lobos al flanco de los espectros condenadores (hubiera pasado a tener potencia, flanco y músico) pero fallé el terror y huí hasta casi el borde de la mesa. El garrapato se llevó el sagrario mortis por delante, el otro garrapato se acercó con malas intenciones a la unidad del maestro nigromante (aún no sabía que era etéreo) y mis unidades recularon los que pudieron, salvo los lobos del flanco izquierdo que tentaron carga a los caballeros negros. Los lobos de la derecha se reagruparon al menos. En este turno se que entre magia y disparo maté algunos zombis y esqueletos, y el Pie de Gorko se llevó por delante 4 caballeros negros, dejando solo al campeón. A decir verdad, en este momento, iba ganando por algo así como 600 puntos y empezaba a ver alguna posibilidad. Daba por pérdidas las máquinas ante los murciélagos, pero si conseguía concentrar la magia podía empezar a eliminar unidades de zombis, ya que había matado todo lo no levantable (menos un caballero negro, los espectros trabados y los murciélagos).
Pues en el turno 3 empezó el colapso. Los murcis cargaron al lanzapinchoz, que huyó por miedo y salió de la mesa. Lamentablemente los murcis estaban a más de 50 del borde y no salieron del campo de batalla, con lo que volverían a cargar después. Él caballero negro cargó a los 5 lobos (yo partía de potencia y músico, él necesitaba hacer 2 heridas con 3 ataques entre jinete y montura), fallé miedo, pero solo impactaba a 6s, ya que al tener más potencia no me hacía huir. Su unidad mayor de zombis se tiró contra la de nocturnos tocada, y pasé el miedo. Por el camino sacó 6 fanáticos, pero por mucho que le rebajara, seguía teniendo más potencia que yo. No os creáis que en este turno le entró demasiada magia, pero el combate fue ridículo. Los lobos de la izquierda se llevaron 2 heridas, chequearon a L5 y huyeron de la mesa. Los goblins nocturnos perdieron por poco, pero huyeron por miedo. Al perseguir fueron alcanzados, y además los zombis se trabaron con el flanco de la siguiente unidad de nocturnos. En el proceso el chamán más cercano (el del pergamino restante) falló pánico y se fue de paseo. Lo único bueno es que los snotling seguían ahí.
Llegamos al turno 4, donde todo se decidió. Los lobos reagrupados se fueron al cuadrante enemigo para llevarse los puntos. El chamán del pergamino siguió corriendo. De los 6 fanáticos, 4 la palmaron y los otros 2 no dieron a nadie. Los garrapatos hicieron su trabajo y rebajaron la unidad del maestro nigromante a 9 o 10 zombis. Con magia bajé la otra de zombis libre a 15 o así. Incluso maté algún esqueleto. Pero se lió parda. Los goblins trabados por el flanco perdieron. Fueron alcanzados en la persecución. En el proceso hicieron huir por pánico al lanzapinchoz, a la otra de nocturnos (había tirado los fanáticos hacia la colina en algún momento), al chamán del portahechizos, y al gran chamán nivel 4. Además murió el último snotling. Es decir, solo mantenían los garrapatos, los orcos negros con el general y 5 lobos disciplinados.
En su turno 4, remató la faena. Los espectros condenadores cazaron al chamán del garrapato (y su bonus de puntos). Los murciélagos (había matado 2 el turno anterior con magia) a la dotación de la catapulta que huía por miedo. La pinza se iba cerrando sobre los orcos negros. Y la unidad del nigromante (10-11 zombis y él) se fue a por mi garrapato. Él sabía que el nigromante era etéreo, así que mi garrapato iba a morir, su único temor de no haber cargado antes con él solo era quedarse a tiro de mi Pie de Gorko, pero ahora solo me quedaba un chamán nivel 2 generando dados. Además como la resolución del combate con el garrapato es en la fase de combate cuando le cargas, en magia podía levantar zombis para amortiguar el golpe. Utilicé mis 3 dados para intentar evitar la invocación de Nehek en esa unidad, que me podía haber dado la partida (si el nigromante se quedaba solo y reagrupaba mi nivel 4, tenía una oportunidad), pero me quedé corto. Además mi portapergaminos estaba huyendo. A partir de ahí entro una segunda invocación, y una maldición de los años a los orcos negros, matando a 3.
No se me da bien rendirme, así que intenté pelear por los puntos. En turno 5, reagrupé la dotación de lanzapinchoz, el chamán portapergaminos (tarde), los nocturnos y el chamán nivel 4 (sí, todo, tarde, pero todo). Los fanáticos de nuevo no hicieron nada, y mi garrapato superviviente volvió a matar algunos zombis de la unidad del maestro nigromante pensando en rascar media unidad con suerte al final de la partida. Saqué a mi general (el chamán orco) de los orcos negros, para hacerle elegir a qué chamán pillar con los murciélagos, intenté matar esos murciélagos con magia sin éxito, y le colé el Kabezazo al caballero negro superviviente con el chamán portapergaminos. Lo hice para rascar media unidad, pero el impacto de F4 sin armadura me falló. Lo había intentado en vez de dispersar la maldición de los años en los orcos negros, y palmaron algunos más. Además, mi general murió por el hechizo. Aquí cometimos un cúmulo de errores. Lo primero, la maldición de los años tenía una doble errata. Solo actúa en el turno del jugador no muerto, y además hace una herida sin armadura, no mata (con los cual no solo no se comía una herida el general, sino que no moría). Por si fuera poco, he comprobado las erratas y un personaje que abandona una unidad bajo el efecto de un permanece en juego, deja de estar afectado por el hechizo salvo que este diga lo contrario. Es decir, un TRIPLE error de casi 500 puntos. No hubiera cambiado la partida, estaba perdida e iba a morir, pero le habría hecho elegir, y quizás habría salvado algunos puntos de otro lado. No culpo a Viçens, era una errata y una interacción que dudamos, pero ninguno teníamos claro. Ahora ya no se me olvidará al menos.
En su turno 5, cazó al gran chamán nivel 4, a la dotación del lanzapinchoz y los espectros condenadores cargaron a los nocturnos, huyeron por terror, y fueron alcanzados. La maldición de los años (a 4+) me dejó en tres orcos negros y dispersé su portahechizos de la Danza de Vanhel para evitar carga en magia. Lógicamente, todas sus unidades estaban ya por encima del 100% de miniaturas iniciales.
En mi turno 6, seguí intentando buscar el 18-2 en vez del 20-0. Escondí al chamán de las setas en el bosque. Me llevé al garrapato lejos del follón para evitar sorpresas y coger cuadrante si él se despistaba. Y declaré carga de los 3 orcos negros a una unidad de zombis para intentar matar a ese nigromante nivel 2 (que además daba puntos extra por escenario). Fallé el miedo y me quedé clavado. Pero al menos dispersé la maldición de los años que ya iba a 3+, no tenía otra cosa que hacer.
Nunca hay que perder la esperanza. En turno 6, Viçens se confió. Cargó con la unidad de esqueletos a los tres orcos negros. Se acercó con el maestro nigromante al bosque para tirarle maldición de los años al chamán restante (¡qué avaricia!). Pues disfuncionó. Y sacó un doble 1 en la tabla. En ese momento me quedé congelado. Si ese maestro nigromante moría, entre su valor y el objetivo del escenario, eran cerca de 600 puntos. Además de chequeos en todas las unidades, sabiendo que por ejemplo los caballeros negros, los murciélagos o los espectros condenadores podían venirse abajo. Consultamos la tabla de disfunciones, y lamentablemente en esta edición solo sufre un impacto de F10 (y todo lo que tenga en contacto). Sabía que la tabla tenía FAQS, así que me acerqué al árbitro a consultar, pero la única errata aclara que también afecta otro impacto a la montura si la tienes. No pasa nada, aún me quedaba un as en la manga. Viçens iba a acabar con mis orcos negros cuando de repente...¡te desafío! Sin pensarlo dos veces, Viçens aceptó el desafío de mi campeón orco negro con su rey tumulario. Craso error, ya que yo tenía dos ataques de HA5 F7 y él con con HA4 R4 TSA 3+ se arriesgaba a morir y concederme cerca de 250 puntos. Mi campeón sobrevivió al duelo, pero solo consiguió causar una herida en el rey tumulario, para lamento mío. Lógicamente, la unidad huyó por miedo en la resolución, y fue alcanzada (y el estandarte le dió bonus de puntos, quizás podía no haber dispersado la maldición y dejar que murieran a 3+ en el turno anterior los tres supervivientes, negándole la captura del estandarte). Al final solo tenía en mesa 1 chamán, 5 lobos y 1 garrapato, ante una marea de muertos vivientes interminable.
Resultado final: 20-0 a favor de Viçens. Merecido sin duda. Yo luché con uñas y dientes por sacar 2 o 4 puntos hasta el final, intentando propiciar situaciones que me dieran puntos (cuadrantes, matar al caballero negro, acabar con los murciélagos, ir a por el maestro nigromante, matar a otro nigromante, ir a por el rey tumulario, hacerle elegir que chamán cazar...) pero una y otra vez las cosas no salieron bien. Creo que de no haber cometido ese triple error con la muerte del general, quizás hubiera salvado algún punto más para el 18-2, pero tampoco había ninguna seguridad dado el dominio de mesa que mi oponente consiguió establecer. No sé si no debería haber sido más agresivo ante el emparejamiento desfavorable, haber buscado con los chamanes visión a la unidad de su general, y haberle tirado todo a lo loco. Pero no podía ignorar las unidades que causan terror con estos liderazgos, y realmente en turno 3 iba ganando con una ventaja considerable, así que no quise jugármela a cara o cruz. Creo que podía haber jugado mejor. Creo que podía haber tenido más suerte. Estoy seguro que debería haber dormido más la noche anterior. Pero el resultado fue justo, el oponente fue formidable (y se notó la experiencia porque me dispersó el ¡Morko, zálvanoz! casi todo el tiempo) y aprendí un montón. ¡Gracias Viçens!
Después de esta partida, que acabé justo de tiempo, le di un poco la brasa a Mathy y a Alvaro, les pregunté como les había ido, y aunque algo desanimado por haberme quedado tan atrás en la carrera por el mejor general, decidí intentar sacar los otros 40 puntos en juego, y sobre todo, disfrutar otras dos partidas igual de intensas. Mientras sacaban los emparejamientos hice algunas fotos que dejo para luego.
-Vidente gris (general) nivel 4 con 4 fragmentos de piedra bruja, pergamino de disformidad (portahechizos de un solo uso que hace un impacto de F3 por miniatura a una unidad y le causa pánico) y alguno de dispersión
-Caudillo portaestandarte de batalla, me suena que con estandarte mágico
-Ingeniero brujo con cuchillas de piedra bruja (F+1 y sabe rayo de disformidad), condensador (puede usar un dado de energía extra a su máximo) y acumulador (genera un dado de energía)
-30 esclavos
-30 esclavos
-25 guerreros del clan
-Amerratadora
-25 guerreros del clan (con el caudillo)
-Amerratadora
-2 hordas de ratas
-5 lanzadores de viento envenenado
-4 mosquetes jezzail
-24 monjes de plaga (con vidente gris) con estandarte negro (TSE 4+ contra proyectiles de F4 o menos)
-5 portadores del incensario
-1 abominación
No sabía mucho de skavens, pero sabía que debía anular las amerratadoras y jezzail, ocuparme de la abominación (por suerte con tanto fanático, snotlings y garrapatos...) y tratar de causar pánicos tan pronto como fuera posible.
En hechizos, el tenía el rayo de disformidad (proyectil) en el ingeniero brujo, y el vidente gris llevaba oleada de ratas (una plantilla grande que hace 3D6 de F2 a lo largo de 10D6 desde el vidente), aliento pestilente (lanzallamas), locura asesina (da furia asesina o una furia más pegona) y plaga (obliga a chequear resistencia a cada miniatura de una unidad o hiere sin armadura, y va saltando, parecido a Gorko kamina kon noz). Yo como siempre, tenía mis 4 Miradas de Morko y ¡Morko zálvanoz!, esta vez tenía Gorko kamina kon noz, un par de hechizos de combate y un Kemacerebroz.
En mi triángulo de despliegue había una colina y un muro atrasado, y cerca de la tierra de nadie, una colina con desfiladero. Al otro lado, dos bosques y otro muro. Pensé que iría fuerte a por mí, así que puse en los flancos los lobos por los objetivos, los garrapatos centrados acompañados de snotling (en cuanto colocó la abominación) y el resto retrasado porque yo no tenía ninguna prisa por combatir.
En su turno 1 cometió el error de ser demasiado cauto, fruto seguramente de la inexperiencia. Avanzó un poco los bloques de infantería, su flanco hacia los lobos, y la abominación hacia delante. En magia corté el rayo de disformidad, y me tiró una oleada de ratas a través de la unidad intacta de esclavos. Creí que no iba a llegar, y se quedó a 4 o 5 centímetros, pero mató a alguno de sus esclavos en el proceso. Las amerratadoras habían movido así que no disparaban, pero los lanzadores de viento envenenado acabaron con mis lobos sin el más mínimo problema, haciendo huir fuera de la mesa a los 2 o 3 supervivientes.
En el turno 2, puse los snotling directamente en la cara de la abominación, y el garrapato no sé si fue este turno cuando le pasó por encima, pero en todo caso no murió. El otro garrapato se deshizo de algunos esclavos, que huyeron de vuelta al despliegue. En mi fase de magia seguí rebajando las unidades de esclavos y me parece que acabé con los morteros de viento envenenado en venganza, y creo que también maté algún monje de plaga. En disparo un lanzavirotes le coló un par de heridas a la abominación, que ahí seguía.
Su turno 2, cargó con la abominación a los snotling (les hizo 4 o 5 heridas en combate, pero se quedaron tan panchos). En mi flanco débil empezó a avanzar con el enjambre y los guerreros del clan, y el centro de nuevo con cautela. En magia tuve otro de esos momentos tontos, me lanzó una Plaga con una buena tirada, intenté dispersar a dados (con 4 o 5) y me quedé corto. La plaga mató a 7 nocturnos en una unidad, 9 en otra (ambas fallaron pánico) y 2 orcos negros, y por suerte paró ahí. ¡Ouch! En disparo una amerratadora se colocó tras el seto, y la otra tuvo problemas y acabó con algún hombre rata por ello. Creo que eran esclavos de los que huían, que se irían fuera en turno 3, pero puede que me equivoque.
Mi turno 3 fue el de consolidación. Reagrupé ambas unidades de nocturnos (aún con fanáticos). Acerqué los nocturnos de la derecha a la abominación, y uno de los fanáticos acabó con ella, además de matar a algún snotling de la misma. El garrapato de la izquierda empezó a matar gente, cogiendo por banda unos monjes de plaga, mientras que el otro no estoy seguro si se ocupó de los esclavos restantes o empezó con los guerreros del clan del caudillo. Los lanzapinchoz y magia siguieron matando ratas sin nombre, pero el momento fue de la catapulta, que apuntando al vidente gris, se acabó llevando a la amerratadora que tenía al lado, al ingeniero brujo, y no sé si a algún portador del incensario. Ya tocaba que hiciera algo.
Su turno 3 no consiguió demasiado, tratando de avanzar tras ser repelido con tanto proyectil. Si que empezó a amenazar mi flanco, cargando con las ratas a los nocturnos, que soltaron fanáticos. Sufrió heridas menores, y optó por no continuar la carga. Pude dispersar la magia en su mayoría, y eso sí, la amerratadora que quedaba le hizo 3 heridas a uno de los garrapatos.
En turno 4 ya fui a sacar puntos. Utilicé todo mi potencial para acabar con los esclavos restantes, y creo que con los portadores del incensario y monjes de plaga (puede que fuera en turno 5 estos últimos), gracias a un Gorko kamina con noz que se prolongó mucho. El garrapato herido estaba furioso, y se llevó por delante a la amerratadora, mientras el otro hacía trizas a varias ratas. En mi flanco izquierdo reculé con los goblins, y me suena que los fanáticos no hicieron nada digno de mención.
En su turno 4 su vidente gris solitario se metió en el desfiladero, y los guerreros con el caudillo se acercaron a coger el objetivo central. No estoy seguro si me coló otra plaga o qué fue, con una fuerza irresistible (la segunda en la partida creo), pero la mayoría lo dispersé, aprendida ya la lección de que para eso son los pergaminos.
