[INFORME DE BATALLA] El Bosque Oscuro (Orcos y Goblins VS Condes Vampiro)

¡Muy buenas jugones! Esta vez la sorpresa la compartimos, ya que nos ha llegado al correo un informe de batalla (estoy in loooooove con los informes de batalla) cortesía de Enric, que entre tanda de pintura y tanda de pintura nos ha preparado este regalito. Hace poquito tuvimos el Corredores de Sombras 2019, y durante su preparación ha encontrado el tiempo para deleitarnos con esta batalla entre los Machotez de Grimgor y una peligrosa hueste no muerta a los mandos de un Strigoi (a las órdenes de Jordi)...

Muy buenas, Señores del Diógenes Miniaturil!

Este artículo es distinto al resto que he hecho en este blog (escalada de pintura), pero como disfruto mucho leyendo listas e informes de batalla, creo que ya era hora de colaborar con mi granito de arena y que otros puedan disfrutar también de un informe de batalla.  Sí que quiero destacar que es mi primer informe de batalla, así que si veis cosas a mejorar estaré encantado de recibir consejos o detalles que se me hayan pasado (entre ellas, el dominio del battle chronicles, que es la primera vez que lo uso).

En segundo lugar, avisar que no me considero (¡Aún! La motivación nunca se pierde XD) un gran general de Warhammer y, aunque me conozco muy bien el reglamento desde hace años, he hecho mil listas y leído muchos informes, y juego decentemente y con cabeza, sigo cometiendo fallos estratégicos y me queda mucho por mejorar, así que no os esperéis tácticas pro e infalibles, sino únicamente un tío que os cuenta su vida y como intenta aprender de sus errores (y justificar las decisiones que tomo). Al lío:

Trasfondo

En su camino hacia el norte para enfrentarse a  Archaon, Grimgor Pielhierro ha reunido un gran contingente de bravos y duros orcos, veteranos de mil batallas, con los que marcha sin descanso.  Tras su derrota contra Crom, ha repudiado a los débiles goblins, ya que solo los más fuertes tienen cabida en su ejército: los machotez de Grimgor, se autoproclaman.

Tras muchos días de marcha por los caminos imperiales, estos se desvían, rodeando un antiguo y oscuro bosque. Los humanos capturados revelan que  nadie se adentra en él, pues un antiguo mal descansa entre los árboles, y devora a los incautos. Como era de esperar, Grimgor no se ve amedrantado por esas historias:

-Archaon eztá en línea recta hacia delante. Puez hacia delante ze va-

Es durante la primera noche en el bosque en que extrañas formas aladas sobrevuelan sus tropas, y los aullidos de las bestias se oyen en la lejanía. No están solos. Antorchas en mano, los orcos se preparan para la batalla.

El vampiro Strigoi ha hecho de los bosques su dominio, y un grupo de monstruos, y criaturas devoradoras de sangre de todo tipo se han visto atraídas hacia su cubil a lo largo de los años. No dejará que nadie atraviese su dominio.

Contexto

A pocos días del plazo de entrega de la lista de Corredores, Jordi quería probar su lista a 2000pts. Acostumbrado a jugar con grandes peñas orcas, o lentas hordas nigrománticas, esta presentaba un desafío muy distinto, ya que está formado en su mayoría de unidades voladoras (vargheists, varghulfs, murciélagos de todo tipo, general volador, etc) y quería probarla antes. Está pintando a todo correr miríadas de zombies, así que en la partida trajo milicianos imperiales como proxies.

Por mi parte, llevo todo el año jugando goblins y me apetecía probar la lista de los Machotez de Grimgor, aunque como mis jinetes de jabalí están pegados en peana conjunta (de las épocas de kow) y alguna mini no es la que es (no tengo porta de batalla orco y los carros llevan tripulantes goblin), quería probarlos en una partida amistosa.

