El Renacer del Bosque de Loren (V)

Buenos días de sufrida canícula. Hace unos días me pasó Peto su siguiente aventura en este periplo a los mandos de las tropas silvanas, y hoy os lo traigo porque es interesante ver cómo tener distintos ejércitos enfrente cambia radicalmente la funcionalidad de las unidades. Y esta vez se trataba del combativo Caos...

Nota: Antes de empezar quiero aclarar que esto NO ES UN INFORME DE BATALLA. Recuerdo que lo que quiero hacer es exponer el rendimiento de mis unidades mientras se curtían el lomo, aunque para ello cuente algunas cosas de la misma batalla. Tampoco pondré listas de ejército, sino que pondré una somera descripción de los ejércitos así como explicaré el plan de batalla que tenía cada uno.

- Siéntate, Elhùvien – empezó Elentári. – Te voy a contar la historia de la primera vez que entré en batalla. Fue hace ciento ochenta y siete años. Para mí una fecha señalada. Estaba ansiosa por mostrar mis dotes y ver lo fructífero que había sido mi aprendizaje -.

- Recuerdo que eran finales del otoño. El bosque empezaba a dormir cuando los videntes del Viejo Hayedo tuvieron sueños premonitorios acerca de una hueste de Guerreros del Caos y el futuro que sufrirían algunos de nuestros hermanos si no conseguíamos pararles. Como sabes somos una especie en declive y necesitamos proteger a los nuestros, es un deber que tenemos para con nuestra raza -.

- Mi señor en aquel momento era Galador, gran capitán de la Guardia Eterna, que gozaba con el favor de Ariel y se le había designado la tarea de defender el Bosque más allá de nuestras fronteras. ¡Si le hubieras conocido, pequeña! Era pura nobleza, digno de su nombre y de su posición -.

- ¿Podría decirse que se sentías atraída por él, ama? – Preguntó Elhùvien.

Elentári rio.

- Era difícil no estarlo, pequeña, pero yo me debía a la diosa y a la magia. No tenía tiempo para ninguna aventura amorosa -.

- ¿Por dónde iba? Ah sí, pues teníamos que reunir guerreros para partir a la batalla. A mí me dejaron encargada de hablar con el bosque, tarea nada fácil, pues, como sabes, nuestros aliados tienden a dormir cuando llega el invierno. He de reconocer que me costó pero aun así conseguí que un grupo de dríades nos siguieran en nuestro peligroso viaje por la raíces del mundo -.

Buenos días amantes de los bosques,

Mi tercera batalla de aprendizaje Silvano. Me enfrenté a Javi y sus Guerreros del Caos. Jugamos a 2000 puntos. Los caóticos llevaban un ejército muy al uso. Dos unidades de Mastines del Caos, dos de guerreros del Caos con marca de Slaanesh (una de ellas de elegidos), dos unidades de Caballeros del Caos con marca de Slaanesh (una de ellas de elegidos) y un Carro del Caos con marca de Slaanesh. Sus personajes eran un señor del Caos en Mantícora, un portaestandarte de batalla que estaba en una unidad de caballería y un hechicero.

Por mi parte llevaba una unidad de guardia del bosque, otra de dríades, una de jinetes del bosque armados con arco y lanzas, una de enjambres, otra de guardia eterna, como no, unos bailarines, unos halcones y unos forestales. Con respecto a héroes llevaba cuatro. El primero era un biennacido que era de la estirpe de la guardia eterna, un noble que era de la estirpe de los forestales y dos cantoras.

En el campo de batalla tuvimos 7 elementos de escenografía. A mi izquierda había dos atalayas, una en su lado del campo y otra en el mío, en el centro teníamos unas ruinas en mi zona de despliegue y un bosque en el lado de Javi. Y finalmente en el lado derecho había dos colinas, una en su lado y otra en el mío. El bosque que tengo que poner por la regla especial de los elfos silvanos en batallas campales lo puse entre las ruinas y la colina de la derecha. ¡¡¡Esta vez tenía cobertura!!! Lo que pasó con esta escenografía es que al final la batalla se dividió en dos zonas que tuvieron poca interacción entre ellas.

Mi idea era aguantar las cargas de sus jinetes y hostigar a sus guerreros a pie. Ahora veremos cómo salió todo...

En la derecha desplegué los halcones como fuerza de flanqueo, las dríades, la guardia del bosque, los enjambres y una maga. Me enfrentaba a una unidad de mastines, a una de guerreros y a otra de caballeros, en la cual tenía el portaestandarte de batalla. Lo primero que he de decir es que en este flanco desplegué muy mal ya que los enjambres quedaron por detrás de mis arqueros y las dríades, por lo que su función para parar la carga de caballería quedó directamente anulada. En este lado los halcones tuvieron un comportamiento bastante bueno aguijoneando a los mastines y a los guerreros a pie, pero poco más. Mis arqueros dispararon a los guerreros causando pocas bajas. En el turno 2 del Caos recibieron la carga del señor del Caos y, aunque consiguieron hacer una herida a la mantícora mientras cargaba, poco más se puede hacer contra toda esa fuerza bruta, y más unos pobres orejas puntiagudas. Las dríades quisieron cargar contra los caballeros del Caos pero se quedaron a escasos 3 centímetros y no pudieron realizar la carga, por lo que se quedaron comiendo pipas esperando a ser masacrados por los caballeros. He de decir, que después de la carga inicial aguantaron dos turnos como jabatas. Con los enjambres no pude hacer otra cosa que cargar contra los guerreros del caos que en turno y medio se cepillaron a los pobres espíritus. La maga de este lado consiguió mover el bosque hábilmente para entorpecer el avance de la caballería.