Mi turno 5 y 6, puse los snotling sobre el objetivo central (para disputarlo si hacía falta) le tiré todo a la unidad del caudillo hasta que no quedó nadie (ni él), y le tiré los restos a la horda de ratas, sin éxito. Me suena que mi catapulta sacara problemas en algún momento, pero duró hasta el final viva, así que no puedo asegurarlo. Él no pudo hacer más puntos al estar en tanta desventaja, quedando una unidad de guerreros del clan, la horda de ratas y el vidente gris escondido. Yo había perdido una de lobos, media de snotlings, y creo que media de nocturnos, y ambos garrapatos estaban tocados.
Resultado final: 20-0 a mi favor. El resultado refleja la partida, pero no creo que Edgar jugara mal, simplemente necesitaba práctica. Estaba en la fase en que aprendes las sinergias de tu ejército, y coges soltura con su magia y selección de objetivos (y a 2000 puntos es mucha tralla a la vez, yo siempre recomiendo empezar por 750 o 1000). Mi lista no tiene mucho misterio, pero si no conoces como funciona, es normal que no explotes sus puntos débiles. Por lo general, mis garrapatos son muy vulnerables a la carga de unidades tan grandes, pero el hecho de quedarse atrás le hizo perder esa ventaja, y además al ser unidades enormes, se estorbaba para maniobrar. Lo mismo pasó con las amerratadoras, que perdieron el primer turno colocándose, y los pobres jezzail volaron en turno 1 en un hechizo afortunado por mi parte. Y lo de la abominación...si habéis jugado un monstruo grande, seguro que habéis sentido esa necesidad de trabarlo en combate porque le estaban cayendo todas las máquinas de guerra, creo que hizo lo que podía en ese momento, pero le faltó apoyo a la criatura. Tuve cierta suerte, creo haber fallado solo una animosidad, y sé que disfuncioné una vez, no recuerdo en que momento, tirando el Kemacerebroz, resultando en la pérdida de un nivel (¿y una herida?) en mi chamán orco general. Por lo general creo que hice una buena partida y tuve la sensatez de ir acabando con cada problema de uno en uno, aunque cuando me coló la Plaga en turno 2 y vi huir a ambas unidades de nocturnos, sudores fríos recorrieron mi espalda. Acabé contento de haberme recuperado de la partida anterior, y también contento de haber podido jugar una partida contra skavens, y aprendí algunas cosillas sobre la magia skaven. Espero que a Edgar también le resultara de provecho la partida, yo creo que aunque un torneo a 2000 puntos pueda intimidar, hizo bien en venir a jugar, ya que en un ambiente así se puede aprender mucho, y en las derrotas siempre hay lecciones que extraer. Espero tener la oportunidad de volver a verle el año que viene, quizás con algo más de colorido en el despliegue. ¡Muchas gracias Edgar!
Tras la segunda partida, llegó la merecida pausa para comer. Sé que lo que más os interesa a todos es saber que bocadillo escogí. Tras mucho estudiar el metajuego, y contrastar con los gurús del MDNR Inner Circle, opté por el bocadillo de salchichas en pan untado con tomate. Y una cocacola para intentar mantenerme despierto que había dormido poco. Bueno, la verdad es que la cocacola no era necesaria, seguía con la excitación por las nubes. Dejé mi ejército desplegado en la mesa para que los jueces pudieran dar las puntuaciones de pintura (no esperaba mucho, pero tenía curiosidad) y me reuní en la mesa común para un debate de batallitas pasadas, presentes y futuras. Estuve hablando con Nama, Mathy, Pater Zeo, Undo, Elendor, Viçens, y el famoso chico de los fanáticos, Wardner. Tuvimos tanto relatos de partidas e historias, como del propio torneo, y además al estar la mayoría de jugadores del Inner Circle, tomamos nota de nuestras pruebas y de que el Templete del Caos y el Juggernaut enano iban a necesitar una revisión profunda. Tengo especial recuerdo de tomarle el pelo a Namarie por su buen desempeño hasta el momento, y de debatir con Elendor y Wardner sobre la lista de 36 fanáticos que este jugaba (acababan de enfrentarse con una partida muy disputada). Cuando me hablaron de que iba a haber una lista así, pensé que sería una trolleada y que eso era aburrido tanto para el que lo juega como para el rival. Pues me equivoqué, mea culpa. Wardner era un chaval superagradable, con un conocimiento táctico profundo tanto del juego como del libro de ejército, consciente de que estaba haciendo y capaz de debatir sobre cuál era el óptimo de esa lista enfocada. Y sí, no era el número de goblins que llevaba pero es que...¡no tenía más! Además, como bien dijo, llegado un cierto punto, las unidades se estorban, y las animosidades son terribles. Fue una charla que me abrió los ojos y me resultó muy enriquecedora, y al tener a Elendor aportando la visión del rival mucho más. Unos minutos antes de que comenzara la tercera ronda, me pasée rápidamente para fotografiar otra tanda de ejércitos, aunque no pude hacerme con todos. Llegó la ronda 3, y tenía mucho que trasladar, cargando con el maletín y con el maletón (claro, yo me iba de viaje al acabar).
Para rematar el día, y tras varias horas de exprimirse el coco, la última partida era una batalla campal a secas. Personalmente, es a lo que al final más jugamos todos, y no venía mal para mi lista. Los escenarios con objetivos propios son chulos para jugar campañas o batallas épicas, pero para jugar un torneo una batalla campal con o sin objetivos adicionales es lo suyo (con objetivos un par de rondas a mí me gusta la verdad).
Empecé a mover unidades como loco de una mesa a otra, y en ese vaivén llegó Athorys, al cual claro, tampoco conocía. Yo vi las miniaturas que acababa de poner en la mesa, y quedé prendado. Lo primero que le dije es que me hacía mucha ilusión jugar contra Elfos Oscuros, porque hasta ese momento las únicas dos facciones que no había tenido nunca enfrente era elfos oscuros y enanos del caos. Además le conté que me encantaba la estética y estaba pensando en arrancar un ejército de estos. Resulta que Athorys había sido el rival en primera ronda de Elendor, que me había dicho que había tenido una disputada batalla fraticida (Altos Elfos contra Elfos Oscuros) contra la lista alternativa de Culto de Slaanesh de Athorys. Antes de decir nada más, como veréis malamente en las fotos, la calidad de la pintura de su ejército era excelsa, gustándome especialmente las diablillas montadas y los jinetes oscuros. Además Athorys se había metido completamente en el lore, y jugaba...¡a Morathi! Yo no soy nada fan de los personajes especiales, pero me encanta Morathi. Me gusta especialmente en la versión en pegaso negro, pero no me voy a quejar de que mi oponente la llevase a pie. Por suerte, de tanto leer el libro de oscuros, y tras haber analizado la lista de Álvaro en el I Torneo Leyendas en Miniatura de Abril, tenía una ligera idea del ejército que veía enfrente. La lista de Athorys se parecía a lo siguiente:
-Morathi (personaje especial), nivel 4, +2 a lanzar hechizos, elige a dedo en Magia Oscura y Saber de Slaanesh (puede combinar), golpe letal, TSE 4+, resistencia a la magia 1, marca de Slaanesh (inmune a psicología), las miniaturas enemigas trabadas deben chequear liderazgo cada ronda de combate o tendrán HA1, odio a altos elfos
-Noble montando en carro de gélidos
-Hechicera nivel 1 con Magia Oscura y 2 pergaminos de dispersión
-10 ballesteros elfos oscuros
-19 lanceros elfos oscuros con marca de Slaanesh (inmunes a psicología) y grupo de mando
-5 jinetes oscuros con lanza
-1 engendro del Caos de Slaanesh (mueve 8D6)
-5 diablillas montadas
-10 bárbaros
-2 lanzavirotes destripadores
-5 caballeros gélidos con grupo de mando
-¿16?¿19?¿20? iniciadas de slaanesh con grupo de mando
La verdad es que me daba un poco igual el resultado, me encantaba el emparejamiento, ya me había resarcido, y simplemente quería hacerlo lo mejor posible y pasar un buen rato. Además Athorys me dijo que le gustaba jugar contra Orcos y Goblins porque siempre resultaba divertido, así que ambos teníamos las mismas intenciones. Spoiler: lo conseguí, pasé un rato de lujo.
En hechizos, Morathi tenía el Viento Gélido (1D6 F3, si mata anula disparo), Palabra de dolor (HA1 HP1 permanece en juego), el Horror negro (45 cm, plantilla grande, cada miniatura chequea fuerza y si falla sufre una herida sin armadura) y Deseos Inalcanzables (coloca un marcador y obliga a una unidad a moverse hacia allí mientras el hechizo permanezca en juego). La hechicera de nivel 1 no recuerdo que tenía, entiendo que el Viento Gélido. Yo por mi parte como siempre, cuatro Miradas de Morko, 1 ¡Morko, zálvanoz!, un Gorko kamina con noz y creo que un Kemacerebroz, un Puñoz de Gorko, un Kabezazo, y un hechizo de combate.
Esta vez había un tablero simétrico, con una colina y un bosque a cada lado, y unas rocas que consideramos impasables en el centro. Siguiendo la estrategia habitual, puse los lobos en los flancos, el centro de goblins, los garrapatos entre ambas partes, máquinas en la colina, un lanzapinchoz centrado y para redondear los snotling donde cabían...detrás de unos lobos pensando en parar al engendro del caos o a las diablillas montadas que amenazaban mis máquinas de guerra. Por su parte, en un flanco dicho engendro y diablillas, ballesteros y hechicera en bosque, un lanzavirotes detrás (muy raro la verdad), y centrados jinetes, lanceros, bárbaros, noble en carro, iniciadas y gélidos, con el otro lanzavirotes solo en la colina. Morathi con los lanceros claro.
Vamos a ver de qué me acuerdo. Empezó él, eso sí.
Su turno 1 fue...poco convencional digamos. En el flanco avanzaron diablillas y engendro, amenazándome con llegar en turno 2, aunque el engendro estaba delante, negándoles la carga. Los ballesteros atravesaron bosque, pero mucho no veían para disparar. Todo el centro avanzó al unísono, salvo los jinetes oscuros, que se lanzaron como elfas brujas hacia mis goblins nocturnos (los del estandarte de la luna amarilla) y le sacaron los fanáticos. Fueron atravesados, y perdieron 3 componentes, pero aguantaron el pánico. En magia pensé que mis garrapatos serían el objetivo, pero no fue así, ya que dispersé unos Deseos Inalcanzables con mala baba (y me di cuenta que tendrían que hacerlo cada turno, o moriría por mis propios garrapatos), me parece que usando un pergamino. Lo que si me entró fue un Horror Negro a la unidad de nocturnos del centro, matando a la mitad y haciéndolos huir hasta casi salir de la mesa (turno 1 y mi línea rota, fantástico). El lanzavirotes escondido no veía nada aún, pero el otro se deshizo de los lobos que tenía delante sin miramientos. Los ballesteros mataron un goblin nocturno de la unidad amarilla, dejándola en 19 integrantes. Lo raro de todo esto es que no le cayera un proyectil a los garrapatos...¡true story!
Mi turno 1 en cambio fue muy normal. Mantuve mi línea en general, salvo que puse los lobos delante del engendro del caos, y avancé los snotling para cubrir al lanzapiedroz tan rápido como pude. Mis nocturnos que huían no se habían reagrupado, huyendo sin siquiera llegar a sacar fanáticos (¡vaya!), así que uno de los garrapatos lo moví lateralmente para protegerme de los lanceros que se acercaban con Morathi. El otro se fue acercando a las iniciadas, pero no recto, no quería que me cargaran cuando tenía la unidad completa. La magia fue bastante prolífica, ya que el Gorko kamina con noz entró, tras haber dispersado mis repeticiones de tirada, y me llevé 3 diablillas montadas y algunas iniciadas, y creo que algún bárbaro, y con el resto de proyectiles acabé con los 2 jinetes oscuros y seguí diezmando las iniciadas hasta dejarlas sobre la docena (mucho menos amenazadoras). En disparo no sé que hizo el lanzapiedroz, probablemente contribuyó a esas bajas que mencionaba en magia, pero sé que de mis dos lanzapinchoz, uno le hizo 2 heridas al engendro del Caos (casi lo mata). La verdad es que no me podía quejar. Lo más cómico de este turno fue que el fanático que en su turno había atravesado a los jinetes oscuros, enfiló directo a la hechicera de nivel 1, y la pilló por un mísero centímetro. Pues aunque no os lo creáis, hice un impacto, y además fallé la herida a 2+. Increíble. Athorys se había puesto pálido, yo ya daba por hecho que la hechicera llevaba dos pergaminos de dispersión, pero creo que se estaba arrepintiendo de no haber usado ya alguno.
En su turno 2, el engendro del caos se hizo amiguito de los lobos, que aguantaron ahí, y las diablillas se colocaron para cargar al lanzapinchoz o lanzapiedroz el turno siguiente. Los ballesteros siguieron avanzando, y la hechicera cambió de lado tras el susto. La infantería avanzó (estaba arrepintiéndose de haberse quedado muy atrás en turno 1, y sus hechizos tenían rango 45 la mayoría), el carro con mucha cautela, y los gélidos extrañamente retrocedieron al ver al garrapato. En este turno concentró la magia y disparo en mis máquinas de guerra, además de que dispersé tanto el Horror negro como los Deseos Inalcanzables. Creo que los virotazos no consiguieron herir a los garrapatos, pero los ballesteros (y disparaban la mitad) causaron 4 impactos al lanzapinchoz de la colina, 3 se fueron a la dotación y todos hirieron. Para que luego digan que disparar a las máquinas de guerra no hace nada...
Mi turno 2 fue el de presionar, ya que había visto sus dudas. Los snotlings terminaron de cubrir al lanzapiedroz, los fanáticos se fueron al bosque, mis nocturnos (los amarillos) se prepararon para los lanceros que venían, y al menos al avanzar no me veían las dos diablillas montadas. En el lado derecho avancé algo los orcos negros y nocturnos, y de pasó mejoré los ángulos de visión de los chamanes. La verdad es que los garrapatos destrozaron su centro. El de la derecha se zampó a los 5 gélidos, y de paso dejó las iniciadas casi finiquitadas, y el de la derecha se se preparó para zampar lanceros oscuros, dándo una oportunidad a mis nocturnos. El disparo y la magia fueron pobres ya que cuando tiré un hechizo a los lanceros aprendí que tenían la resistencia a la magia y dejé de insistir, y gastó un pergamino. Me parece que la catapulta tuvo problemas disparándoles precisamente a los lanceros.
Su turno 3 se dió cuenta de que tenía que ir a por todas, las diablillas pasaron de mis snotling cogiendo la retaguardia y el engendro seguía jugando con los lobos. Los lanceros se prepararon para cargar a los nocturnos, pese a tener el garrapato muy cerca. El carro ya casi solo no podía cargar, y solo pivotó un poco. Creo que los bárbaros se reagruparon tras haber huida el turno anterior, pero no estoy seguro. De nuevo no recuerdo gran cosa de la magia (puede que disfuncionara y acabase la fase de magia, pasó al menos una vez) y disparo, solo que el lanzavirotes retrasado estaba en una posición muy mala, pero el otro le hizo tres heridas al garrapato más cercano.
Mi turno 3 iba en la misma línea. Acerqué a los nocturnos de la derecha a su carro, pero los fanáticos no llegaron, mientras los de la izquierda seguían esperando la carga. El garrapato tocado seguía por ahí atrás, mientras el otro acabó con 5 o 6 lanceros de la escolta de Morathi, un gran alivio para mis nocturnos. Mi magia fue de nuevo neutralizada con un pergamino, y unas tiradas más pobres, y en disparo solo quedaba un lanzapinchoz que se llevó otro par de lanceros.