Comentando las listas en la partida nos dimos cuenta que Jordi había contado al Varghulf como singular, y en realidad tenía 5 especiales, así que improvisamos algunos cambios de última hora. Además, no recordó que en 6ª los necrófagos son vivos y pueden huir, así que no os sorprendáis al ver una unidad de 20 de ellos.

Lista Machotez de Grimgor

Mi lista era muy parecida (casualmente, porque la tenía hecha hace bastante) a la de Mathy en su lista de la semana http://www.leyendasenminiatura.com/2019/03/la-lista-de-la-semana-zi-zabez-komo-me.html, de hecho, con Machotez y Grimgor pocas variaciones se pueden hacer. Con lanzapiedroz en lugar de lanzavirotes, y, estando convencido de que la unidad de Grimgor sería mareada toda la partida, no quise gastar tantos puntos en ella y la reduje a 15, contando a Grimgor. Rascando puntos me dio para ponerme… una unidad de arqueroz orkos :D seeeeh! Con glamour ;)

Personajes

-Grimgor Pielhierro

-Gran jefe orco negro, porta de batalla, con Koraza Dura de Pelar (tsa +1) (El Gran Orkoporko) 135pts

-Chamán orco de nivel 2 con 2 pergaminos (Grumlok el flatulento) 150 pts

Básicas:

14 Orkos negros, Guardia personal de Grimgor, con 2 armas de mano (estandarte que da tozudez), tienen odio 252 pts

19 Orkos Grandotes con arma adicional, grupo de mando y estandarte del beztia de Nogg  205pts

19 Guerreros Orkos con arma adicional y grupo de mando completo 142pts

2 x 5 Jinetes de Jabalí con lanza, escudo, armadura ligera, y portaestandarte 2x104pts

10 Arqueros orcos con músico, 75pts (seeeh)

Especiales

2 x Carros de Jabalíes  80+80pts

Lanzapiedroz con espabilagoblins, 75pts

Singulares

Gigante 205pts

Kareto de Gorko, 0pts (gratis con grimgor)

(llevo muchos portaestandartes, ya que el kareto de Gorko otorga un portahechizos de un solo uso a cada uno)

Lista Condes Vampiro

La lista de Jordi es, estratégica y trasfondísticamente, muy interesante: un grupo de vampiros Strigoi (con comandante volador) ha reunido en su cubil a un grupo de monstruos (varghulf, vargheists, demonios de la cripta, murciélagos de todo tipo, etc), así que su lista es mayormente de monstruos voladores, hostigadores, etc. Con lo bueno y malo que eso conlleva.

Por otra parte, su cubil está lleno de cadáveres de los humanos que ha ido devorando todo este tiempo, así que lleva una gran horda de zombies (ningún esqueleto, ni caballería ni nada parecido, solo montones de carne a medio devorar). Hay dos nigromantes en la lista, estúpidos ambiciosos que oyeron las leyendas y creyeron que algún poderoso mago no muerto viviría en estos bosques, dispuesto a enseñarles… y se equivocaron. Ahora duermen en un rincón de la cueva con los demás necrófagos, se esconden de los Strigoi cuando estos se enfadan, y comen restos de carne humana. También hay una doncella espectral, que improvisamos, dado que se pasaba de unidades especiales. Pronto tendrá trasfondo propio XD

Personajes

General: Conde vampiro Strigoi, mago de nivel 2, con los poderes de regeneración y volar, 340pts

Neonato Strigoi, con los poderes de F+1 y llamar a los necrófagos, 125pts

Nigromante lvl2 con báculo llameante de la muerte (portahechizos lvl3, proyectil mágico 1d3 impactos de f3 que si hacen herida, obliga a chequear pánico)

Nigromante lvl2 con pergamino y relicario de la muerte (portahechizos un solo uso en combate cuerpo a cuerpo)

