Buenos días lanzadores de dados. Ya llevamos dos partes de la crónica sobre el II Torneo Leyendas en Miniatura, en donde vimos el pretorneo, mi lista por encima y la primera batalla. En esta entrada continúo y complemento la narración de mi segunda partida, con otra ronda de fotos de ejércitos mejor pintados que el mío. Para los más empanados, se trató de un torneo de Warhammer Fantasy 6ª edición con Manuscritos de Nuth Reloaded (MDNR). Esta vez me será imposible extenderme mucho con la parte de informes, pero eso no quita que os cuente algunas anécdotas...
Aviso a navegantes: Por experiencias previas, se me ha pedido dividir este tipo de artículo en partes. A mí me gusta escribirlo entero, así que lo publicaré por partes y al final todo unido, para quien lo prefiera así.
Parte 3: Disputando el II Torneo Leyendas en Miniatura
Tras la comida bajamos tranquilamente, repartimos los emparejamientos para que la gente fuera trasladando los ejércitos y esperamos un momentillo a que nuestros visitantes fueran al hostal a dejar equipajes, reanudando el torneo con más tortazos.
Ronda 2:
Orcos y Goblins (Cordo) VS Enanos del Caos (Juanma)
¡A por la piedra bruja!
El escenario era de nuevo una batalla campal clásica, con despliegue oculto, pero esta vez en vez de dar puntos los cuadrantes, los daba un objetivo de tres posibles, que solo se revelaba al final del primer turno. Es decir, que aquí la movilidad podía ayudar, cosa que no jugaba a favor de Juanma.
El escenario era de nuevo una batalla campal clásica, con despliegue oculto, pero esta vez en vez de dar puntos los cuadrantes, los daba un objetivo de tres posibles, que solo se revelaba al final del primer turno. Es decir, que aquí la movilidad podía ayudar, cosa que no jugaba a favor de Juanma.
Mi oponente (Juanma) forma parte de la organización del torneo, y espero (en algún momento de aquí al fin de los tiempos) que podáis leer alguna aportación suya en el blog en el futuro. Además, Juanma fue el ganador del I Torneo Leyendas en Miniatura, dirigiendo una tropa de Ogros hasta una triple masacre. Esta vez estaba probando su nuevo ejército, los Enanos del Caos, con los que aún le falta soltura y práctica, así que, con las miniaturas que tenía y planteando una estrategia probada, optó por una lista de magia y disparo. A algunos os parecerá mal ver dos cañones estremecedores (lo comentaré más adelante), pero he de decir que la lista original de Juanma llevaba uno y un mortero terremuerte, pero no le era posible tener conversionado el terremuerte para el torneo, y pidió cambiar la lista ligeramente con tiempo para que nadie pudiera decir que el terremuerte no era reconocible.
Su lista a grandes rasgos...
-Gran brujo (general) de nivel 4
-Brujo de nivel 2 portapergaminos
-Herrero demoníaco nivel 1
-Herrero demoníaco nivel 1
-10 guerreros enanos del caos con ballesta y músico
-10 guerreros enanos del caos con ballesta y músico
-20 guerreros enanos del caos con arma de mano, escudo, portaestandarte y músico
-20 guerreros enanos del caos con arma de mano, escudo, portaestandarte y músico
-5 jinetes de las estepas
-5 jinetes de las estepas
-5 jinetes de las estepas
-5 jinetes de las estepas
-15 berserkers
-19 esclavos orcos con rebanadora y armadura ligera
-19 esclavos orcos con rebanadora y armadura ligera
-1 lanzavirotes hobgoblin
-1 lanzavirotes hobgoblin
-1 cañón estremecedor
-1 cañón estremecedor
Como véis, es una lista con muchas unidades duplicadas, que trata de ralentizar el avance enemigo con estremecedores, jinetes de lobo y pánicos, concentrar magia y disparo, y acabar con lo que llegue con los tres bloques, uno de ellos inmune a psicología.
Tuve la fortuna de que nos tocó jugar en la misma mesa que en la ronda 1, y que volví a perder el dado de elegir lado, quedándome de nuevo el lado de los muros, ya que mi oponente quería la colina.
Os recuerdo que el campo de batalla contaba básicamente con una colina grande y ruinas en un lado, un impasable y ruinas en tierra de nadie, y dos muros en el otro lado.
En la generación de hechizos, Juanma eligió Muerte para sus brujos, con una combinación de proyectiles mágicos, robo de heridas y daño de área, y los dos herreros llevaban la Bola de Fuego clásica del saber del Fuego.
Mi planteamiento no era muy distinto de la última vez. Hacer dos frentes de avance a los lados del impasable, uno de ellos con los dos garrapatos (para que no murieran a la vez), usar al kaudillo para romper la línea, y llegar en segunda oleada con los nocturnos con fanáticos, mientras dejaba que los guerreros orcos y/o las arañas se ocupasen de coger el objetivo para mí.