El turno 4 fue la clave. Es rápido de contar. El carro derrapó y se puso tocando el impasable, de manera que si le tiraba el garrapato moriría al tocar el terreno. Los lanceros con Morathi cargaron a los nocturnos, que superaron el miedo (¿no éramos cobardes?) y en magia me coló unos Deseos Inalcanzables al garrapato más cercano tras fallar yo la tirada de dispersión quedándome corto (y sí, tenía un pergamino disponible). Eso significa que al principio de mi turno, ese garrapato moriría contra el impasable. En disparo, los ballesteros hicieron alguna herida a los snotling y los lanzavirotes abatieron al otro garrapato, que estaba herido. Es decir, en ese turno, iba a perder ambos garrapatos y un bloque de nocturnos, y uno de los chamanes iba a chequear pánico. Mala cosa. Pues pasó lo imposible. Sus lanceros con punta de goma, más Morathi, mataron 0 goblins nocturnos. Sí, 0. Y mis 4 ataques de respuesta (con arma de mano y escudo y sin campeón) mataron 2 elfos. Pues ahí lo véis, además tenía potencia y una fila más que él, así que chequeó con -3...y falló el chequeo. Para más inri, sacó un 15 en la tirada para huir, y mis nocturnos le cazaron con un 16. Creedme, fue para haberlo grabado, porque estas cosas no pasan. Yo estaba flipando, pero no me había dado cuenta de lo mejor.
Comenzó mi turno 4, y cuando fui a dejar morir al garrapato Athorys me recordó que Deseos Inalcanzables es un permanece en juego. Y Morathi había muerto, por lo que se había disipado. Ese turno el garrapato mató a los 7 ballesteros y a la otra hechicera, y un fanático le causó 3 heridas al carro de gélidos y una al noble antes de estamparse contra las rocas. No llegamos a acabar el turno porque un engendro con una herida, 2 diablillas, un carro sentenciado, 2 iniciadas de Slaanesh y 2 lanzavirotes lo tenían crudo ante la marabunta de magia sin nada para dispersar.
Resultado final: 20-0 a mi favor. El resultado refleja la situación final, pero al igual que en mi derrota de la primera ronda, no demuestra lo disputada que estuvo hasta la mitad y la cantidad de cosas que decidió la suerte. Athorys pagó caras sus dudas con el enfoque en los primeros turnos, pero por lo general me puso en varios aprietos y me demostró que si no había ido a por los garrapatos de inicio es porque pensaba matarlos de manera "alternativa". La partida fue fantástica, me lo pasé genial, y al acabar todavía estuvimos 20 minutos comentándola, además de hablar un ratillo sobre elfos oscuros (que no son su ejército habitual, los había pintado para el torneo). La situación con Morathi y los lanceros nos dejó perplejos a ambos, y fue lo que decantó la balanza (aparte de la ineficacia de uno de sus lanzavirotes), ya que no solo me dejó un garrapato vivo, sino el camino libre a mis chamanes, además de que a mí me costaba dispersar porque el +2 a los hechizos de Morathi sumaba a la dificultad continuamente. Me gustó mucho jugar contra Oscuros, aunque fuera una lista alternativa, y poder aprender de aquellos que voy a comandar pronto. La verdad que no pudo ser mejor colofón a la "competición". ¡Gracias Athorys!
Antes de recapitular sobre el torneo, creo que es un buen momento para valorar la lista, ya que os he contado su desempeño en las tres partidas. Por lo general, como comentó en el análisis ya publicado, la lista es buena, funciona, pero tiene un liderazgo bajo y si los dados no acompañan y tu oponente tiene experiencia, puede resultar un desastre. En todo caso, el plan es válido. Si miramos de uno de en uno...
-El gran chamán goblin nocturno es el motor de la lista, sin el hechizo ¡Morko, zálvanoz! todo son riesgos, y ayuda tanto a evitar disfunciones, como a mitigar problemas de la catapulta, mejorar chequeos de liderazgo, afinar los lanzapinchoz o optimizar los impactos de los proyectiles mágicos. Solo usé su bastón un par de veces (suele pasar) pero lo llevo como emergencia ante disfunciones, porque me ha pasado de usarlo para mejorar una tirada que no saca el hechizo, y disfuncionar a continuación (y una repetición no se puede repetir ya, con nada).
-El chamán del portahechizos estuvo correcto, es un objeto que no me gusta, pero me sirvió para saber si podía lanzar mis proyectiles en rango, y alguna herida rasca. Al final lo que quieres matar, como hierofantes y nigromantes, ya se esconden suficiente como para que ni les veas.
-El chamán de los pergaminos no lo hizo mal, aunque le encantaba huir en el momento menos oportuno claro.
-El chamán orco es un mal necesario para dar L7, pero me genera verdadero malestar tener que llevarlo. La piedra de energía la acabas usando antes o después, pero nunca me parece que salga a cuenta, ya que si la llevara el nivel 4 iría mejor, pero no es combinable con el Baztón.
-Los nocturnos con fanáticos, quitando el combate con Morathi (estelar) huyeron mucho, murieron bastante, y los fanáticos hicieron muchísimo menos de lo que deben, ya que no es que no llegaran, es que sacaba triples sin parar para que se enredaran con la cadena.
-Los lobos en su línea, rara vez me sobreviven hasta el turno 3, y al menos pillaron un cuadrante y un objetivo. A veces los uso para apantallar, pero estas veces no surgió. El escudo no estuvo de más, eso sí.
-Los snotlings son buenísimos y valen cada punto que les pagas. Trabar a los espectro condenadores 3 o 4 rondas de combate, a la abominación, marear a las diablillas montadas...los he visto matar a un karro de jabalíes tocado, trabar 4 rondas a un fénix, aguantar una carga combinada de juggernauts de Khorne y furias...que maravilla en Sexta Edición.
-Los lanzapinchoz no estuvieron muy finos, salvo ensartando skavens, pero son baratos y merece la pena tener algo contra monstruos blindados.
-El lanzapiedroz estuvo por debajo de su nivel habitual, pero en este caso, la culpa es mía que fallé estimando mucho más de lo normal, en parte por hacer disparos en diagonal.
-Los orcos negros tan prescindibles como siempre. Aparte de hacer una herida al rey tumulario, repetir una animosidad tonta y esconder al general...nada reseñable. Son muy bonitos, eso sí.
-Los garrapatos bueno. Son muy buenos y por eso los vamos a revisar. Realmente hicieron menos que otras veces porque contra condes vampiro (no chequea pánico, se levanta otra vez, es una horda, tienes etéreos...) y skavens (tiene hordas por todos lados) no es lo mejor, pero aún así mataron lo que no está en los escritos. Me gustan mucho porque son lo que permite jugar listas no combativas, pero si los llevara siempre me aburriría yo mismo. Pero como opción, muy guays, y la miniatura mola. A ver si los pinto.
Hay otro tema más que quería tocar antes de entrar en la clasificación, y con el cual llevo un rato incordiando...¡los ejércitos y sus fotos!
En primer lugar, os voy a pegar aquí la lista de ejércitos participantes desglosados, para vuestro uso y disfrute. Si os fijáis, todos los ejércitos estaban presentes (aunque Caos está unificado, no por libros, pocas Bestias del Caos se vieron), e incluso había una lista de Kislev. Veréis 43 ejércitos, ya que el 44 es el comodín (que me suena que iba con Caos también, no estoy seguro).
Creo que es interesante ver esta tabla, aparte de por los personajes especiales, que como podéis ver solo un tercio de los participantes metió, para ver que ejércitos son los más populares, las variantes creativas de los jugadores, y que al tener tanta gente, hubo prácticamente de todo. Resulta curioso ver tan poco Imperio siendo un ejército tan popular, y tan poco Elfo Silvanos siendo un ejército tan competente, pero demuestra también lo amistoso del torneo. Se juega lo que apetece, como demuestra la presencia de 6 jugadores de Orcos y Goblins o 4 de Enanos.
Lamentablemente no tengo fotos de todos, pero entre las que hice y las que me ha pasado la organización, creo que os podréis deleitar un ratito. He de decir que el nivel de pintura de algunos era brutal, y los jueces debieron pasarlo regular para decidir a quién darle ese premio.
Bueno, ahora sí, es hora de hablar de la clasificación. Os recuerdo por encima...
-Cada partida otorgaba de 0 a 20 puntos.
-La pintura puntuaba de 0 a 14 puntos, y hacía falta un mínimo del ejército pintado para ser puntuado (no recuerdo si era el 75%).
-Había una clasificación al mejor general, sobre 60 puntos. Mención al mejor general.
-Había una mención a la mejora pintura (y concepto, conversiones y tal).
-Había una clasificación conjunta que sumaba mejor general y pintura. Mención al mejor jugador.
-Como siempre, cuchara de palo para el último clasificado (de la conjunta). Con unos dados como premio para que la suerte cambiara.
-Había una mención al jugador que había venido desde más lejos.
En la clasificación al mejor general, el "top 5" fue el siguiente:
1. Tachan (Hombres Lagarto), 56 puntos. Mejor general.
2. Namarie (Caos), 52 puntos.
3. Lecter (Condes Vampiro), 46 puntos.
4. Odrayak (Enanos), 45 puntos.
5 y 6. Elenri (Reinos Ogros) y Alan (Bretonia), 44 puntos.
Como podéis comprobar, Tachan, con su lista difusa (la foto está por arriba) hizo un torneo casi perfecto, además de ganar con claridad a Mathy en la última ronda, que es toda una proeza. Aprovecho para darle públicamente la enhorabuena. En segundo lugar acabó Namarie, aunque con bastante ventaja sobre el resto, y en el rango de los 46 puntos para abajo ya las diferencias de puntos fueron menores. Ver a Lagartos, Caos y Condes Vampiro quedar arriba no es una sorpresa, pero ver los resultados de Enanos u Ogros es muy inspirador para demostrar que en esta edición con MDNR se puede jugar casi de todo.
Clasificación de pintura no os puedo poner, pero sí deciros que hubo varios jugadores con el máximo de 14 puntos, claramente merecido. Al final, la mención fue para Juan y su ejército de matadores de Karak-a-Kadrin, con un aspecto brutal, y que incluía la escultura del portaestandarte de batalla. ¡Bien hecho!
La clasificación conjunta fue aún más apretada, ya que Tachan llevaba el ejército pintado con capas base y poco más, pero muchos de sus perseguidores le habían dado mucho cariño a sus ejércitos. De nuevo el "top 5":
1 y 2. Namarie (Caos) y Tachán (Hombres Lagarto), 61 puntos. Mejor jugador para Namarie en este caso.
3. Alan (Bretonia), 55 puntos.
4. Odrayak (Enanos), 53 puntos.
5, 6 y 7. Elenri (Reinos Ogros), Óscar Mataró (Caos) y Mathy (Orcos y Goblins), 52 puntos.
Como ya os decía, los contendientes del mejor general...¡pero aún más apretados!
Al final Namarie se llevó el torneo, muy muy merecido, y creo que todos nos alegramos por él y estamos muy agradecidos por esta "edición" que nos ha proporcionado. A día de hoy no me explico como pudo ganar con su lista (la conocía de antemano, no esperaba que quedara mejor del top15, y eso sabiendo que juega bien...) pero una vez más queda demostrado que con cabeza, sabiendo lo que quieres hacer, un poquito de suerte y unos cruces decentes, se puede ganar con cualquier cosa. Y además...tenía a Cthulhu.
La cuchara de palo fue para Edgar, mi rival skaven de la segunda ronda, que al tener el ejército sin pintar no pudo sumar nada de esa categoría. ¡El próximo año todo hacia arriba!
Para acabar, la organización tuvo el detalle de acordarse de los jugadores que habíamos venido desde "lejos" y la mención al jugador con el desplazamiento más largo me la birló Elendor, pero él sabe que si me hubiese quedado en Arabia Saudí unos meses más ese diploma era para mí. A ver si le engaño para que venga a Madrid al próximo torneo...
Una vez comentada la clasificación en sí, y volviendo a mi experiencia en concreto, he de decir que mi objetivo (lógicamente) era intentar ir a por la mención de mejor general, pero mis expectativas reales eran situarme entre el tercio superior de la clasificación (en el top15 vaya). Al final, pese a los malos resultados de la primera ronda, con 40 puntos acabé empatado con Larkin (Reyes Funerarios) y Raisen (Caos) por los puestos 9, 10 y 11, que la verdad es un muy buen resultado con el que quedo muy contento.
En el apartado de pintura, consciente de mi nivel, de que llevaba los garrapatos sin pintar, las peanas sin tunear y que desentonaban un poco las miniaturas que me había prestado Jorge (porque las suyas están mejor pintadas y tienen peanas decoradas, lo cual envidio), esperaba sacar 7 puntos de los 14 (poco más, poco menos), y la organización me otorgó 6, con lo cual no andaba muy descaminado. Ya tengo una referencia para la próxima.
Al sumar los puntos de ambas categorías, con 46 puntos de 74 posibles acabé empatado con Pater Zeo (Condes Vampiro) por los puestos 15 y 16. La verdad es que tampoco está nada mal visto el nivel de pintura de los jugadores.
Tras otorgar las menciones y que los agraciados recibieran sus merecidos aplausos, pasamos a la parte del sorteo. Creo haberlo dicho antes, pero las inscripciones se destinaban íntegramente a gastos del torneo y a sorteos, no a premios, que es una manera perfecta de lograr un ambiente más distendido. No sé como estiraron tanto de sí ese presupuesto, pero si no le cayó un sorteo a cada jugador, estuvo muy cerca. Además, algunos jugadores habían aportado miniaturas, blisters o accesorios de su colección personal para los sorteos, una idea muy buena que en Leyendas en miniatura nos apuntamos. Creo recordar haber visto sortearse una cajita de fanáticos, miniaturas de Raging Heroes, Mom, Reaper, Gamezone, Avatars of War, Games Workshop, Frostgrave, blisters de escudos, libros, e incluso miniaturas de otros juegos...al final aquello parecía una tómbola, muy guay también. En mi caso, en uno de los últimos sorteos me tocó un kaudillo orco en jabalí de Avatars of war muy chulo (y muy grande) que tendrá que pasar a engrosar mi Whaaagh. Me hubiera quedado y pintado cualquier miniatura que me hubiese tocado como recuerdo, pero esta además, la podré usar, así que mejor que mejor.
Tras el sorteo y la despedida, y una breve conversación con los árbitros y organizadores, tocó ponerse en marcha de nuevo, ya que tenía un tren que coger. Esta vez en el coche de Namarie, además de los presentes a la ida, llevábamos a Elendor, que estaba alojado cerca de Sants (que era donde me tenían que dejar a mí) así que mi tremendo maletón pasamos a tener que llevarlo en brazos entre varios. ¡Siento el agobio chicos, gracias por llevarme! La verdad es que el ambiente a la vuelta era tan festivo como a la ida, con las bromas añadidas a Namarie por su victoria. Llegué a la estación con la holgura suficiente para una breve charla y despedida con Elendor, comprar un bocadillo y montarme al tren, que me llevó a Madrid "en un periquete". La verdad es que viajar en AVE es muy cómodo, pero mi nivel de cansancio ya era brutal. En todo caso había merecido la pena, aunque fue llegar a casa, deshacer la maleta, preparar otra, dormir unas horas, e irme de viaje de trabajo toda la semana siguiente...¡vaya rachita!
Ya vamos acercándonos al fin de la crónica, y es un momento tan bueno como cualquier otro para dedicar unas palabras de agradecimiento, ya que creo que es importante valorar experiencias como esta por las personas con las que las compartes.
-En primer lugar, y aunque no tengan mucho que ver con Warhammer, unos agradecimientos a Carles y Leonor por acogerme esos días, siempre es un placer disfrutar de su compañía y son de los mejorcito que me traje del Erasmus.
-A Elendor, Funda, Namarie y Álvaro por esa tarde-noche tan divertida de pretorneo. Ojalá se hubiese animado más gente, porque es digno de recordarse.
-A Namarie por el contingente de elfos oscuros, y por traerme y llevarme al torneo, facilitándome un montón la vida.
-A los miembros del Inner Circle, Namarie, Mathy, Elendor, Pater Zeo, Undomain y Paco, por el trabajo logrado, y por el tiempo que dedicáis. Es un placer haberos podido conocer a casi todos y disfrutar de unas partidas con vosotros.
-A todo el equipo del Namabus, esos dos viajes fueron cortos pero intensos.
-A la organización por ser flexible y atenta conmigo, cuando no tenía claro si al final podría asistir, por responder pacientemente los mails de dudas, por preparar un torneo fantástico, dedicar de manera desinteresada vuestro tiempo, por montar un evento de estas características y aseguraros de que todo sea fluido, por ser tan receptivos con el feedback y por seguir dejándoos liar por mis ideas, y por las fotos claro. Gracias Alberto, Victor, Edgar, Antonio, Javi, Carla, Carlos, Jorge, Sergio y Paco. Sois muy grandes Corredores de Sombras.