Básicas

28 zombies con músico y portaestandarte 183pts

3 Bandada de murciélagos, 180pts

20 necrófagos con campeón, 170 pts

Especiales

3 Horrores de la cripta con campeón 191

3 Vargheists con campeón 188

4 murciélagos vampiro 80

Varghulf 150

Singulares

Doncella espectral 90

(Estuvimos comentando la lista, dado que Jordi está más acostumbrado a jugar a kow, y anteriormente a otras ediciones, y hay cosas “extrañas”, como esa unidad de 20 necrófagos, no inmunes a psicología, que están pidiendo huir a gritos. Seguramente la lista sería más óptima quitando algún campeón y reduciendo la unidad de necrófagos a la mitad (o hacer dos unidades de 5), para tener una segunda unidad de zombies, que den “algo de presencia” en el campo de batalla, y permita tener a los nigromantes separados. Aparte de eso… da miedo igual, con tanto monstruo volador xD)

Hechizos

En primer lugar, tiramos los hechizos. A mí me tocó con mi chamán los dos proyectiles del pequeño waagh (1d6 y 2d6 de F4). No esperaba hacer mucho con ellos, excepto los turnos en que quisiera activar estandartes, donde estos hechizos me servirían como medida de presión (¿que prefieres dispersar? ¿2d6 de F4 o que Grimgor te de pa’l pelo dos veces?)

En cuanto a los estandartes, podían tocarme 3 hechizos distintos: mano de morko, para mover (en la unidad de orkos grandotes y una de jabalíes), a por ellos (atacar primero y repetir para impactar, en la de orcos normales y el porta de batalla, que iría en la de orkos grandotes), y allá vamos (ronda de ataque en la fase de magia), en la de grimgor –jojojo- y en la otra de jabalíes.

En cuanto a los Condes, cambió en todos sus magos uno de sus hechizos por el de Nehek, teniendo el Strigoi y un nigromante tambén la mirada de Nagash (2d6 de F4), y el otro nigromante la maldición de los años. Por suerte no le tocó el hechizo de movimiento extra, que solo le faltaba eso con tanta voladora. Fiuu.

Despliegue

Pusimos la escenografía un poco así al tuntún, simulando el borde del bosque (con unas ruinas muy chulas que tienen en Drobbit, y árboles, y unos matojos bajos) bastante denso, de manera que ambos flancos tenían escenografía que sortear, y en el centro se quedaba un espacio donde luchar, rodeado de elementos de escenografía que limitaban su acceso.

Jordi eligió sabiamente su lado del campo de batalla donde se formaba un cuello de botella (entre unos campos y un bosque… en el battle chronicler me ha quedado más separado de lo que es en realidad. Las fotos, obviamente, son más fidedignas), para colocar ahí sus zombies cargados de personajes y evitar que llegaran todas mis unidades a la vez.

Llegados a este punto… no tenía ni idea de por dónde tirar: más de la mitad de sus puntos eran unidades voladoras que podían venir y cargarme por donde quisieran. Es decir, que él sería quien elegiría donde y cuando cargarme, y lo único que podía hacer yo era estar preparado para que, cuando esas cargas llegaran, poder contraatacar. Mi despliegue fue por tanto simple como un botijo, ya que lo único que tenía claro es que tenía que evitar regalar flancos y que las unidades tenían que cubrirse los unos a los otros mientras avanzaban: desplegué el tótem y las 3 unidades de orcos en el centro (orcos negros con Grimgor, Porta de batalla con los grandotez, y el chamán en la de orcos normales), intercaladas con los carros, y con los jabalíes flanqueando. No quería dispersar mis tropas para poder beneficiarme de las auras del tótem (a 60cm, anular animosidad si declaras carga, y un dado de dispersión por cada personaje orco negro).

Jordi desplegó la doncella y los zombies en el centro con los 3 personajes a pie. Desplegó un flanco de unidades más “lentas” (horrores de la cripta, necrófagos y bandadas de murciélagos), y otro flanco muy rápido: escondidos detrás de unas ruinas, todos los monstruos voladores (el general, los vargheists, el varghulf, y los murciélagos vampiro), con la intención de que fueran haciendo un  barrido de cargas combinadas, letales si me descuidaba.