En mi flanco izquierdo tenía lobos, frente a sus ballesteros, arañas frente a las ruinas (primera vez en mi vida que uso su habilidad de cruzar para algo) y los guerreros orcos tras el muro para avanzar más adelante. Entre las ruinas e impasable, jabalíes, nocturnos, el karro y otra de nocturnos en segunda oleada. Al otro lado del impasable kaudillo, nocturnos, dos garrapatos y salvajes, y en el extremo derecho, frente a sus otros ballesteros, más lobos.
Juanma básicamente puso tres máquinas en la colina, el otro estremecedor en sus ruinas (donde Amedeo puso la garrapulta), todos sus bloques y lobos entre ambas zonas de disparo, y los ballesteros a los flancos. Eso sí, no sé hasta que punto le merecía la pena tener a los lobos detrás cuando yo carecía de disparo.
En esta ocasión empecé segundo, algo muy clave para la partida, debido a los estremecedores, que convertían cada una de mis fases de movimiento en media, de manera que avanzaba mucho más lento de lo normal (y eso que era un ejército rápido).
Para empezar Juanma falló dos de sus tres animosidades (no sabéis lo que se siente jugadores no-verdes), se recolocó ligeramente, empezó a disparar y a lanzar proyectiles. La tónica de sus turnos sería bastante similar, los ballesteros se fulminaron rápido mis unidades de lobos, los estremecedores ralentizaban de media 3 unidades (o 4) cada uno por turno, y yo avanzaba pacientemente, esperando las tiradas de problemas o disfunciones. Decidí administrarme y usar un pergamino por turno, por lo general, para el hechizo de 2D6 de F4, que siempre iba a los despachurradores.
Nuestros turnos se difuminan bastante, pero lo más interesante de estos primeros compases es que metí las arañas en las ruinas (acordamos que era -1 a ser disparados por cobertura ligera) y tuve la suerte de que el objetivo "real" era justo ese, de manera que a Juanma le era imposible llevar a la infantería. Trató de llevar los lobos, pero los fanáticos les cortaron el movimiento dos veces (turno 2 y turno 3, una cada unidad) y acabaron explotando. Los lobos del lado derecho estuvieron a punto de alcanzar al brujo nivel 2 en una carga por el flanco antes de morir por virotes de ballesta, pero se quedaron unos centímetros cortos. Y mi kaudillo en serpiente alada pensaba usarlo para cargar al estremecedor de la colina (debí haberlo hecho para negarle disparo), pero con la regla demonio atado nos surgieron muchas dudas y pensé que me quedaría clavado y vulnerable a cargas de la infantería. No quise cargar a un lanzavirotes porque el terror con L6 podía hacerle huir y no quería salirme de la mesa, sino provocarle chequeos de terror a ambos lanzavirotes, a los orcos y más adelante a los enanos. En cierta manera surtió efecto, ya que la dotación de un lanzavirotes huyó.
Tuve bastante suerte en que a lo largo de la partida Juanma sacó 4 veces problemas en los estremecedores. Dos de ellas, al repetir por el herrero no hicieron nada, pero una de ellas fue problemas-repetición-problemas, resultando no disparar ese turno ni el siguiente, y me dió el respiro que necesitaba para que los dos garrapatos llegaran. Los jinetes salvajes de jabalí quería tirarlos contra el estremecedor inutilizado, pero me costó un rato, debido al terreno difícil de las ruinas.
Como par de curiosidades, Juanma le dió la vuelta a los berserkers para evitar que yo pusiera ahí mi kaudillo buscando terrores, así que lo mandé a por los orcos por el flanco, aunque le costó dos o tres rondas de combate que huyeran. Se reagruparon más adelante, ya como estorbo más que nada, pero no perseguí para no quedarme en mala posición.
También recuerdo que avancé los orcos al objetivo, sin entrar en las ruinas, para ponerle a Juanma un objetivo de disparo para los ballesteros. Es cierto que las arañas tenían cobertura, pero eran solo 5 y tenían L6, así que prefería perder algún orco (a largas, con R4, 10 cuerpos, L7 y músico...) porque si huían valían menos puntos y no les daba tiempo a volver, mientras que las arañas eran más móviles.
En los turnos 4 y 5, mis garrapatos atravesaron ya bloques enanos, aunque eran muy grandes para comérselos de verdad. La concentración de magia logró hacer explotar a uno, y el otro aguantó varios virotazos (hobgoblins fallones) quedando al final de la partida con 1 o 2 heridas restantes. Por otro lado, el otro estremecedor seguía conteniendo a los jabalíes, que justo ese turno 5 cuando podían cargarle fallaron miedo (por el demonio atado en la máquina) y perdieron la ocasión.