-A mis rivales, Viçens, Edgar y Athorys, por unas partidas desafiantes, instructivas, interesantes, divertidas y sobre todo tener esa sensación que tanto une a veces de que tanto tu rival como tú estáis peleando a la vez contra los mamones de los dados.
-A todos los participantes, perdonadme que no os enumere, pero el ambiente fue genial, y de verdad me sentí como uno más. Es estupendo ver a tanta gente disfrutando y compartiendo un hobby de esta manera, y solo puedo decir que me quedo con ganas de haber podido jugar contra muchos de vosotros. Pero no se pueden jugar tantas rondas...creo.
-A toda la gente que se pasó por allí a cotillear, o a apoyar a sus conocidos. Me quedo especialmente con un grupo de abuelos que se acercó a la mesa mientras estábamos jugando y lo comentaban superinteresados.
-A Jorge por dejarme las miniaturas que me faltaban.
-A los jugadores de MDNR de Madrid que se prestaron voluntarios a hacer de sparring o me dieron ideas para el torneo.
-Y a tí, querido lector, que has llegado hasta aquí, y que al que ojalá haya podido transmitir mis sensaciones, porque cuando me estaba subiendo en el tren, lo que pasaba por mi cabeza era "espero poder venir el año que viene".
Bueno, es un poco ridículo hacer una valoración del torneo a estas alturas, creo que mi opinión es más que evidente, pero a modo de conclusiones, creo que es lo suyo. El torneo fue de 10, todo facilidades, suficiente espacio, el bocadillo estaba bueno, la escenografía cambiaba en las mesas (no una locura, pero es normal con tantos jugadores), los escenarios son entretenidos pero lo bastante simples, los árbitros pacientes, el ambiente festivo, algunos ejércitos preciosos, los sorteos abundantes, las anécdotas brutales, el horario se respetó pese a los agobios de algunas partidas, el nivel de juego bastante alto pero sin perder el espíritu de juego...lo difícil va a ser mejorarlo el año que viene.
Para que os hagáis una idea, cuando se empezó a hablar de este torneo, yo estaba trabajando en en el extranjero, y no tenía nada claro si podría asistir. Poco antes había tenido la oportunidad de participar en el I Torneo Leyendas en Miniatura, y había salido encantado, y en los últimos tiempos había estado colaborando con el Inner Circle de los MDNR, con el cual había intercambiado muchos (pero muchos muchos) correos. En resumen, tenía unas ganas locas de participar y conocer a varios jugadores, además que el grupo MDNR de Barcelona tiene más integrantes y más solera, por lo que hacer un buen papel me parecía un reto atractivo.
Durante el verano, decidí cambiar de aires y buscar un nuevo trabajo, por lo que aunque tenía tiempo, no sabía si empezaría en algún sitio. De todas maneras en ese momento había un total de 8 jugadores del grupo de Madrid planteándose asistir al torneo, por lo que pensábamos en alquilar coche/coches, ir allí el sábado y volver después. En mi caso concreto, tengo algunos amigos en Barcelona (cosas de la experiencia Erasmus), por lo que pensaba en quedarme un par de días más para amortizar el viaje y disfrutar de su compañía.
Comenzamos a pensar en prepararnos. Nosotros estábamos acostumbrados a jugar 7ª edición, por lo que empezamos a darle caña a 6ª para acostumbrarnos. Además empezamos a compartir y debatir las listas, ya que el punto de vista de otros oponentes (o jugadores con experiencia en general) tiene un gran valor, te ayudan a ver las cosas que se te escapan. Quiero agradecer a David, Juanma, Dani, Jorge, Alberto, Manu y Raúl sus consejos, porque me han sido valiosos. A lo largo del mes de septiembre y octubre, por motivos varios, se me fueron cayendo los compañeros de expedición, pero aún así conté con rivales voluntarios para ayudarme a practicar, pese a que sabían que iba a jugar una lista más bien afilada. Mis agradecimientos a Manu (Reyes Funerarios), Raúl (Altos Elfos por duplicado), Jorge (Machotez de Grimgor), Dani (Hombres Lagarto) y Álvaro (Caos Mortales) por esas partidas de práctica, que me sirvieron para valorar qué riesgos podía asumir y cuáles no. A final de septiembre empecé de nuevo a trabajar, así que la posibilidad de conseguir un par de días de vacaciones para mis planes fue complicada, pero por suerte en el último momento me las aprobaron. Lamentablemente, al final nadie pudo acompañarme, ya que éramos pocos para ir en coche, y el precio del AVE se había disparado bastante. Pero al menos mis Orcos y Goblins estaban preparados para lo que pudiera encontrar.
Para completar mi ejército necesitaba adquirir algunas cosillas, así que aprovecho de nuevo para agradecer. A Raúl por los 5 jinetes de lobo, a Luis por hacerme más fácil conseguir los garrapatos dezpachurradores, y a Jorge por prestarme 5 lobos, 1 chamán y 1 fanático para completar la lista. También pude comprar los snotlings que me faltaban, que fue lo último que pude pintar antes del torneo. Fue una pena no tener pintados los garrapatos, pero me quedé sin imprimación y sin tiempo.
Sobre la lista, he preparado un artículo completo de análisis, que podéis leer aquí, pero la idea básica es bombardear al rival con magia y máquinas de guerra, usando el hechizo ¡Morko, zálvanoz! para ganar fiabilidad y pegada. Para maximizar eso utilizaba unidades de ralentización de avance, dos garrapatos dezpachurradorez para causar el caos y destrozar bloques, y una pequeña unidad de orcos negros para repetir animosidades y rematar unidades tocadas. La lista es la siguiente:
Comandantes
-Gran chamán goblin nocturno con arma de mano, 1D3 setas mágicas, nivel 4 y Baztón rugozo de Buzgob (permite repetir la tirada de un hechizo por turno) 245 puntos
-Gran chamán goblin nocturno con arma de mano, 1D3 setas mágicas, nivel 4 y Baztón rugozo de Buzgob (permite repetir la tirada de un hechizo por turno) 245 puntos
Héroes
-Chamán goblin nocturno con arma de mano, 1 seta mágica, nivel 2 y Aro Pegapiñoz de Nibbla (portahechizos Kabezazo) 120 puntos
-Chamán goblin nocturno con arma de mano, 1 seta mágica, nivel 2 y 2 pergaminos de dispersión 145 puntos
-Chamán goblin nocturno con arma de mano, 1 seta mágica, nivel 2 y 2 pergaminos de dispersión 145 puntos
-Chamán orco (general) con rebanadora, nivel 2 y piedra de energía (2 dados extra de energía en un hechizo, un solo uso) 125 puntos
Básicas
-21 goblins nocturnos con arma de mano y escudo, músico y 3 fanáticos 121 puntos
-20 goblins nocturnos con arma de mano y escudo, músico y 3 fanáticos 119 puntos
-20 goblins nocturnos con arma de mano y escudo, músico y 3 fanáticos 119 puntos
-20 goblins nocturnos con arma de mano y escudo, músico y 3 fanáticos 119 puntos
-20 goblins nocturnos con arma de mano y escudo, músico y 3 fanáticos 119 puntos
-5 jinetes de lobo con arma de mano y escudo, músico 61 puntos
-5 jinetes de lobo con arma de mano y escudo, músico 61 puntos
-4 peanas de snotlings 100 puntos
-5 jinetes de lobo con arma de mano y escudo, músico 61 puntos
-4 peanas de snotlings 100 puntos
Especiales
-2 lanzapinchoz 70 puntos
-1 lanzapiedroz 70 puntos
-10 orcos negros con rebanadora, arma a dos manos, escudo y grupo de mando completo 163 puntos
-1 lanzapiedroz 70 puntos
-10 orcos negros con rebanadora, arma a dos manos, escudo y grupo de mando completo 163 puntos
Singulares
-1 garrapato dezpachurrador 240 puntos
-1 garrapato dezpachurrador 240 puntos
Total: 1999 puntos
Pues allí que me fuí, en AVE, el jueves por la mañana, con un maletón poco maniobrable. El avión era más barato, pero transportar en avión las miniaturas me daba cero confianza, así que me rasqué el bolsillo (además me gusta mucho más viajar en tren). Estuve con mis amigos de jueves a sábado, disfrutando de la ciudad, poniéndome al día, y aunque nuestra excursión programada a Port Aventura se torció por la lluvia, pude conocer Tarragona, que es una ciudad muy bonita con unas ruinas romanas impresionantes, que recomiendo visitar. Puede parecer una chorrada, pero esto es algo que he aprendido de leer reportes de torneos de Magic the Gathering. Si viajas a un torneo, aprovecha para conocer el lugar y redondear el viaje ampliando tus horizontes. Estos viajes son una experiencia, no simplemente una competición.
El sábado por la tarde, me junté con Elendor, que venía desde Bruselas con un plan bastante parecido, y nos dimos una vuelta. Pasamos por el "triángulo friki" pero fuimos capaces de evitar entrar en las tiendas...porque no nos daba tiempo. Esa tarde-noche, Namarie había convocado una cervezena, y aunque los asistentes fuimos pocos, lo pasamos muy bien en el bar del alemán. Gracias a Nama, Elendor, Funda y Álvaro, la verdad que estuvo muy bien, y el tapeo posterior tampoco estuvo nada mal. La cantidad de anécdotas de Namarie es brutal, y da gusto saber más de como surgieron los Manuscritos de Nuth. ¿Vosotros habéis matado un león? Pues si no habéis matado un león, no os voy a contar ese origen. Haber asistido. Lo que si os puedo contar es que Nama me obsequió con algunos elfos oscuros que tenía por ahí, así que ahora me veré forzado a darles buen uso.
Como no podía ser de otra manera, esa noche dormí 3 horas, algo perfecto antes de hacer un ejercicio mental prolongado. A la mañana siguiente, el Namabus tuvo el detalle de recogerme para ir a San Feliú, y en el trayecto conocí a Ermengol y su porta con arma a dos manos, a Juan el Héroe (¡oh capitán, mi capitán!), a Mathy (el escriba skaven) y a Paski (un pobre engañado para el torneo, de vuelta a 6ª). Fue muy divertido, con mogollón de bromas, anécdotas, banda sonora acorde, críticas de cine...¡esa era precisamente la idea de haber ido a Barcelona en coche compartido!
Llegamos al pabellón un poco justos, casi los últimos, pero aún a tiempo, y encontramos 22 mesas preparadas y una pequeña plataforma con un proyector para la dirección del torneo. Además nos agasajaron con zumos y algunos bollos para desayunar (¡qué nivel!). La sala estaba repleta, casi todo el mundo de charla amistosa o saludando a conocidos. Yo aproveché para acercarme a Álvaro y comentar un poco por encima nuestras expectativas del torneo y el ambiente brutal. ¡44 participantes! Eran más del doble que el año anterior, una convocatoria muy alta. Y yo que pensaba que cuando en las bases ofertaron 68 plazas era coña...
Bueno, sé que estoy poniendo a prueba vuestra paciencia. ¡Vamoz a laz tortaz!
Antes de entrar en materia, una mención sobre puntuaciones:
-Las partidas podían otorgar de 0 a 20 puntos. El empate es un reparto 10-10, y el máximo (jezzailado) que es 20-0 requería ganar por 1600 puntos si mal no recuerdo, es decir, estaba un peldaño por encima de masacre.
-Al ser tres partidas el máximo de puntos eran 60 para la clasificación de mejor general.
-La clasificación de pintura otorgaba hasta 14 puntos.
-Había una clasificación mixta que unía ambas cosas, siendo el máximo por tanto 74 puntos.
Ronda 1:
Orcos y Goblins (Cordo) VS Condes Vampiro-Lista nigromántica (Viçens)
Escenario Sangre y Gloria
El escenario era una batalla campal que comenzaba con despliegue oculto (dibujar el despliegue en un papel antes de empezar). Además, el general daba 200 puntos de victoria adicionales, y luego hasta 2 personajes/estandartes daban 150 puntos de victoria adicionales. Yo pensaba que sustituía a los bonos adicionales habituales (100 por general o estandartes), pero como por otro lado el escenario decía calcula los puntos de batalla campal de la forma habitual, acordamos que eran adicionales a los adicionales. Es decir, que el general daba 300 puntos extra, los estandartes si eran objetivo daban 250, los personajes objetivo 150 extras, y si había estandartes no objetivo, 100 puntos. Probablemente debimos preguntar, pero acabamos la partida con 1 minuto de tiempo, y no queríamos retrasar el torneo (además de que no cambiaba mucho).
El escenario era una batalla campal que comenzaba con despliegue oculto (dibujar el despliegue en un papel antes de empezar). Además, el general daba 200 puntos de victoria adicionales, y luego hasta 2 personajes/estandartes daban 150 puntos de victoria adicionales. Yo pensaba que sustituía a los bonos adicionales habituales (100 por general o estandartes), pero como por otro lado el escenario decía calcula los puntos de batalla campal de la forma habitual, acordamos que eran adicionales a los adicionales. Es decir, que el general daba 300 puntos extra, los estandartes si eran objetivo daban 250, los personajes objetivo 150 extras, y si había estandartes no objetivo, 100 puntos. Probablemente debimos preguntar, pero acabamos la partida con 1 minuto de tiempo, y no queríamos retrasar el torneo (además de que no cambiaba mucho).
Como os podéis imaginar, no conocía a Viçens, pero solo puedo tener buenas palabras. Traía un ejército muy bien pintado (y con una lista tan extensa tiene mérito), bien pensado y que a mí personalmente, es la variante de Condes Vampiro que me gusta. Además durante la partida tuvimos varios debates tácticos, con lo cual los dos aprendimos al ponernos en la piel del otro, y me comentó que solía jugar Elfos Silvanos, así que estaba aún aprendiendo a sacarle jugo a sus no muertos. Os digo esto para que os déis cuenta de que pese a estar en la ronda 1 de un torneo lo principal era pasarlo bien. Viçens jugaba la lista alternativa de nigromantes, es decir, iba sin vampiros. Aparte de eso, la principal ventaja de esta lista, son zombis y esqueletos más baratos y el acceso al Sagrario Mortis como unidad especial. No tengo su lista detallada, pero era tal que así:
-Maestro nigromante (general) nivel 4, llevaba la Capa de sombras y niebla que lo hacía etéreo y sino me equivoco el objeto de un dado de energía y un dado de dispersión adicionales.
-Nigromante nivel 2, llevaba 1 pergamino de dispersión y Libro de Arkhan (portahechizos danza macabra de Vanhel).
-Nigromante nivel 2, llevaba el Bastón de la condenación (portahechizos vigor antinatural en área).
-Señor tumulario, llevaba el Libro Maldito (las unidades enemigas a 15 cm tienen -1 a impactar en cuerpo a cuerpo).
-20 esqueletos con arma a dos manos y grupo de mando (aquí iba el señor tumulario).
-25 zombis con grupo de mando (un nigromante nivel 2).
-25 zombis con grupo de mando (el otro nigromante nivel 2).
-25 zombis con grupo de mando (el maestro nigromante nivel 4).
-5 caballeros negros.
-5 espectros condenadores.
-1 sagrario mortis.
-5 murciélagos vampiro.
-1 doncella espectral.
-1 doncella espectral (otra).
Personalmente, en cuanto ví la lista sabía que tenía enfrente el que para mí era mi peor emparejamiento (de todas las facciones posibles), ya que llevaba mucha magia (y por ende dispersión), no le podía provocar pánicos, iba a levantar lo que le matara con facilidad, daba miedo (ideal para mis liderazgos 5, 7 de mi general), y además tenía 4 terrores y 3 gritos de la doncella. De todas maneras, me gustan los retos, y me preparé para hacerlo lo mejor posible.
En cuanto a hechizos, recuerdo que él tenía por supuesto un porrón de Invocaciones de Nehek, una Mano de Polvo, y una o dos Maldiciones de los Años, y creo que Vigor Antinatural. Además por mi experiencia jugando con Pumu intuía sus dos portahechizos. Por mi parte mi generación de hechizos fue pobre. Sé que tenía mis 4 Miradas de Morko, unos Puñoz de Gorko, un Kabezazo, el ¡Morko, zálvanoz!, un Pie de Gorko y un par de hechizos de combate. Realmente hubiera sido muy importante para mí sacar tanto Pie de Gorko como Gorko kamina con noz, pero es lo que hay.