Finalmente acabé el despliegue colocando delante de todas estas voladoras a los arqueros, esperando obligarle así a dividir sus unidades, y que alguna de ellas perdiera turnos viniendo a por ellos des-sincronizando el ataque (y sino colaba… pues irían disparando, insultando, provocando, y capturando cuadrante al final de la partida). En el otro flanco coloqué al gigante, dispuesto a enfrentarse a los horrores de la cripta (en realidad, el gigante tuvo un percance en el trayecto y le puse superglue… y como se estaba secando en un rincón se me olvidó desplegarlo XD  nos acordamos durante el primer turno).

Turno 1 Orco

Jordi sacó un 6 al decidir quién empieza, y habiendo acabado antes, no hizo falta ni que tirara el dado. Me cedió el primer turno (buena decisión, así podía ver mis intenciones y actuar en consecuencia con sus voladores. Y en el último turno tendría una fase de magia para curar personajes y unidades).

Superé las animosidades de la mayoría de mis unidades, excepto la de los arqueros orcos, que se quedó quietecita dándose de mamporros los unos a los otros.

Fue un turno muy simple: avancé todo hacia delante a velocidad de infantería, intentando llegar con Grimgor a la unidad llena de personajes, y avanzando en un arco para evitar dar flancos a las voladoras. Los jabalíes y el gigante de la izquierda se dispusieron a enfrentarse a sus carroñeros del flanco. Mientras, sus homólogos porcinos a la derecha se desplegaban en arco para verlas venir (puse a los jabalíes “con mano de Morko” en el flanco derecho, por si se descuidaba y conseguía cazar a alguna voladora).

Viendo que mi rival tenía más dados de dispersión que yo de magia, ni me molesté en que el chamán tuviera algo en la línea de visión y me salté la fase. En la fase de disparo, calculé muy corto con la catapulta, y los arqueros estaban peleándose entre ellos, así que rápidamente acabó el turno.

Turno 1 Strigoi

Con chillidos y gritos animales, los strigoi salieron en tromba de los bosques, preparados para devorar a sus atemorizadas presas. En el flanco izquierdo (mío) los horrores y necrófagos avanzaron, en dirección al centro, mientras las bandadas de murciélagos volaron hacia delante de estos últimos, quedando como cebo ante mis jinetes de jabalí (si cargaba, quedaría trabado, y en su turno los necrófagos me harían pupilla. Si no, me cargarían ellos, y si me iba, dejaría el flanco de Grimgor al descubierto).

En el centro, los zombies avanzaron hacia delante, para acercarse un poco al cuello de botella y que yo no pudiera aprovechar mi superioridad numérica, mientras las voladoras del flanco derecho se acercaban peligrosamente.

El varghulf voló en línea recta amenazando a los arqueros, mientras el vargheist y el conde se acercaban a mi caballería, manteniéndose fuera de distancia de carga. Los murciélagos vampiro se cubrieron detrás del bosque, esperando volar el turno siguiente detrás de mis tropas y dar por saco. Era un movimiento difícil y arriesgado, dado que si se alejaba mucho de mis tropas, el turno siguiente no podría colocarse detrás y acabaría en medio de todo, pero si se acercaba a más, quedaba a distancia de mi carro. Tal como estaba, quedaba cerca de mis tropas, y tal como estaba detrás del bosque… quedaba solo a la vista de mis jabalíes, pero a una distancia dudosa de carga.

En la fase de magia, empezó lo que sería la tónica de la partida: entretener a Grimgor a base de levantar zombies redirectores. Con 8 dados de magia, podía permitirse lanzar 2-3 veces Nehek, y como mucho yo podría dispersar dos de ellos (con 5 dados de dispersión, dado que el kareto de morko proporciona uno por cada personaje orco negro a 60cm).  Fallé al dispersar el primer intento de levantar zombies, y levantó 8 de ellos puestos para torear a Grimgor.