El turno 5 fue bastante impactante, ya que mi garrapato vivo tenía delante a 6 guerreros enanos del Caos y brujo nivel 2 en una línea, y al brujo nivel 4 suelto en la otra. El problema era que tras el brujo nivel 4, había trabado dos unidades de nocturnos (una por el flanco) con los orcos reagrupados, y si iba para allá sabía que podía cargarme a mis nocturnos y regalar puntos tontamente. Lancé el garrapato a por los guerreros, matando 5 de 6 en 8 impactos (y superó pánico) y al brujo de 2 heridas le hice 3 impactos y 1 solo herida...hay que joderse. Eso sí, en el turno 5 de Juanma me sonrió algo la suerte por otro lado, ya que finalmente los salvajes acabaron con el herrero (único superviviente de aquel estremecedor) y con ello con la máquina, y el pánico hizo huir al valiente guerrero enano del Caos que quedaba.
No nos dió tiempo a jugar el turno 6, donde mi kaudillo tenía prácticamente hecho depredar a unos ballesteros (lo tenía detrás de ellos) y el garrapato podía fácilmente acabar con el brujo nivel 2. De todas maneras creo que con esos puntos no bastaban para saltar al siguiente nivel de victoria y ganar más puntos de torneo.
Al final del turno 5, el recuento me presentaba con una ventaja de unos 700 puntos, otorgándome una victoria decisiva, y 5 puntos de torneo para propulsarme un poquito en la clasificación. Realmente creo de nuevo que el resultado era adecuado vista la situación en mesa en los últimos compases de la partida, aunque fue extremadamente determinando ese turno de doble problemas que me sirvió para romper el flanco con los garrapatos y comenzar la escabechina.
En todo caso he de decir que la experiencia de jugar contra doble cañón estremecedor resulta bastante miserable. No me refiero a que Juanma hiciera nada mal, lo digo más con la definición del miserable inglés (unpleasant and causing unhappiness). Es muy frustrante y los dos jugadores sois conscientes de que esos disparos son lo más determinante de la partida. Costará los puntos que quieras combinarlo con un herrero, pero el efecto es brutal. El daño es el de una catapulta (a Juanma se le desviaba todo el rato y no mataron casi nada) pero el cacharro niega tanto disparo como movimiento. Y en área de mucho rango. Y una catapulta anula armadura. Estamos hablando de que sirve contra cualquier cosa que no vuele...e incluso a un monstruo que vuela como le caiga en la cabeza F8 1D6 heridas múltiples...pues al maletín. También creo que Juanma se vió encerrado y con una lista muy rígida, ya que además los ballesteros tienen mover o disparar, a diferencia de cosas como las gujas ardientes. Para mí le faltaba alguna unidad de contracarga (pienso en centauros por ejemplo, en vez de los berserkers o los esclavos orcos)
También es verdad que acabé contento de jugar contra Enanos del Caos (es la raza que me faltaba para cerrar el círculo), y jugar con Juanma siempre es interesante. Y de paso nos sirvió para darnos cuenta de que la regla demonio atado necesita un repaso...
Por cierto, no sois conscientes de lo que puedo llegar a disfrutar tener una unidad (bueno, el general) con volar. Los pielesverdes no tenemos ninguna y es una auténtica delicia tener esa movilidad. No me cansaré de repetirlo, no se la valora lo bastante.
Y para cerrar esta parte...¿resultados y más fotos?
Fran Gómez (Condes Vampiro) 0 - 6 Hans (Imperio: Guardia del Emperador)
Rass (Altos Elfos) 5 - 1 Francisco José (Bretonia)
Nalter (Altos Elfos) 0 - 6 Manuel López (Reyes Funerarios)
Amedeo (Skaven) 6 - 0 Rubén (Imperio)
Alan (Bretonia) 0 - 6 Larkin (Reyes Funerarios)
Jorge (Orcos y Goblins) 0 - 6 José (Altos Elfos)
Alberto Jordán (Reinos Ogros) 0 - 6 Barahair (Bretonia)
David (Enanos) 6 - 0 Francisco de Borja (Orcos y Goblins)
Julio (Condes Vampiro) 2 - 4 Dani (Hombres Lagarto)
Manuel Campos (Caos) 3 - 3 Abraham (Skaven)
Xavi (Orcos y Goblins: Goblins Nocturnos) 6 - 0 Javier (Elfos Oscuros)
Juanma (Enanos del Caos) 1 - 5 Cordo (Orcos y Goblins)
De nuevo asombrosa la cantidad de masacres que se dieron, incluso entre listas que venían de ganar ambas 6 - 0 la ronda anterior. Khorne no podría decir que no estaba presente...
En la lista de enanos del caos faltan los jinetes de lobo ni los esclavos orcos?
ResponderEliminarMuchísimas gracias por el resumen.
Muy interesante.
Un saludo!
Vaya despiste...¡corregido!
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