En el tablero, en mi lado había colina (lo escogí por las máquinas de guerra claro) y bosque, en el suyo un bosque frente a mi colina, y en el centro una torre y unas rocas que acordamos impasables. Pensé que dado que su ejército tenía un buen emparejamiento querría acercase rápido (4 terrores, voladoras, caballería, gritos...) y se colocaría centrado, así que hice eso, y puse en mis flancos los lobos pensando en coger cuadrantes o retaguardias. Los garrapatos dezpachurradores son inmunes a psicología, pero si recibían una carga de algo etéreo se morirían al momento (al no matar a lo que le carga) así que los puse en los lados para intentar salvar al menos uno. Los snotlings estaban delante de las máquinas de guerra porque son la ostia. Y no es discutible. Viçens hizo un flanco rehusado, apiñando todo en la zona limpia, que de paso tenía cierta protección gracias a la torre de máquinas en la colina, dejando los murciélagos en el otro extremo (supongo que pensando en mis máquinas en colina evidentes) y una doncella en la linde del bosque.
A estas alturas los turnos se me difuminan y mezclan, pero intentaré ser cronológico.
Empecé yo, por suerte. Avancé ligeramente para darle rango de hechizos a mis chamanes, saqué a los lobos de visión de los chamanes, y moví los garrapatos en direcciones poco agresivas (uno tocando bosque para que moviese la mitad) para no ponerme en rango de carga de los etéreos. Mis fase de magia fue prolífica, ya que maté a la doncella espectral del bosque, y le hice gastar a Viçens su pergamino en turno 1. Lamentablemente el disparo me falló, aunque intenté con todo ir a por el Sagrario Mortis. No estoy seguro si en este turno conseguí hacerle 1 herida con lanzapinchoz, pero lo que si sé seguro es que estimé muy mal con la catapulta y la piedra se fue fuera del polideportivo.
En su primer turno, mi oponente avanzó, apiñándose en el paso amplio, escondió a la doncella tras la torre (pero no llegaba a gritar a los orcos negros) y levantó zombis y esqueletos. Yo tenía una posición delicada. Os explico. Cuando alguien se te acerca a 20 centímetros de los goblins nocturnos, los fanáticos salen en la dirección que eliges. Pero si alguien te invoca zombis dentro de ese rango, los goblins se sorprenden, y los fanáticos salen en direcciones aleatorias. Por este motivo, tenía que ser muy conservador con aguantar los dados para los últimos hechizos. Por ese motivo, una unidad de zombis se fue a los casi 30, y los esqueletos a los 28. Creo que paré una invocación más, y una maldición de los años le entró a una unidad de nocturnos matando a 4, ya que hice una tirada floja para dispersar.
En mi turno 2, el garrapato de la derecha se movió para evitar estar en rango de carga de los 30 zombis, y el de la derecha para salir de la visión de los espectros condenadores. Los snotlings que se pusieron en la cara de los espectros condenadores para retenerlos. Los lobos de la derecha fallaron animosidad. Llevaba un total de 5 unidades con animosidad, y los orcos negros casi exclusivamente para repetir esos chequeos. Pues fallé 4 animosidades (todos los nocturnos, y los lobos de la derecha), y solo salvé una por la repetición. Muy goblin la verdad. En este turno el Pie de Gorko liquidó a la segunda doncella, y el Sagrario Mortis resistió varios proyectiles, además de que dispersé la maldición de los años. No teníamos nada claro si funcionaba solo en sus turnos (ahora está erratada) o también en el mío, y no podía comerme otro pánico ahí. La catapulta se volvió a pasar bastante, pero los lanzapinchoz si que lo dejaron con 3 heridas.
El turno 2 de Viçens fue raro, ya que sus caballeros negros no cargaron a mis lobos, y se le olvidó cargar con los murciélagos a las máquinas. Eso sí, los espectros condenadores se enzarzaron con los snotlings. El sagrario mortis pasó al lado de mi garrapato (la peana está sobredimensionada), dispersé uno o dos hechizos y el portahechizos, y me coló otra invocación en la unidad grande de zombis. Sé que gasté un pergamino en evitar que me plantara una de zombis delante de los nocturnos de mi flanco izquierdo.
Mi turno 3 siguió en la misma línea. Intenté cargar con los lobos al flanco de los espectros condenadores (hubiera pasado a tener potencia, flanco y músico) pero fallé el terror y huí hasta casi el borde de la mesa. El garrapato se llevó el sagrario mortis por delante, el otro garrapato se acercó con malas intenciones a la unidad del maestro nigromante (aún no sabía que era etéreo) y mis unidades recularon los que pudieron, salvo los lobos del flanco izquierdo que tentaron carga a los caballeros negros. Los lobos de la derecha se reagruparon al menos. En este turno se que entre magia y disparo maté algunos zombis y esqueletos, y el Pie de Gorko se llevó por delante 4 caballeros negros, dejando solo al campeón. A decir verdad, en este momento, iba ganando por algo así como 600 puntos y empezaba a ver alguna posibilidad. Daba por pérdidas las máquinas ante los murciélagos, pero si conseguía concentrar la magia podía empezar a eliminar unidades de zombis, ya que había matado todo lo no levantable (menos un caballero negro, los espectros trabados y los murciélagos).
Pues en el turno 3 empezó el colapso. Los murcis cargaron al lanzapinchoz, que huyó por miedo y salió de la mesa. Lamentablemente los murcis estaban a más de 50 del borde y no salieron del campo de batalla, con lo que volverían a cargar después. Él caballero negro cargó a los 5 lobos (yo partía de potencia y músico, él necesitaba hacer 2 heridas con 3 ataques entre jinete y montura), fallé miedo, pero solo impactaba a 6s, ya que al tener más potencia no me hacía huir. Su unidad mayor de zombis se tiró contra la de nocturnos tocada, y pasé el miedo. Por el camino sacó 6 fanáticos, pero por mucho que le rebajara, seguía teniendo más potencia que yo. No os creáis que en este turno le entró demasiada magia, pero el combate fue ridículo. Los lobos de la izquierda se llevaron 2 heridas, chequearon a L5 y huyeron de la mesa. Los goblins nocturnos perdieron por poco, pero huyeron por miedo. Al perseguir fueron alcanzados, y además los zombis se trabaron con el flanco de la siguiente unidad de nocturnos. En el proceso el chamán más cercano (el del pergamino restante) falló pánico y se fue de paseo. Lo único bueno es que los snotling seguían ahí.
Llegamos al turno 4, donde todo se decidió. Los lobos reagrupados se fueron al cuadrante enemigo para llevarse los puntos. El chamán del pergamino siguió corriendo. De los 6 fanáticos, 4 la palmaron y los otros 2 no dieron a nadie. Los garrapatos hicieron su trabajo y rebajaron la unidad del maestro nigromante a 9 o 10 zombis. Con magia bajé la otra de zombis libre a 15 o así. Incluso maté algún esqueleto. Pero se lió parda. Los goblins trabados por el flanco perdieron. Fueron alcanzados en la persecución. En el proceso hicieron huir por pánico al lanzapinchoz, a la otra de nocturnos (había tirado los fanáticos hacia la colina en algún momento), al chamán del portahechizos, y al gran chamán nivel 4. Además murió el último snotling. Es decir, solo mantenían los garrapatos, los orcos negros con el general y 5 lobos disciplinados.
En su turno 4, remató la faena. Los espectros condenadores cazaron al chamán del garrapato (y su bonus de puntos). Los murciélagos (había matado 2 el turno anterior con magia) a la dotación de la catapulta que huía por miedo. La pinza se iba cerrando sobre los orcos negros. Y la unidad del nigromante (10-11 zombis y él) se fue a por mi garrapato. Él sabía que el nigromante era etéreo, así que mi garrapato iba a morir, su único temor de no haber cargado antes con él solo era quedarse a tiro de mi Pie de Gorko, pero ahora solo me quedaba un chamán nivel 2 generando dados. Además como la resolución del combate con el garrapato es en la fase de combate cuando le cargas, en magia podía levantar zombis para amortiguar el golpe. Utilicé mis 3 dados para intentar evitar la invocación de Nehek en esa unidad, que me podía haber dado la partida (si el nigromante se quedaba solo y reagrupaba mi nivel 4, tenía una oportunidad), pero me quedé corto. Además mi portapergaminos estaba huyendo. A partir de ahí entro una segunda invocación, y una maldición de los años a los orcos negros, matando a 3.
No se me da bien rendirme, así que intenté pelear por los puntos. En turno 5, reagrupé la dotación de lanzapinchoz, el chamán portapergaminos (tarde), los nocturnos y el chamán nivel 4 (sí, todo, tarde, pero todo). Los fanáticos de nuevo no hicieron nada, y mi garrapato superviviente volvió a matar algunos zombis de la unidad del maestro nigromante pensando en rascar media unidad con suerte al final de la partida. Saqué a mi general (el chamán orco) de los orcos negros, para hacerle elegir a qué chamán pillar con los murciélagos, intenté matar esos murciélagos con magia sin éxito, y le colé el Kabezazo al caballero negro superviviente con el chamán portapergaminos. Lo hice para rascar media unidad, pero el impacto de F4 sin armadura me falló. Lo había intentado en vez de dispersar la maldición de los años en los orcos negros, y palmaron algunos más. Además, mi general murió por el hechizo. Aquí cometimos un cúmulo de errores. Lo primero, la maldición de los años tenía una doble errata. Solo actúa en el turno del jugador no muerto, y además hace una herida sin armadura, no mata (con los cual no solo no se comía una herida el general, sino que no moría). Por si fuera poco, he comprobado las erratas y un personaje que abandona una unidad bajo el efecto de un permanece en juego, deja de estar afectado por el hechizo salvo que este diga lo contrario. Es decir, un TRIPLE error de casi 500 puntos. No hubiera cambiado la partida, estaba perdida e iba a morir, pero le habría hecho elegir, y quizás habría salvado algunos puntos de otro lado. No culpo a Viçens, era una errata y una interacción que dudamos, pero ninguno teníamos claro. Ahora ya no se me olvidará al menos.
En su turno 5, cazó al gran chamán nivel 4, a la dotación del lanzapinchoz y los espectros condenadores cargaron a los nocturnos, huyeron por terror, y fueron alcanzados. La maldición de los años (a 4+) me dejó en tres orcos negros y dispersé su portahechizos de la Danza de Vanhel para evitar carga en magia. Lógicamente, todas sus unidades estaban ya por encima del 100% de miniaturas iniciales.
En mi turno 6, seguí intentando buscar el 18-2 en vez del 20-0. Escondí al chamán de las setas en el bosque. Me llevé al garrapato lejos del follón para evitar sorpresas y coger cuadrante si él se despistaba. Y declaré carga de los 3 orcos negros a una unidad de zombis para intentar matar a ese nigromante nivel 2 (que además daba puntos extra por escenario). Fallé el miedo y me quedé clavado. Pero al menos dispersé la maldición de los años que ya iba a 3+, no tenía otra cosa que hacer.
Nunca hay que perder la esperanza. En turno 6, Viçens se confió. Cargó con la unidad de esqueletos a los tres orcos negros. Se acercó con el maestro nigromante al bosque para tirarle maldición de los años al chamán restante (¡qué avaricia!). Pues disfuncionó. Y sacó un doble 1 en la tabla. En ese momento me quedé congelado. Si ese maestro nigromante moría, entre su valor y el objetivo del escenario, eran cerca de 600 puntos. Además de chequeos en todas las unidades, sabiendo que por ejemplo los caballeros negros, los murciélagos o los espectros condenadores podían venirse abajo. Consultamos la tabla de disfunciones, y lamentablemente en esta edición solo sufre un impacto de F10 (y todo lo que tenga en contacto). Sabía que la tabla tenía FAQS, así que me acerqué al árbitro a consultar, pero la única errata aclara que también afecta otro impacto a la montura si la tienes. No pasa nada, aún me quedaba un as en la manga. Viçens iba a acabar con mis orcos negros cuando de repente...¡te desafío! Sin pensarlo dos veces, Viçens aceptó el desafío de mi campeón orco negro con su rey tumulario. Craso error, ya que yo tenía dos ataques de HA5 F7 y él con con HA4 R4 TSA 3+ se arriesgaba a morir y concederme cerca de 250 puntos. Mi campeón sobrevivió al duelo, pero solo consiguió causar una herida en el rey tumulario, para lamento mío. Lógicamente, la unidad huyó por miedo en la resolución, y fue alcanzada (y el estandarte le dió bonus de puntos, quizás podía no haber dispersado la maldición y dejar que murieran a 3+ en el turno anterior los tres supervivientes, negándole la captura del estandarte). Al final solo tenía en mesa 1 chamán, 5 lobos y 1 garrapato, ante una marea de muertos vivientes interminable.
Resultado final: 20-0 a favor de Viçens. Merecido sin duda. Yo luché con uñas y dientes por sacar 2 o 4 puntos hasta el final, intentando propiciar situaciones que me dieran puntos (cuadrantes, matar al caballero negro, acabar con los murciélagos, ir a por el maestro nigromante, matar a otro nigromante, ir a por el rey tumulario, hacerle elegir que chamán cazar...) pero una y otra vez las cosas no salieron bien. Creo que de no haber cometido ese triple error con la muerte del general, quizás hubiera salvado algún punto más para el 18-2, pero tampoco había ninguna seguridad dado el dominio de mesa que mi oponente consiguió establecer. No sé si no debería haber sido más agresivo ante el emparejamiento desfavorable, haber buscado con los chamanes visión a la unidad de su general, y haberle tirado todo a lo loco. Pero no podía ignorar las unidades que causan terror con estos liderazgos, y realmente en turno 3 iba ganando con una ventaja considerable, así que no quise jugármela a cara o cruz. Creo que podía haber jugado mejor. Creo que podía haber tenido más suerte. Estoy seguro que debería haber dormido más la noche anterior. Pero el resultado fue justo, el oponente fue formidable (y se notó la experiencia porque me dispersó el ¡Morko, zálvanoz! casi todo el tiempo) y aprendí un montón. ¡Gracias Viçens!
Después de esta partida, que acabé justo de tiempo, le di un poco la brasa a Mathy y a Alvaro, les pregunté como les había ido, y aunque algo desanimado por haberme quedado tan atrás en la carrera por el mejor general, decidí intentar sacar los otros 40 puntos en juego, y sobre todo, disfrutar otras dos partidas igual de intensas. Mientras sacaban los emparejamientos hice algunas fotos que dejo para luego.
Ronda 2:
Orcos y Goblins (Cordo) VS Skaven (Edgar)
Escenario Capturar objetivos
El escenario era una batalla campal de nuevo, también con un despliegue diferente y objetivos añadidos. En la diagonal del tablero había tres elementos circulares, que al final de la partida otorgaban 200 puntos de victoria cada uno, en caso de tener una unidad básica de potencia 5 o más sobre ellos. Además, el despliegue era diagonal, con una franja de 40 cm entre rivales. Es decir, a 20 cm de la línea trazada por los objetivos, comenzaban nuestras zonas de despliegue. Esta misión la había practicado una vez, y con mi lista anticombate, no me gustaba mucho, ya que el rival empieza más cerca y mis básicas son muy endebles para controlar objetivos.