Ahí me puse nervioso y gasté el primer pergamino en el segundo lanzamiento de Nehek, que lanzó para engordar la unidad recién creada (me daba miedo que se fuera de madre y Grimgor quedara trabado con una unidad de zombies artificial toda la partida y rodeado por el flanco por las voladoras. Después, viendo como acababa con los zombies como si fueran trigo y sin necesidad siquiera de calcular inestabilidad, vi que había sido una mala decisión. Ese pergamino me podría haber ido muy bien en otros turnos. Con dos dados intentó lanzar mirada de Nagash, pero falló. Yo tenía aún dos dados de dispersión, y la sospecha de que iría cargado de portahechizos, como todos los Nigromantes a los que me he enfrentado, así que me alegré cuando me cedió el turno.

Grrrr, malditos zombies imperiales

Turno 2 Orcos

Tras superar todas las animosidades bajo la mirada amenazante de los orcos negros, tocaba decidir a que cargar. Con los jabalíes de la izquierda ni lo pensé: si no cargan a los murciélagos, me cargarán ellos y será peor… ¡Así que adelante! (Además, tenía un malévolo plan en mente, relacionado con el portahechizos de su estandarte).  Grimgor cargó también contra los zombies recién creados.

En el flanco derecho, tenía mis dudas: los murciélagos vampiro estaban a una distancia muy “ahí ahí” de los jabalíes, dado que estos estaban en un arco bastante abierto y tenían que hacer una pinza muy larga para poder llegar. Afortunadamente, la unidad tenía el estandarte con el hechizo mano de morko (que te permite avanzar 5d6 en la fase de magia), así que pensé: si no llegas, te queda un as en la manga, no puede dispersarlo todo a la vez. Si cargaba y arrasaba, me alejaría de los vargheists y me situaría peligrosamente cerca de la unidad de zombies con todos los personajes. Miramos la distancia, y la miniatura más lejana tenía que maniobrar 34cm (de los 36 máximos), ¡Fiuu! Las tres unidades superaron el chequeo de miedo. ¡Empezábamos con buen pie!

En cuanto al resto de movimientos, empezando por la izquierda, el gigante se acercó hasta quedarse a lo que a mí me parecieron “algo más de 30cm” de los horrores de la cripta, cubriendo el paso que tenían que seguir estos para ir hacia el centro.

Intenté también corregir un error previo: durante el despliegue, puse el carro de la izquierda junto a Grimgor para cubrirle de cargas voladoras y apoyarle, pero desde el primer turno quedó claro que la estrategia de Jordi no era enfrentarse a mi general, sino irlo distrayendo. Así que no tenía sentido gastar más puntos en ese bloque central que se iba a ver embarrado turno tras turno. Corrigiendo este error, el carro dio un giro y se dirigió hacia el flanco izquierdo por si los jabalíes fallaban (en el flanco derecho hubiera ido muy bien también, pero tal como había movido las unidades tenía que dar un rodeo demasiado largo detrás del tótem).

En el flanco derecho, las dos unidades de orcos se encararon hacia las monstruosidades voladoras, preparándose para futuros turnos. El carro de jabalíes se situó como cebo delante del bosque: si los jinetes de jabalí ganaban a la carga y avanzaban, los vargheists, con furia asesina, tendrían como único objetivo a distancia el carro, y tendrían que cargar hacia él (o declarar una lejana carga hacia otra unidad y quedarse delante del carro). Al tener furia asesina, si ganaban y huía, tendrían que perseguirme dentro del bosque: sí. El carro sería destruido, pero ya no podría usar su movimiento de vuelo y serían más controlables (me daba mucho miedo una carga combinada de estos y el conde Strigoi volador, y no me fijé en que el movimiento de tierra sigue siendo de 15cm y son hostigadores, así que sacrificar el carro tampoco me hubiera dado muchos beneficios… pero, yo que sé, me daban mucho miedo esos bichos XD tenía que separarlos y frenarlos como fuera y el bosque parecía una buena opción de que dejaran de mover 50 por encima de mis rígidos bloques). Al final no valió de nada todo este show… pero eso ya lo veríamos más adelante…