He de comentar antes de empezar con el lado izquierdo que en el bosque que había en su lado del campo de batalla desplegué a los forestales, pero su mago, en el turno 1 les lanzó una bola de fuego muy chula que mató a 4 de los 6 forestales (se me olvidó usar el pergamino de dispersión, un aplauso por mí) y, después de cargar contra él, tuvieron que pasar un par de turnos para matarle. Después los forestales se unieron a los combates del lado izquierdo del campo de batalla.

En la izquierda desplegué los jinetes, la guardia eterna y los bailarines, acompañado este lado por su maga. Frente a ellos estaban unos mastines, el carro, una unidad de guerreros y otra de caballeros. Los jinetes terminaron con los mastines y después cargaron contra el carro por su retaguardia haciéndole huir y alcanzándolo y exterminándolo. Con respecto a las otras unidades los bailarines también hicieron una carga fallida contra los caballeros y también se quedaron comiendo pipas a la espera de la temida carga, pero la aguantaron bien y luego les ayudaron los forestales que cargaron por el flanco de los caballeros. Javi y yo llegamos a la conclusión de que durante los 3 turnos que estuvieron estas tres tropas enzarzadas fue un combate de mancos, no sé si llegamos al muerto por turno. Al final la caballería caótica terminó por huir y una agraciada flecha de un forestal mató a un integrante más de la unidad imposibilitando que se pudiera reagrupar. Con respecto a la guardia eterna consiguió cargar, sí, lo consiguió, contra la unidad de guerreros del caos, pero fue otro combate de mancos, estuvimos alucinando otro rato los dos. Pero este impase fue roto por una carga por la retaguardia del señor del Caos y su mascota manticoril. Al final la guardia eterna huyó y pereció bajo las garras de su alada perseguidora.

Otras consideraciones fueron el movimiento de los bosques que hicieron mis magas para evitar que los caballeros del lado derecho se pudieran unir a la batalla de la izquierda.

El resultado final fueron unos 600 puntos para mí frente a los 1200 de mi contrincante. Muerto, muerto y bien muerto.

Conclusiones.

Lo primero que me falló fue el despliegue. Como dije los enjambres estaban muy mal colocados, justo detrás de las tropas. Y dejar una unidad de arqueros y las dríades para defender sólo un lado… pues tampoco fue muy hábil, la verdad. Además se me olvidó que tenía el pergamino y también olvidé mover el primer turno a los forestales. Un despropósito.

Por otro lado creo que los movimientos de bosques que hice con los magos fueron acertados, me permitieron ganar tiempo y mis dos unidades de flanqueo funcionaron bien, aunque claro, los mastines del caos son debiluchos y fáciles de matar en comparación con otras unidades de flanqueo a las que me he enfrentado.

Y como última conclusión general he de decir que meter más unidades de espíritus del bosque, que son principalmente las de pegada de los silvanos, no hubiera estado de más contra Caos.

Hablando de unidades,

Los forestales. Primera vez que lo usaba. Son una unidad que supondrá un quebradero de cabeza para el contrario y más si son desplegados en un lugar en el que eviten que sus unidades marchen. No pude probarlos en todo su potencial porque me mataron a 4 de los 6 integrantes de la unidad con la bola de fuego, pero sus dos ataques en combate cuerpo a cuerpo y el golpe letal en disparos a corto alcance son bestiales. Tendré que meterlos otra vez para seguir probándolos.

Los halcones funcionaron muy bien estorbando detrás de los caballeros y mareando a los mastines. Cargaron un par de veces contra los guerreros del caos haciéndoles tres bajas en total. Al final los sacrifiqué para que los guerreros del caos no pudieran cargar contra mis jinetes, era cuestión del valor en puntos de cada unidad.

Los Bailarines esta vez no huyeron y probé por primera vez la danza con golpe letal, que se mostró muy útil contra unidades con mucha armadura, pues mata directamente sacando seises a la hora de herir. A parte de las tiradas de dados todo fue bastante bien. He de decir que nunca he metido en esta unidad músico y portaestandarte, pero me lo estoy planteando seriamente.

Las dríades poco pudieron hacer contra la caballería del caos, lo mismo que la guardia del bosque contra la mantícora. Al menos, ambas, tuvieron una función de contención de tropas al estar un par de turnos trabadas en combate.

Los enjambres, pues decirte que no pudieron tirar su hechizo para hacer estúpida la unidad porque el contrincante, con la marca de Slaanesh, era inmune a psicología y tampoco pude usarlos a modo de “aguanta cargas” que creo que es lo suyo. Primera vez que las usaba pero ten por seguro que les voy a dar otra oportunidad.

Los jinetes del bosque era la primera vez que los usaba con arco, lanza y escudo… Y que quieres que te diga, eso de que puedan disparar o cargar me gusta bastante. Hace que puedan ir desgastando unidades antes de darlas la estocada final.

Con respecto a la guardia eterna. Pues creo que de no haber recibido la carga por la retaguardia a lo mejor hubieran aguantado más y cierto es que fallé un chequeo de desmoralización con tozudez y liderazgo 10, pero eso es cosa de los dados. Habrá que probarla de nuevo.

Y fin del aprendizaje del otro día. Espero no haber llorado mucho y también espero para a la próxima no olvidarme de objetos mágicos ni de mover unidades. A veces me sorprendo de las cafradas que soy capaz de hacer. Jajajaja.

Y siempre me quedará mi buen humor y más después de jugar contra Javi, un tipo con el que me lo pasé genial.

Saludos desde el Roble Eterno,

Peto