Lógicamente, tampoco conocía a Edgar, pero me alegro mucho de que se animara a venir al torneo. Edgar me contó con había vuelto recientemente al juego, ya que en el pasado había tenido un ejército de skavens que vendió. En un momento dado había visto una buena oferta de skavens y se había animado, así que estaba comenzando a coger experiencia. Lo único malo...que el ejército estaba sin pintar. Pero sinceramente, a mí me molesta la gente que mira por encima del hombro a quien no tiene su ejército pintado. Todos preferimos tener color en la mesa, pero no todo el mundo lleva décadas jugando o tiene el tiempo y la habilidad para tener ejércitos horda listos así de golpe. Pintar requiere paciencia, y si te dan caña vas a acabar odiándolo, en vez de disfrutar el proceso por el que tu ejército coge color. Yo os animo a todos a jugar desde el principio, a aprender, y el hecho de engancharos ayudará a coger las ganas de ir pintando. Dicho esto, tuve un momento de sentimientos cruzados al ver el ejército sobre la mesa. Por un lado, me alegró mucho jugar contra skavens, ya que es uno de los ejércitos que menos conozco, solo habiendo visto listas muy cortitas en partidas "tutorial". Por otro lado, es un ejército potente y del que desconozco mucho, y tras la tremenda derrota sufrida mi confianza no era muy elevada. La lista de Edgar era algo parecido a lo siguiente:
Lógicamente, tampoco conocía a Edgar, pero me alegro mucho de que se animara a venir al torneo. Edgar me contó con había vuelto recientemente al juego, ya que en el pasado había tenido un ejército de skavens que vendió. En un momento dado había visto una buena oferta de skavens y se había animado, así que estaba comenzando a coger experiencia. Lo único malo...que el ejército estaba sin pintar. Pero sinceramente, a mí me molesta la gente que mira por encima del hombro a quien no tiene su ejército pintado. Todos preferimos tener color en la mesa, pero no todo el mundo lleva décadas jugando o tiene el tiempo y la habilidad para tener ejércitos horda listos así de golpe. Pintar requiere paciencia, y si te dan caña vas a acabar odiándolo, en vez de disfrutar el proceso por el que tu ejército coge color. Yo os animo a todos a jugar desde el principio, a aprender, y el hecho de engancharos ayudará a coger las ganas de ir pintando. Dicho esto, tuve un momento de sentimientos cruzados al ver el ejército sobre la mesa. Por un lado, me alegró mucho jugar contra skavens, ya que es uno de los ejércitos que menos conozco, solo habiendo visto listas muy cortitas en partidas "tutorial". Por otro lado, es un ejército potente y del que desconozco mucho, y tras la tremenda derrota sufrida mi confianza no era muy elevada. La lista de Edgar era algo parecido a lo siguiente:
-Vidente gris (general) nivel 4 con 4 fragmentos de piedra bruja, pergamino de disformidad (portahechizos de un solo uso que hace un impacto de F3 por miniatura a una unidad y le causa pánico) y alguno de dispersión
-Caudillo portaestandarte de batalla, me suena que con estandarte mágico
-Ingeniero brujo con cuchillas de piedra bruja (F+1 y sabe rayo de disformidad), condensador (puede usar un dado de energía extra a su máximo) y acumulador (genera un dado de energía)
-30 esclavos
-30 esclavos
-25 guerreros del clan
-Amerratadora
-25 guerreros del clan (con el caudillo)
-Amerratadora
-2 hordas de ratas
-5 lanzadores de viento envenenado
-4 mosquetes jezzail
-24 monjes de plaga (con vidente gris) con estandarte negro (TSE 4+ contra proyectiles de F4 o menos)
-5 portadores del incensario
-1 abominación
No sabía mucho de skavens, pero sabía que debía anular las amerratadoras y jezzail, ocuparme de la abominación (por suerte con tanto fanático, snotlings y garrapatos...) y tratar de causar pánicos tan pronto como fuera posible.
En hechizos, el tenía el rayo de disformidad (proyectil) en el ingeniero brujo, y el vidente gris llevaba oleada de ratas (una plantilla grande que hace 3D6 de F2 a lo largo de 10D6 desde el vidente), aliento pestilente (lanzallamas), locura asesina (da furia asesina o una furia más pegona) y plaga (obliga a chequear resistencia a cada miniatura de una unidad o hiere sin armadura, y va saltando, parecido a Gorko kamina kon noz). Yo como siempre, tenía mis 4 Miradas de Morko y ¡Morko zálvanoz!, esta vez tenía Gorko kamina kon noz, un par de hechizos de combate y un Kemacerebroz.
En mi triángulo de despliegue había una colina y un muro atrasado, y cerca de la tierra de nadie, una colina con desfiladero. Al otro lado, dos bosques y otro muro. Pensé que iría fuerte a por mí, así que puse en los flancos los lobos por los objetivos, los garrapatos centrados acompañados de snotling (en cuanto colocó la abominación) y el resto retrasado porque yo no tenía ninguna prisa por combatir.
Si en la partida anterior los turnos se me mezclan, aquí ni os cuento.
Estoy casi seguro de que empecé yo, muy clave viendo esos jezzail con malas intenciones. Como no tenía interés en avanzar, solo avanzaron los garrapatos, los snotlings, los lobos de la derecha se fueron a esconder tras el bosque (para coger el objetivo cercano) y los de la izquierda amenazaron su otro flanco. En magia sé que el Gorko kamina con noz aniquiló a los 4 jezzail, maté algún esclavo de la unidad que tenían más cerca y creo que causé una herida en la abominación. Los lanzavirotes no consiguieron herirla, y me pasé de frenada (de nuevo) con la catapulta. Tampoco me quejaba mucho la verdad.
Estoy casi seguro de que empecé yo, muy clave viendo esos jezzail con malas intenciones. Como no tenía interés en avanzar, solo avanzaron los garrapatos, los snotlings, los lobos de la derecha se fueron a esconder tras el bosque (para coger el objetivo cercano) y los de la izquierda amenazaron su otro flanco. En magia sé que el Gorko kamina con noz aniquiló a los 4 jezzail, maté algún esclavo de la unidad que tenían más cerca y creo que causé una herida en la abominación. Los lanzavirotes no consiguieron herirla, y me pasé de frenada (de nuevo) con la catapulta. Tampoco me quejaba mucho la verdad.
En su turno 1 cometió el error de ser demasiado cauto, fruto seguramente de la inexperiencia. Avanzó un poco los bloques de infantería, su flanco hacia los lobos, y la abominación hacia delante. En magia corté el rayo de disformidad, y me tiró una oleada de ratas a través de la unidad intacta de esclavos. Creí que no iba a llegar, y se quedó a 4 o 5 centímetros, pero mató a alguno de sus esclavos en el proceso. Las amerratadoras habían movido así que no disparaban, pero los lanzadores de viento envenenado acabaron con mis lobos sin el más mínimo problema, haciendo huir fuera de la mesa a los 2 o 3 supervivientes.
En el turno 2, puse los snotling directamente en la cara de la abominación, y el garrapato no sé si fue este turno cuando le pasó por encima, pero en todo caso no murió. El otro garrapato se deshizo de algunos esclavos, que huyeron de vuelta al despliegue. En mi fase de magia seguí rebajando las unidades de esclavos y me parece que acabé con los morteros de viento envenenado en venganza, y creo que también maté algún monje de plaga. En disparo un lanzavirotes le coló un par de heridas a la abominación, que ahí seguía.
Su turno 2, cargó con la abominación a los snotling (les hizo 4 o 5 heridas en combate, pero se quedaron tan panchos). En mi flanco débil empezó a avanzar con el enjambre y los guerreros del clan, y el centro de nuevo con cautela. En magia tuve otro de esos momentos tontos, me lanzó una Plaga con una buena tirada, intenté dispersar a dados (con 4 o 5) y me quedé corto. La plaga mató a 7 nocturnos en una unidad, 9 en otra (ambas fallaron pánico) y 2 orcos negros, y por suerte paró ahí. ¡Ouch! En disparo una amerratadora se colocó tras el seto, y la otra tuvo problemas y acabó con algún hombre rata por ello. Creo que eran esclavos de los que huían, que se irían fuera en turno 3, pero puede que me equivoque.
Mi turno 3 fue el de consolidación. Reagrupé ambas unidades de nocturnos (aún con fanáticos). Acerqué los nocturnos de la derecha a la abominación, y uno de los fanáticos acabó con ella, además de matar a algún snotling de la misma. El garrapato de la izquierda empezó a matar gente, cogiendo por banda unos monjes de plaga, mientras que el otro no estoy seguro si se ocupó de los esclavos restantes o empezó con los guerreros del clan del caudillo. Los lanzapinchoz y magia siguieron matando ratas sin nombre, pero el momento fue de la catapulta, que apuntando al vidente gris, se acabó llevando a la amerratadora que tenía al lado, al ingeniero brujo, y no sé si a algún portador del incensario. Ya tocaba que hiciera algo.
Su turno 3 no consiguió demasiado, tratando de avanzar tras ser repelido con tanto proyectil. Si que empezó a amenazar mi flanco, cargando con las ratas a los nocturnos, que soltaron fanáticos. Sufrió heridas menores, y optó por no continuar la carga. Pude dispersar la magia en su mayoría, y eso sí, la amerratadora que quedaba le hizo 3 heridas a uno de los garrapatos.
En turno 4 ya fui a sacar puntos. Utilicé todo mi potencial para acabar con los esclavos restantes, y creo que con los portadores del incensario y monjes de plaga (puede que fuera en turno 5 estos últimos), gracias a un Gorko kamina con noz que se prolongó mucho. El garrapato herido estaba furioso, y se llevó por delante a la amerratadora, mientras el otro hacía trizas a varias ratas. En mi flanco izquierdo reculé con los goblins, y me suena que los fanáticos no hicieron nada digno de mención.
En su turno 4 su vidente gris solitario se metió en el desfiladero, y los guerreros con el caudillo se acercaron a coger el objetivo central. No estoy seguro si me coló otra plaga o qué fue, con una fuerza irresistible (la segunda en la partida creo), pero la mayoría lo dispersé, aprendida ya la lección de que para eso son los pergaminos.
Mi turno 5 y 6, puse los snotling sobre el objetivo central (para disputarlo si hacía falta) le tiré todo a la unidad del caudillo hasta que no quedó nadie (ni él), y le tiré los restos a la horda de ratas, sin éxito. Me suena que mi catapulta sacara problemas en algún momento, pero duró hasta el final viva, así que no puedo asegurarlo. Él no pudo hacer más puntos al estar en tanta desventaja, quedando una unidad de guerreros del clan, la horda de ratas y el vidente gris escondido. Yo había perdido una de lobos, media de snotlings, y creo que media de nocturnos, y ambos garrapatos estaban tocados.
Resultado final: 20-0 a mi favor. El resultado refleja la partida, pero no creo que Edgar jugara mal, simplemente necesitaba práctica. Estaba en la fase en que aprendes las sinergias de tu ejército, y coges soltura con su magia y selección de objetivos (y a 2000 puntos es mucha tralla a la vez, yo siempre recomiendo empezar por 750 o 1000). Mi lista no tiene mucho misterio, pero si no conoces como funciona, es normal que no explotes sus puntos débiles. Por lo general, mis garrapatos son muy vulnerables a la carga de unidades tan grandes, pero el hecho de quedarse atrás le hizo perder esa ventaja, y además al ser unidades enormes, se estorbaba para maniobrar. Lo mismo pasó con las amerratadoras, que perdieron el primer turno colocándose, y los pobres jezzail volaron en turno 1 en un hechizo afortunado por mi parte. Y lo de la abominación...si habéis jugado un monstruo grande, seguro que habéis sentido esa necesidad de trabarlo en combate porque le estaban cayendo todas las máquinas de guerra, creo que hizo lo que podía en ese momento, pero le faltó apoyo a la criatura. Tuve cierta suerte, creo haber fallado solo una animosidad, y sé que disfuncioné una vez, no recuerdo en que momento, tirando el Kemacerebroz, resultando en la pérdida de un nivel (¿y una herida?) en mi chamán orco general. Por lo general creo que hice una buena partida y tuve la sensatez de ir acabando con cada problema de uno en uno, aunque cuando me coló la Plaga en turno 2 y vi huir a ambas unidades de nocturnos, sudores fríos recorrieron mi espalda. Acabé contento de haberme recuperado de la partida anterior, y también contento de haber podido jugar una partida contra skavens, y aprendí algunas cosillas sobre la magia skaven. Espero que a Edgar también le resultara de provecho la partida, yo creo que aunque un torneo a 2000 puntos pueda intimidar, hizo bien en venir a jugar, ya que en un ambiente así se puede aprender mucho, y en las derrotas siempre hay lecciones que extraer. Espero tener la oportunidad de volver a verle el año que viene, quizás con algo más de colorido en el despliegue. ¡Muchas gracias Edgar!
Tras la segunda partida, llegó la merecida pausa para comer. Sé que lo que más os interesa a todos es saber que bocadillo escogí. Tras mucho estudiar el metajuego, y contrastar con los gurús del MDNR Inner Circle, opté por el bocadillo de salchichas en pan untado con tomate. Y una cocacola para intentar mantenerme despierto que había dormido poco. Bueno, la verdad es que la cocacola no era necesaria, seguía con la excitación por las nubes. Dejé mi ejército desplegado en la mesa para que los jueces pudieran dar las puntuaciones de pintura (no esperaba mucho, pero tenía curiosidad) y me reuní en la mesa común para un debate de batallitas pasadas, presentes y futuras. Estuve hablando con Nama, Mathy, Pater Zeo, Undo, Elendor, Viçens, y el famoso chico de los fanáticos, Wardner. Tuvimos tanto relatos de partidas e historias, como del propio torneo, y además al estar la mayoría de jugadores del Inner Circle, tomamos nota de nuestras pruebas y de que el Templete del Caos y el Juggernaut enano iban a necesitar una revisión profunda. Tengo especial recuerdo de tomarle el pelo a Namarie por su buen desempeño hasta el momento, y de debatir con Elendor y Wardner sobre la lista de 36 fanáticos que este jugaba (acababan de enfrentarse con una partida muy disputada). Cuando me hablaron de que iba a haber una lista así, pensé que sería una trolleada y que eso era aburrido tanto para el que lo juega como para el rival. Pues me equivoqué, mea culpa. Wardner era un chaval superagradable, con un conocimiento táctico profundo tanto del juego como del libro de ejército, consciente de que estaba haciendo y capaz de debatir sobre cuál era el óptimo de esa lista enfocada. Y sí, no era el número de goblins que llevaba pero es que...¡no tenía más! Además, como bien dijo, llegado un cierto punto, las unidades se estorban, y las animosidades son terribles. Fue una charla que me abrió los ojos y me resultó muy enriquecedora, y al tener a Elendor aportando la visión del rival mucho más. Unos minutos antes de que comenzara la tercera ronda, me pasée rápidamente para fotografiar otra tanda de ejércitos, aunque no pude hacerme con todos. Llegó la ronda 3, y tenía mucho que trasladar, cargando con el maletín y con el maletón (claro, yo me iba de viaje al acabar).
Ronda 3:
Orcos y Goblins (Cordo) VS Elfos Oscuros-Culto de Slaanesh (Athorys)
Escenario Batalla Campal
Para rematar el día, y tras varias horas de exprimirse el coco, la última partida era una batalla campal a secas. Personalmente, es a lo que al final más jugamos todos, y no venía mal para mi lista. Los escenarios con objetivos propios son chulos para jugar campañas o batallas épicas, pero para jugar un torneo una batalla campal con o sin objetivos adicionales es lo suyo (con objetivos un par de rondas a mí me gusta la verdad).
Empecé a mover unidades como loco de una mesa a otra, y en ese vaivén llegó Athorys, al cual claro, tampoco conocía. Yo vi las miniaturas que acababa de poner en la mesa, y quedé prendado. Lo primero que le dije es que me hacía mucha ilusión jugar contra Elfos Oscuros, porque hasta ese momento las únicas dos facciones que no había tenido nunca enfrente era elfos oscuros y enanos del caos. Además le conté que me encantaba la estética y estaba pensando en arrancar un ejército de estos. Resulta que Athorys había sido el rival en primera ronda de Elendor, que me había dicho que había tenido una disputada batalla fraticida (Altos Elfos contra Elfos Oscuros) contra la lista alternativa de Culto de Slaanesh de Athorys. Antes de decir nada más, como veréis malamente en las fotos, la calidad de la pintura de su ejército era excelsa, gustándome especialmente las diablillas montadas y los jinetes oscuros. Además Athorys se había metido completamente en el lore, y jugaba...¡a Morathi! Yo no soy nada fan de los personajes especiales, pero me encanta Morathi. Me gusta especialmente en la versión en pegaso negro, pero no me voy a quejar de que mi oponente la llevase a pie. Por suerte, de tanto leer el libro de oscuros, y tras haber analizado la lista de Álvaro en el I Torneo Leyendas en Miniatura de Abril, tenía una ligera idea del ejército que veía enfrente. La lista de Athorys se parecía a lo siguiente:
-Morathi (personaje especial), nivel 4, +2 a lanzar hechizos, elige a dedo en Magia Oscura y Saber de Slaanesh (puede combinar), golpe letal, TSE 4+, resistencia a la magia 1, marca de Slaanesh (inmune a psicología), las miniaturas enemigas trabadas deben chequear liderazgo cada ronda de combate o tendrán HA1, odio a altos elfos
-Noble montando en carro de gélidos
-Hechicera nivel 1 con Magia Oscura y 2 pergaminos de dispersión
-10 ballesteros elfos oscuros
-19 lanceros elfos oscuros con marca de Slaanesh (inmunes a psicología) y grupo de mando
-5 jinetes oscuros con lanza
-1 engendro del Caos de Slaanesh (mueve 8D6)
-5 diablillas montadas
-10 bárbaros
-2 lanzavirotes destripadores
-5 caballeros gélidos con grupo de mando
-¿16?¿19?¿20? iniciadas de slaanesh con grupo de mando
La verdad es que me daba un poco igual el resultado, me encantaba el emparejamiento, ya me había resarcido, y simplemente quería hacerlo lo mejor posible y pasar un buen rato. Además Athorys me dijo que le gustaba jugar contra Orcos y Goblins porque siempre resultaba divertido, así que ambos teníamos las mismas intenciones. Spoiler: lo conseguí, pasé un rato de lujo.