Esta vez sí que tuve fase de magia. Con mis tristes 4 dados, solo podía esperar desgastarle antes de activar estandartes.  Lancé el explotacerebros a los vargheists con 3 dados, y muy buen resultado, obligándole a gastar 4 de sus 5 dados en dispersarlo. Me guardé el dado que me quedaba como amenaza de la mirada de Morko, de 1d6 de f4, y anuncié que activaba el portahechizos de los jabalíes trabados con los murciélagos (nivel de dificultad 4+1 por estar en combate). Recé a Morko para que no sacara un 5 con el dado, pero sorprendentemente prefirió guardárselo por si conseguía lanzarle la mirada de Morko (su plan consistía en reventarme con las cargas combinadas de vargheists y conde, y no quería arriesgarse a que les pasara nada a sus pobres bichitos, aún a costa de sacrificar el flanco izquierdo si hacía falta).

Así que pude hacer una ronda de ataque con los jabalíes, con unas tiradas dignas de Ranald, consiguiendo hacer 7 heridas directas a los murciélagos. ¡Ya llevaba la mitad casi!

En la fase de disparo, fui mucho más certero con la catapulta que el turno anterior, acertando de pleno la estimación en medio de la unidad de zombies… pero un viento fuerte dispersó el pedrusco 25cm hacia atrás, grrrrr. No tenía ninguna fe en los arqueros orcos, pero curiosamente consiguieron causarle 2 heridas al Varghulf que se acercaba (iba tan sobrado que lo dejó a distancia corta de mis arcos XD) … pero las regeneró las dos.

En la fase de combate, los jabalíes de la izquierda causaron 5 heridas más a las bandadas de murciélagos, que no consiguieron hacer nada a cambio, y se desintegraron, así que pude arrasar y trabarme con los necrófagos. La ronda extra de combate había sido la clave. Sin ella, habría quedado una peana de murciélagos a empantanarme, y los necrófagos hubieran podido cargarme en su turno.

Grimgor solito causó 5 bajas a los zombies, y el resto de orcos despachó con facilidad a los que quedaban. No quise arrasar, porque la unidad estaba puesta astutamente para que diera el flanco a la unidad de zombies principal si lo hacía. Me había preocupado demasiado por esos zombies y malgastado un pergamino, grrr.

Con esos dos combates viento en popa, el tercero tenía que ir igual: tenía superioridad numérica y estandarte, y ellos, R3, nada de armadura, y 8 heridas en total. Con solo causar 3 heridas, si no sufría bajas, ya desvanecería la unidad. La media estaba de mi lado… pero, los jabalíes no tenían ganas de luchar y de los 3 impactos que hicieron saqué 2 unos al herir, causando una única herida. Los jinetes consiguieron  hacer una segunda herida,  matando a uno de los murciélagos. A cambio los murciélagos no consiguieron atravesar la dura piel de los porcinos, dándome una victoria por 4 puntos. Dos murciélagos más se desvanecieron… pero quedaba uno.. y los orcos oyeron un grito a sus espaldas. Habían atacado a las crías murciélago… pero las madres no estaban lejos.

Turno 2 Strigoi

Sin dudarlo ni un segundo, los monstruos de Jordi empezaron a cargar por todas partes: a mi izquierda, los horrores de la cripta (que no veían a los jabalíes detrás de los necrófagos) cargaron hacia el lejano gigante, que yo creía a salvo, demostrando que Jordi tenía mucha mejor estimación de distancia que yo porque llegaron cómodamente. El varghulf cargó a los arqueros orcos, que fallaron tanto el chequeo de miedo como todas las tiradas de aguantar y disparar… parecía que se daban cuenta de que Grimgor había puesto a todos esos orcos tullidos y débiles en un rincón por algo. Como era de esperar, los vargheists cargaron a los jabalíes por la retaguardia (que superaron los chequeos pertinentes… seguramente porque no sabían lo que se les venía encima)

Pobre gigante, yo lo creía a salvo...

Una vez hechas las cargas, el neonato Strigoi hizo un rugido… y 3 necrófagos aparecieron por la retaguardia del lanzapiedroz, hambrientos de carne verde. La doncella marchó acercándose al bosque, a ver si alcanzaba a alguna unidad, y los nigromantes salieron de la unidad de zombies en busca de sitios más seguros, por si esta vez la fase de magia no conseguía detener a Grimgor. El general Strigoi, por su parte, aprovechó su movimiento para volar hacia el flanco de mi ejército esperando que el resto de su ejército se reuniera con él más adelante.

En la fase de magia, tal como me esperaba, Jordi lanzó Neheks para invocar zombies redirectores delante de Grimgor. Logré dispersar el primer intento, pero no el segundo, y una unidad de 10 zombies se materializó ahí delante. Intentó lanzar la mirada de Nagash a dos dados pero falló.

En la fase de disparo, la doncella gritó a los jabalíes trabados, matando a uno de ellos.

En combate, los Vargheists acabaron con dos jabalíes más, pero los dos que quedaban consiguieron matar al murciélago vampiro que quedaba. Junto con la superioridad numérica y el estandarte, conseguí empatar su ataque por la retaguardia. Era una victoria moral temporal… pero no duraría. En el lejano combate del rincón derecho, el varghulf, pese a tener F5 y odio eterno, solo consiguió herir a un arquero, que fallaron al devolver, pero gracias a la superioridad numérica y tener una fila, le causaron una herida por resolución. ¡Muahaha! ¿Quién dijo que eran inútiles?

En el flanco izquierdo, los jinetes de jabalí consiguieron hacer 4 bajas, y recibieron solo una herida a cambio. Los necrófagos restantes dieron media vuelta, y fueron perseguidos y arrasados. ¡No es bueno confiar en los vivos! Por otra parte, los Horrores de la cripta le causaron 4 heridas al gigante. Era su momento de contraatacar: un golpetazo con el garrote que haría 2d6 heridas directas al campeón de los horrores… pero este superó el chequeo de iniciativa que tenía que hacer sacando un 1. ¡No es bueno confiar en los no-verdes! Gracias a la tozudez y L10 no huyó… pero no pintaba que fuera a aguantar un turno más.

Turno 3 Orco

Superando otra vez todos los chequeos de animosidad, Grimgor siguió con su campaña de “segar zombies” cargando a la recién levantada unidad. En el flanco derecho los jabalíes dieron media vuelta para volver a dar guerra, y el carro se acercó, buscando hacer una carga conjunta contra la unidad de horrores de la cripta el siguiente turno. En el centro, los orcos y grandotes estaban a la expectativa: no podían ir hacia nada con su limitado movimiento, así que se mantuvieron quietecitos (lo que fue un error, tendría que haber movido los orcos hacia atrás tangentes a la de grandotez, que estaban cubiertos por el bosque, para evitar darles el flanco a los vargheists). El chamán, discretamente, abandonó a la unidad de orcos por si las moscas. Me di cuenta del fallo que había cometido dejando el carro de la derecha delante del bosque (bien), pero sin prever que los jabalíes podrían quedarse estancados y podrían necesitar cobertura (muy mal) así que el carro se encontraba junto a los vargheists, pudiendo oírlos, sentirlos… pero sin línea de visión hacia ellos. ¡Qué fallo!¡Qué bien habría venido una carga por la retaguardia a los Varghulfs ahora mismo! Estaba tan feliz de que la carga de jabalíes del turno anterior hubiera llegado, que ni se me pasó por la cabeza que se pudieran embarrar. No lo hagáis en casa: siempre preved que pasará si algo no sale según lo previsto.

El karro y los jabalíes se preparan para cargar a los horrores de la cripta

En la fase de magia, sin muchas ilusiones lancé mis proyectiles contra sus nigromantes, que se habían alejado de la unidad de zombies: el explotacerebros con 3 dados fue dispersado sin problemas con 3 dados a su vez, pero al lanzar la mirada de Morko con un dado a uno de sus nigromantes saqué un 6. Jordi lanzó sus dos dados, sacando un 1 y un 2, así que el hechizo entró… y reventó al nigromante. ¡Bien bien! Eso estaba mucho mejor.