En hechizos, Morathi tenía el Viento Gélido (1D6 F3, si mata anula disparo), Palabra de dolor (HA1 HP1 permanece en juego), el Horror negro (45 cm, plantilla grande, cada miniatura chequea fuerza y si falla sufre una herida sin armadura) y Deseos Inalcanzables (coloca un marcador y obliga a una unidad a moverse hacia allí mientras el hechizo permanezca en juego). La hechicera de nivel 1 no recuerdo que tenía, entiendo que el Viento Gélido. Yo por mi parte como siempre, cuatro Miradas de Morko, 1 ¡Morko, zálvanoz!, un Gorko kamina con noz y creo que un Kemacerebroz, un Puñoz de Gorko, un Kabezazo, y un hechizo de combate.
Esta vez había un tablero simétrico, con una colina y un bosque a cada lado, y unas rocas que consideramos impasables en el centro. Siguiendo la estrategia habitual, puse los lobos en los flancos, el centro de goblins, los garrapatos entre ambas partes, máquinas en la colina, un lanzapinchoz centrado y para redondear los snotling donde cabían...detrás de unos lobos pensando en parar al engendro del caos o a las diablillas montadas que amenazaban mis máquinas de guerra. Por su parte, en un flanco dicho engendro y diablillas, ballesteros y hechicera en bosque, un lanzavirotes detrás (muy raro la verdad), y centrados jinetes, lanceros, bárbaros, noble en carro, iniciadas y gélidos, con el otro lanzavirotes solo en la colina. Morathi con los lanceros claro.
Vamos a ver de qué me acuerdo. Empezó él, eso sí.
Su turno 1 fue...poco convencional digamos. En el flanco avanzaron diablillas y engendro, amenazándome con llegar en turno 2, aunque el engendro estaba delante, negándoles la carga. Los ballesteros atravesaron bosque, pero mucho no veían para disparar. Todo el centro avanzó al unísono, salvo los jinetes oscuros, que se lanzaron como elfas brujas hacia mis goblins nocturnos (los del estandarte de la luna amarilla) y le sacaron los fanáticos. Fueron atravesados, y perdieron 3 componentes, pero aguantaron el pánico. En magia pensé que mis garrapatos serían el objetivo, pero no fue así, ya que dispersé unos Deseos Inalcanzables con mala baba (y me di cuenta que tendrían que hacerlo cada turno, o moriría por mis propios garrapatos), me parece que usando un pergamino. Lo que si me entró fue un Horror Negro a la unidad de nocturnos del centro, matando a la mitad y haciéndolos huir hasta casi salir de la mesa (turno 1 y mi línea rota, fantástico). El lanzavirotes escondido no veía nada aún, pero el otro se deshizo de los lobos que tenía delante sin miramientos. Los ballesteros mataron un goblin nocturno de la unidad amarilla, dejándola en 19 integrantes. Lo raro de todo esto es que no le cayera un proyectil a los garrapatos...¡true story!
Mi turno 1 en cambio fue muy normal. Mantuve mi línea en general, salvo que puse los lobos delante del engendro del caos, y avancé los snotling para cubrir al lanzapiedroz tan rápido como pude. Mis nocturnos que huían no se habían reagrupado, huyendo sin siquiera llegar a sacar fanáticos (¡vaya!), así que uno de los garrapatos lo moví lateralmente para protegerme de los lanceros que se acercaban con Morathi. El otro se fue acercando a las iniciadas, pero no recto, no quería que me cargaran cuando tenía la unidad completa. La magia fue bastante prolífica, ya que el Gorko kamina con noz entró, tras haber dispersado mis repeticiones de tirada, y me llevé 3 diablillas montadas y algunas iniciadas, y creo que algún bárbaro, y con el resto de proyectiles acabé con los 2 jinetes oscuros y seguí diezmando las iniciadas hasta dejarlas sobre la docena (mucho menos amenazadoras). En disparo no sé que hizo el lanzapiedroz, probablemente contribuyó a esas bajas que mencionaba en magia, pero sé que de mis dos lanzapinchoz, uno le hizo 2 heridas al engendro del Caos (casi lo mata). La verdad es que no me podía quejar. Lo más cómico de este turno fue que el fanático que en su turno había atravesado a los jinetes oscuros, enfiló directo a la hechicera de nivel 1, y la pilló por un mísero centímetro. Pues aunque no os lo creáis, hice un impacto, y además fallé la herida a 2+. Increíble. Athorys se había puesto pálido, yo ya daba por hecho que la hechicera llevaba dos pergaminos de dispersión, pero creo que se estaba arrepintiendo de no haber usado ya alguno.
En su turno 2, el engendro del caos se hizo amiguito de los lobos, que aguantaron ahí, y las diablillas se colocaron para cargar al lanzapinchoz o lanzapiedroz el turno siguiente. Los ballesteros siguieron avanzando, y la hechicera cambió de lado tras el susto. La infantería avanzó (estaba arrepintiéndose de haberse quedado muy atrás en turno 1, y sus hechizos tenían rango 45 la mayoría), el carro con mucha cautela, y los gélidos extrañamente retrocedieron al ver al garrapato. En este turno concentró la magia y disparo en mis máquinas de guerra, además de que dispersé tanto el Horror negro como los Deseos Inalcanzables. Creo que los virotazos no consiguieron herir a los garrapatos, pero los ballesteros (y disparaban la mitad) causaron 4 impactos al lanzapinchoz de la colina, 3 se fueron a la dotación y todos hirieron. Para que luego digan que disparar a las máquinas de guerra no hace nada...
Mi turno 2 fue el de presionar, ya que había visto sus dudas. Los snotlings terminaron de cubrir al lanzapiedroz, los fanáticos se fueron al bosque, mis nocturnos (los amarillos) se prepararon para los lanceros que venían, y al menos al avanzar no me veían las dos diablillas montadas. En el lado derecho avancé algo los orcos negros y nocturnos, y de pasó mejoré los ángulos de visión de los chamanes. La verdad es que los garrapatos destrozaron su centro. El de la derecha se zampó a los 5 gélidos, y de paso dejó las iniciadas casi finiquitadas, y el de la derecha se se preparó para zampar lanceros oscuros, dándo una oportunidad a mis nocturnos. El disparo y la magia fueron pobres ya que cuando tiré un hechizo a los lanceros aprendí que tenían la resistencia a la magia y dejé de insistir, y gastó un pergamino. Me parece que la catapulta tuvo problemas disparándoles precisamente a los lanceros.
Su turno 3 se dió cuenta de que tenía que ir a por todas, las diablillas pasaron de mis snotling cogiendo la retaguardia y el engendro seguía jugando con los lobos. Los lanceros se prepararon para cargar a los nocturnos, pese a tener el garrapato muy cerca. El carro ya casi solo no podía cargar, y solo pivotó un poco. Creo que los bárbaros se reagruparon tras haber huida el turno anterior, pero no estoy seguro. De nuevo no recuerdo gran cosa de la magia (puede que disfuncionara y acabase la fase de magia, pasó al menos una vez) y disparo, solo que el lanzavirotes retrasado estaba en una posición muy mala, pero el otro le hizo tres heridas al garrapato más cercano.
Mi turno 3 iba en la misma línea. Acerqué a los nocturnos de la derecha a su carro, pero los fanáticos no llegaron, mientras los de la izquierda seguían esperando la carga. El garrapato tocado seguía por ahí atrás, mientras el otro acabó con 5 o 6 lanceros de la escolta de Morathi, un gran alivio para mis nocturnos. Mi magia fue de nuevo neutralizada con un pergamino, y unas tiradas más pobres, y en disparo solo quedaba un lanzapinchoz que se llevó otro par de lanceros.
El turno 4 fue la clave. Es rápido de contar. El carro derrapó y se puso tocando el impasable, de manera que si le tiraba el garrapato moriría al tocar el terreno. Los lanceros con Morathi cargaron a los nocturnos, que superaron el miedo (¿no éramos cobardes?) y en magia me coló unos Deseos Inalcanzables al garrapato más cercano tras fallar yo la tirada de dispersión quedándome corto (y sí, tenía un pergamino disponible). Eso significa que al principio de mi turno, ese garrapato moriría contra el impasable. En disparo, los ballesteros hicieron alguna herida a los snotling y los lanzavirotes abatieron al otro garrapato, que estaba herido. Es decir, en ese turno, iba a perder ambos garrapatos y un bloque de nocturnos, y uno de los chamanes iba a chequear pánico. Mala cosa. Pues pasó lo imposible. Sus lanceros con punta de goma, más Morathi, mataron 0 goblins nocturnos. Sí, 0. Y mis 4 ataques de respuesta (con arma de mano y escudo y sin campeón) mataron 2 elfos. Pues ahí lo véis, además tenía potencia y una fila más que él, así que chequeó con -3...y falló el chequeo. Para más inri, sacó un 15 en la tirada para huir, y mis nocturnos le cazaron con un 16. Creedme, fue para haberlo grabado, porque estas cosas no pasan. Yo estaba flipando, pero no me había dado cuenta de lo mejor.
Comenzó mi turno 4, y cuando fui a dejar morir al garrapato Athorys me recordó que Deseos Inalcanzables es un permanece en juego. Y Morathi había muerto, por lo que se había disipado. Ese turno el garrapato mató a los 7 ballesteros y a la otra hechicera, y un fanático le causó 3 heridas al carro de gélidos y una al noble antes de estamparse contra las rocas. No llegamos a acabar el turno porque un engendro con una herida, 2 diablillas, un carro sentenciado, 2 iniciadas de Slaanesh y 2 lanzavirotes lo tenían crudo ante la marabunta de magia sin nada para dispersar.
Resultado final: 20-0 a mi favor. El resultado refleja la situación final, pero al igual que en mi derrota de la primera ronda, no demuestra lo disputada que estuvo hasta la mitad y la cantidad de cosas que decidió la suerte. Athorys pagó caras sus dudas con el enfoque en los primeros turnos, pero por lo general me puso en varios aprietos y me demostró que si no había ido a por los garrapatos de inicio es porque pensaba matarlos de manera "alternativa". La partida fue fantástica, me lo pasé genial, y al acabar todavía estuvimos 20 minutos comentándola, además de hablar un ratillo sobre elfos oscuros (que no son su ejército habitual, los había pintado para el torneo). La situación con Morathi y los lanceros nos dejó perplejos a ambos, y fue lo que decantó la balanza (aparte de la ineficacia de uno de sus lanzavirotes), ya que no solo me dejó un garrapato vivo, sino el camino libre a mis chamanes, además de que a mí me costaba dispersar porque el +2 a los hechizos de Morathi sumaba a la dificultad continuamente. Me gustó mucho jugar contra Oscuros, aunque fuera una lista alternativa, y poder aprender de aquellos que voy a comandar pronto. La verdad que no pudo ser mejor colofón a la "competición". ¡Gracias Athorys!
Antes de recapitular sobre el torneo, creo que es un buen momento para valorar la lista, ya que os he contado su desempeño en las tres partidas. Por lo general, como comentó en el análisis ya publicado, la lista es buena, funciona, pero tiene un liderazgo bajo y si los dados no acompañan y tu oponente tiene experiencia, puede resultar un desastre. En todo caso, el plan es válido. Si miramos de uno de en uno...
-El gran chamán goblin nocturno es el motor de la lista, sin el hechizo ¡Morko, zálvanoz! todo son riesgos, y ayuda tanto a evitar disfunciones, como a mitigar problemas de la catapulta, mejorar chequeos de liderazgo, afinar los lanzapinchoz o optimizar los impactos de los proyectiles mágicos. Solo usé su bastón un par de veces (suele pasar) pero lo llevo como emergencia ante disfunciones, porque me ha pasado de usarlo para mejorar una tirada que no saca el hechizo, y disfuncionar a continuación (y una repetición no se puede repetir ya, con nada).
-El chamán del portahechizos estuvo correcto, es un objeto que no me gusta, pero me sirvió para saber si podía lanzar mis proyectiles en rango, y alguna herida rasca. Al final lo que quieres matar, como hierofantes y nigromantes, ya se esconden suficiente como para que ni les veas.
-El chamán de los pergaminos no lo hizo mal, aunque le encantaba huir en el momento menos oportuno claro.
-El chamán orco es un mal necesario para dar L7, pero me genera verdadero malestar tener que llevarlo. La piedra de energía la acabas usando antes o después, pero nunca me parece que salga a cuenta, ya que si la llevara el nivel 4 iría mejor, pero no es combinable con el Baztón.
-Los nocturnos con fanáticos, quitando el combate con Morathi (estelar) huyeron mucho, murieron bastante, y los fanáticos hicieron muchísimo menos de lo que deben, ya que no es que no llegaran, es que sacaba triples sin parar para que se enredaran con la cadena.
-Los lobos en su línea, rara vez me sobreviven hasta el turno 3, y al menos pillaron un cuadrante y un objetivo. A veces los uso para apantallar, pero estas veces no surgió. El escudo no estuvo de más, eso sí.
-Los snotlings son buenísimos y valen cada punto que les pagas. Trabar a los espectro condenadores 3 o 4 rondas de combate, a la abominación, marear a las diablillas montadas...los he visto matar a un karro de jabalíes tocado, trabar 4 rondas a un fénix, aguantar una carga combinada de juggernauts de Khorne y furias...que maravilla en Sexta Edición.
-Los lanzapinchoz no estuvieron muy finos, salvo ensartando skavens, pero son baratos y merece la pena tener algo contra monstruos blindados.
-El lanzapiedroz estuvo por debajo de su nivel habitual, pero en este caso, la culpa es mía que fallé estimando mucho más de lo normal, en parte por hacer disparos en diagonal.
-Los orcos negros tan prescindibles como siempre. Aparte de hacer una herida al rey tumulario, repetir una animosidad tonta y esconder al general...nada reseñable. Son muy bonitos, eso sí.
-Los garrapatos bueno. Son muy buenos y por eso los vamos a revisar. Realmente hicieron menos que otras veces porque contra condes vampiro (no chequea pánico, se levanta otra vez, es una horda, tienes etéreos...) y skavens (tiene hordas por todos lados) no es lo mejor, pero aún así mataron lo que no está en los escritos. Me gustan mucho porque son lo que permite jugar listas no combativas, pero si los llevara siempre me aburriría yo mismo. Pero como opción, muy guays, y la miniatura mola. A ver si los pinto.
Hay otro tema más que quería tocar antes de entrar en la clasificación, y con el cual llevo un rato incordiando...¡los ejércitos y sus fotos!
En primer lugar, os voy a pegar aquí la lista de ejércitos participantes desglosados, para vuestro uso y disfrute. Si os fijáis, todos los ejércitos estaban presentes (aunque Caos está unificado, no por libros, pocas Bestias del Caos se vieron), e incluso había una lista de Kislev. Veréis 43 ejércitos, ya que el 44 es el comodín (que me suena que iba con Caos también, no estoy seguro).
Lamentablemente no tengo fotos de todos, pero entre las que hice y las que me ha pasado la organización, creo que os podréis deleitar un ratito. He de decir que el nivel de pintura de algunos era brutal, y los jueces debieron pasarlo regular para decidir a quién darle ese premio.
Más Gromril... |
Kislev...esto sí que es ser un romántico |
Esta es la lista de nocturnos con Skarsnik claro |
Un bretoniano con menos cuñas |
Esto si que es una lista cortita...y con furia asesina |
Slaanesh a tutiplén |
Se mezcla aquí un funerario con Caos |
El Caos de Namarie |
Mención especial al Templete con la piedra, brutal |
Mi ejército favorito del día |
Undomain innovando con enanos, muy chula la lista |
Atrápame si puedes... |
Los Machotez de Grimgor de Mathy |
Una horda bien pintada siempre es bonita de ver, sí-sí |
La lista de matadores de Juan |
Lleva casi tanto naranja como yo verde... |
Los nigromantes de Viçens |
Los humanos que nunca, jamás, se rinden |
Con tanto orco, caótico, vampiro...el estandarte más codiciado del torneo |
Los siempre llamativos enanos del Caos |
Este lo vuelvo a poner porque mola |
Los míos cuando los pinte espero que molen al menos la mitad |
Altos Elfos old-school |
Santiago y cierra Estalia |
Ahí podéis ver máquinas goblin hechas a mano...¡me guzta! |
Demasiado cómica para no incluirla... |
-Cada partida otorgaba de 0 a 20 puntos.
-La pintura puntuaba de 0 a 14 puntos, y hacía falta un mínimo del ejército pintado para ser puntuado (no recuerdo si era el 75%).
-Había una clasificación al mejor general, sobre 60 puntos. Mención al mejor general.
-Había una mención a la mejora pintura (y concepto, conversiones y tal).
-Había una clasificación conjunta que sumaba mejor general y pintura. Mención al mejor jugador.
-Como siempre, cuchara de palo para el último clasificado (de la conjunta). Con unos dados como premio para que la suerte cambiara.
-Había una mención al jugador que había venido desde más lejos.
En la clasificación al mejor general, el "top 5" fue el siguiente:
1. Tachan (Hombres Lagarto), 56 puntos. Mejor general.
2. Namarie (Caos), 52 puntos.
3. Lecter (Condes Vampiro), 46 puntos.
4. Odrayak (Enanos), 45 puntos.
5 y 6. Elenri (Reinos Ogros) y Alan (Bretonia), 44 puntos.
Como podéis comprobar, Tachan, con su lista difusa (la foto está por arriba) hizo un torneo casi perfecto, además de ganar con claridad a Mathy en la última ronda, que es toda una proeza. Aprovecho para darle públicamente la enhorabuena. En segundo lugar acabó Namarie, aunque con bastante ventaja sobre el resto, y en el rango de los 46 puntos para abajo ya las diferencias de puntos fueron menores. Ver a Lagartos, Caos y Condes Vampiro quedar arriba no es una sorpresa, pero ver los resultados de Enanos u Ogros es muy inspirador para demostrar que en esta edición con MDNR se puede jugar casi de todo.
Clasificación de pintura no os puedo poner, pero sí deciros que hubo varios jugadores con el máximo de 14 puntos, claramente merecido. Al final, la mención fue para Juan y su ejército de matadores de Karak-a-Kadrin, con un aspecto brutal, y que incluía la escultura del portaestandarte de batalla. ¡Bien hecho!
La clasificación conjunta fue aún más apretada, ya que Tachan llevaba el ejército pintado con capas base y poco más, pero muchos de sus perseguidores le habían dado mucho cariño a sus ejércitos. De nuevo el "top 5":
1 y 2. Namarie (Caos) y Tachán (Hombres Lagarto), 61 puntos. Mejor jugador para Namarie en este caso.
3. Alan (Bretonia), 55 puntos.
4. Odrayak (Enanos), 53 puntos.
5, 6 y 7. Elenri (Reinos Ogros), Óscar Mataró (Caos) y Mathy (Orcos y Goblins), 52 puntos.
Como ya os decía, los contendientes del mejor general...¡pero aún más apretados!
Al final Namarie se llevó el torneo, muy muy merecido, y creo que todos nos alegramos por él y estamos muy agradecidos por esta "edición" que nos ha proporcionado. A día de hoy no me explico como pudo ganar con su lista (la conocía de antemano, no esperaba que quedara mejor del top15, y eso sabiendo que juega bien...) pero una vez más queda demostrado que con cabeza, sabiendo lo que quieres hacer, un poquito de suerte y unos cruces decentes, se puede ganar con cualquier cosa. Y además...tenía a Cthulhu.
La cuchara de palo fue para Edgar, mi rival skaven de la segunda ronda, que al tener el ejército sin pintar no pudo sumar nada de esa categoría. ¡El próximo año todo hacia arriba!
Para acabar, la organización tuvo el detalle de acordarse de los jugadores que habíamos venido desde "lejos" y la mención al jugador con el desplazamiento más largo me la birló Elendor, pero él sabe que si me hubiese quedado en Arabia Saudí unos meses más ese diploma era para mí. A ver si le engaño para que venga a Madrid al próximo torneo...
Una vez comentada la clasificación en sí, y volviendo a mi experiencia en concreto, he de decir que mi objetivo (lógicamente) era intentar ir a por la mención de mejor general, pero mis expectativas reales eran situarme entre el tercio superior de la clasificación (en el top15 vaya). Al final, pese a los malos resultados de la primera ronda, con 40 puntos acabé empatado con Larkin (Reyes Funerarios) y Raisen (Caos) por los puestos 9, 10 y 11, que la verdad es un muy buen resultado con el que quedo muy contento.
En el apartado de pintura, consciente de mi nivel, de que llevaba los garrapatos sin pintar, las peanas sin tunear y que desentonaban un poco las miniaturas que me había prestado Jorge (porque las suyas están mejor pintadas y tienen peanas decoradas, lo cual envidio), esperaba sacar 7 puntos de los 14 (poco más, poco menos), y la organización me otorgó 6, con lo cual no andaba muy descaminado. Ya tengo una referencia para la próxima.
Al sumar los puntos de ambas categorías, con 46 puntos de 74 posibles acabé empatado con Pater Zeo (Condes Vampiro) por los puestos 15 y 16. La verdad es que tampoco está nada mal visto el nivel de pintura de los jugadores.
Tras otorgar las menciones y que los agraciados recibieran sus merecidos aplausos, pasamos a la parte del sorteo. Creo haberlo dicho antes, pero las inscripciones se destinaban íntegramente a gastos del torneo y a sorteos, no a premios, que es una manera perfecta de lograr un ambiente más distendido. No sé como estiraron tanto de sí ese presupuesto, pero si no le cayó un sorteo a cada jugador, estuvo muy cerca. Además, algunos jugadores habían aportado miniaturas, blisters o accesorios de su colección personal para los sorteos, una idea muy buena que en Leyendas en miniatura nos apuntamos. Creo recordar haber visto sortearse una cajita de fanáticos, miniaturas de Raging Heroes, Mom, Reaper, Gamezone, Avatars of War, Games Workshop, Frostgrave, blisters de escudos, libros, e incluso miniaturas de otros juegos...al final aquello parecía una tómbola, muy guay también. En mi caso, en uno de los últimos sorteos me tocó un kaudillo orco en jabalí de Avatars of war muy chulo (y muy grande) que tendrá que pasar a engrosar mi Whaaagh. Me hubiera quedado y pintado cualquier miniatura que me hubiese tocado como recuerdo, pero esta además, la podré usar, así que mejor que mejor.
¡Que empieza el sorteo! |
Ya vamos acercándonos al fin de la crónica, y es un momento tan bueno como cualquier otro para dedicar unas palabras de agradecimiento, ya que creo que es importante valorar experiencias como esta por las personas con las que las compartes.
-En primer lugar, y aunque no tengan mucho que ver con Warhammer, unos agradecimientos a Carles y Leonor por acogerme esos días, siempre es un placer disfrutar de su compañía y son de los mejorcito que me traje del Erasmus.
-A Elendor, Funda, Namarie y Álvaro por esa tarde-noche tan divertida de pretorneo. Ojalá se hubiese animado más gente, porque es digno de recordarse.
-A Namarie por el contingente de elfos oscuros, y por traerme y llevarme al torneo, facilitándome un montón la vida.
-A los miembros del Inner Circle, Namarie, Mathy, Elendor, Pater Zeo, Undomain y Paco, por el trabajo logrado, y por el tiempo que dedicáis. Es un placer haberos podido conocer a casi todos y disfrutar de unas partidas con vosotros.
-A todo el equipo del Namabus, esos dos viajes fueron cortos pero intensos.
-A la organización por ser flexible y atenta conmigo, cuando no tenía claro si al final podría asistir, por responder pacientemente los mails de dudas, por preparar un torneo fantástico, dedicar de manera desinteresada vuestro tiempo, por montar un evento de estas características y aseguraros de que todo sea fluido, por ser tan receptivos con el feedback y por seguir dejándoos liar por mis ideas, y por las fotos claro. Gracias Alberto, Victor, Edgar, Antonio, Javi, Carla, Carlos, Jorge, Sergio y Paco. Sois muy grandes Corredores de Sombras.
-A mis rivales, Viçens, Edgar y Athorys, por unas partidas desafiantes, instructivas, interesantes, divertidas y sobre todo tener esa sensación que tanto une a veces de que tanto tu rival como tú estáis peleando a la vez contra los mamones de los dados.
-A todos los participantes, perdonadme que no os enumere, pero el ambiente fue genial, y de verdad me sentí como uno más. Es estupendo ver a tanta gente disfrutando y compartiendo un hobby de esta manera, y solo puedo decir que me quedo con ganas de haber podido jugar contra muchos de vosotros. Pero no se pueden jugar tantas rondas...creo.
-A toda la gente que se pasó por allí a cotillear, o a apoyar a sus conocidos. Me quedo especialmente con un grupo de abuelos que se acercó a la mesa mientras estábamos jugando y lo comentaban superinteresados.
-A Jorge por dejarme las miniaturas que me faltaban.
-A los jugadores de MDNR de Madrid que se prestaron voluntarios a hacer de sparring o me dieron ideas para el torneo.
-Y a tí, querido lector, que has llegado hasta aquí, y que al que ojalá haya podido transmitir mis sensaciones, porque cuando me estaba subiendo en el tren, lo que pasaba por mi cabeza era "espero poder venir el año que viene".
Bueno, es un poco ridículo hacer una valoración del torneo a estas alturas, creo que mi opinión es más que evidente, pero a modo de conclusiones, creo que es lo suyo. El torneo fue de 10, todo facilidades, suficiente espacio, el bocadillo estaba bueno, la escenografía cambiaba en las mesas (no una locura, pero es normal con tantos jugadores), los escenarios son entretenidos pero lo bastante simples, los árbitros pacientes, el ambiente festivo, algunos ejércitos preciosos, los sorteos abundantes, las anécdotas brutales, el horario se respetó pese a los agobios de algunas partidas, el nivel de juego bastante alto pero sin perder el espíritu de juego...lo difícil va a ser mejorarlo el año que viene.
Quiero terminar el artículo con un par de cosillas más.
Por un lado, las intenciones. A raíz de este torneo, se me han ocurrido algunas ideas, y os voy a dar un adelante.
-Por un lado, he enviado con la colaboración de la organización un correo a los participantes con una encuestilla y una solicitud de información para poder hacer artículos de La lista de la semana de sus listas. Me parecía una gran oportunidad, ya que además había tantísima variedad. He de decir que la acogida está siendo muy buena y tengo material para meses, espero que puedan ser pacientes conmigo...
-Por otro lado, ya que tengo la clasificación, facciones y personajes especiales, probablemente intente hacer un breve análisis del metajuego. No algo profundo en plan "esto vas a encontrar en un torneo, haz esto para ganar", ya que ni es el espíritu, ni la mayoría de gente va a jugar un ejército con ese fin, por lo que te puedes encontrar cualquier oponente, sino más bien para ser conscientes de qué le gusta a los jugadores, que tipo de partidas pueden surgir y qué es popular.
-Por último, y dado que Namarie ha incrementado notablemente mi cola de pintura...voy a ver si soy capaz de tener para el año que viene un ejército de Elfos Oscuros para el torneo. No sé si genérico, o una idea muy temática que se me ha ocurrido...pero no creo que el año que viene tire chequeos de animosidad.
Para terminar, esta crónica me ha llevado muchos días, y me hubiera gustado meter más fotos, pero estaba demasiado liado como para hacer un buen reportaje. Espero sinceramente que hayas disfrutado las páginas y páginas sobre el torneo que hay sobre estas líneas, porque lo he escrito con mucho cariño, y de ser así, aprovecho para dejarte un enlace a la crónica que hice del I Torneo Leyendas en miniatura de Abril, y otro enlace a las bases del torneo amistoso por parejas que Leyendas en miniatura organizará en Diciembre de este mismo 2018.
¡Feliz Warhammer Fantasy!
Por un lado, las intenciones. A raíz de este torneo, se me han ocurrido algunas ideas, y os voy a dar un adelante.
-Por un lado, he enviado con la colaboración de la organización un correo a los participantes con una encuestilla y una solicitud de información para poder hacer artículos de La lista de la semana de sus listas. Me parecía una gran oportunidad, ya que además había tantísima variedad. He de decir que la acogida está siendo muy buena y tengo material para meses, espero que puedan ser pacientes conmigo...
-Por otro lado, ya que tengo la clasificación, facciones y personajes especiales, probablemente intente hacer un breve análisis del metajuego. No algo profundo en plan "esto vas a encontrar en un torneo, haz esto para ganar", ya que ni es el espíritu, ni la mayoría de gente va a jugar un ejército con ese fin, por lo que te puedes encontrar cualquier oponente, sino más bien para ser conscientes de qué le gusta a los jugadores, que tipo de partidas pueden surgir y qué es popular.
-Por último, y dado que Namarie ha incrementado notablemente mi cola de pintura...voy a ver si soy capaz de tener para el año que viene un ejército de Elfos Oscuros para el torneo. No sé si genérico, o una idea muy temática que se me ha ocurrido...pero no creo que el año que viene tire chequeos de animosidad.
Para terminar, esta crónica me ha llevado muchos días, y me hubiera gustado meter más fotos, pero estaba demasiado liado como para hacer un buen reportaje. Espero sinceramente que hayas disfrutado las páginas y páginas sobre el torneo que hay sobre estas líneas, porque lo he escrito con mucho cariño, y de ser así, aprovecho para dejarte un enlace a la crónica que hice del I Torneo Leyendas en miniatura de Abril, y otro enlace a las bases del torneo amistoso por parejas que Leyendas en miniatura organizará en Diciembre de este mismo 2018.
¡Feliz Warhammer Fantasy!
Gracias por tu tiempo y trabajo al transmitir fielmente (lo que la memoria te permite ^_^) lo sucedido en el torneo. Un saludo.
ResponderEliminarMe voy a sonrojar con tantas menciones jajaja Muy buena crónica, muy completa. ¡Qué lástima no haber podido ir al final y qué envidia me dais!
ResponderEliminarAl de Leyendas de diciembre iré sí o sí, aunque creo que será durmiendo poco o nada xD
Una entrada espectacular. Mi más sincera enhorabuena por el trabajo.
ResponderEliminarEs emocionante leer que el proyecto se está convirtiendo en algo tan grande, lo que acabará provocando que muchos nos animemos a comenzar en él.
Un saludo.
Muchas gracias por esta crónica. Enriquece más que sólo los informes de batalla. La he disfrutado mucho aunque la haya acabado "a ratos"
ResponderEliminarEnhorabuena por la crónica, me la he leído entera y muy muy amena.
ResponderEliminarNivelazo de pintura por lo que se ve en las fotos!!
Muy buena crónica, gracias por tu tiempo.
ResponderEliminarBuenas he encontrado el blog por casualidad y me encanta. Soy también seguidor de cargad y estos reportes para jugadores veteranos como yo son una bedición.
ResponderEliminarSoll te hago un pequeño reporte para que le echrs un viatazo: Si una unidad de nocturnos que contiene fanáticos huye por, cualquier razón, estos se pierden. No sé si con MDNR eso ha cambiado. Pero en sexta edicion es así. De todas formas echare un ojo a faqs para re revisarlo.
Un abrazo y seguid así
Buenas FranVoV, ¡bienvenido entonces! Me alegro de que te guste, seguro que encuentras algo interesante en nuestros archivos.
EliminarEn cuanto a los fanáticos, yo desde luego no encuentre en Sexta edición que se pierdan por huir (ni en el MDNR, ni en el libro original, ni en los Manuscritos de Altdorf con sus erratas, ni en la recopilación de Burjassot), donde sí pone que no se pueden usar de las unidades que huyan es en Séptima edición.
;)
Buenas Cordo me encontré tus informes de batalla de youtube por que me he reenganchado a warhammer recientemente, y después me encuentro este blog! Felicidades por el gran trabajo! Aun tengo el titulo de mejor general en la pared y ver reportajes asi me da mucha nostalgia. Ojala vuelvan estos torneos. Un saludo!
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