En la fase de disparo… era mi última oportunidad. Los necrófagos cargarían al pobre lanzapiedroz en el turno siguiente, pero la unidad de zombies no se había movido, así que lancé el pedrusco a la misma distancia que el turno anterior… y esta vez hizo blanco. ¡Pumm! En medio. 11 zombies menos. Ya había conseguido hacer más que Grimgor XD

Llegados al combate, el gigante le dio un cabezazo al campeón de los horrores dejándolo mediotonto, pero sus compañeros acabaron con él sin problemas. El gigante cayó muerto hacia atrás, sin darle a nada.  En el centro, Grimgor y sus machotez destrozaron a los zombies recién levantados de nuevo… pero se quedaron quietecitos otra vez, para no arrasar y dar el flanco. Ya empezaba a estar harto de esto. Por su parte, en el lado derecho, los vargheists acabaron con los jabalíes sin problemas, pero el varghulf, pese a causar dos heridas a los arqueros, perdió el combate por el músico, recibiendo una segunda herida.

Turno 3 Strigoi

Haciendo un balance de daños, las cosas no iban demasiado bien para los no-muertos: el flanco izquierdo resistía aún gracias a los horrores de la cripta, que habían hecho un buen papel contra el gigante pero estaban ahora solos, y a punto de ser cargados por dos unidades de jabalíes muy enfadados. En el centro, Grimgor estaba cada vez más cerca, y solo era cuestión de tiempo que su héroe strigoi fuera alcanzado ahora que un mago había volado. Las cosas no iban bien para el varghulf, estancado dos rondas ante unos míseros arqueros, y sí, los vargheists habían conseguido derrotar a los jabalíes, pero ahora no les quedaba otra que enfrentarse a peñas orcas con filas y superioridad….No pintaba bien… pero las cosas iban a cambiar muy pronto ¡Los Strigoi salían de caza!

Parecía que todo iba genial...

Los 3 necrófagos que habían acudido a la batalla cargaron contra la dotación del lanzapiedroz, que falló el chequeo de miedo. En el centro, los vargheists aprovecharon mi error de dejar a la vista la unidad de orcos para cargarles por el flanco, mientras el general Strigoi hacía lo propio por el frente. Los orcos fallaron el miedo. Aparte de eso, no quedaba mucho movimiento por hacer. El nigromante se cubrió del chamán con el bosque para evitar tener el mismo destino que su compañero, y pasamos a la temida fase de magia.

Esta vez, al tener solo una posibilidad de lanzar Nehek para levantar zombies delante de Grimgor, pude dispersar el hechizo sin problemas. No obstante, el nigromante no había acabado aquí, y lanzó la Maldición de los años contra la unidad de Orkos Negros con 3 dados, sacando un 11. A mí me quedaban solo 2 dados (y sospechaba que debía tener algún portahechizos: los Condes siempre llevan portahechizos) y se me olvidó que tenía resistencia a la magia. Como no quería que se me fuera la unidad ahora que por fin tenía su objetivo a tiro, gasté el segundo pergamino pensando: ¡ahora sí! Ahora sí que Grimgor va a partir al héroe Strigoi…

Pero el destino tenía una mala pasada que gastar: la doncella lanzó el grito contra la unidad de L9 de Grimgor… sacando un 11 en 2d6, que equivalía a 4 bajas… y fallé el chequeo de pánico. Parece que Grimgor se había cansado de que le aparecieran muertos por todas partes y le gritaran al oído, y puso pies en polvorosa. ¡Maldito!

Pero eso no fue todo. En la fase de combate, el varghulf por fin hizo huir a los arqueros orcos, al causarles 3 heridas, (y que estos no tenían el punto por filas ya), los persiguió y atrapó. Los necrófagos, como era de esperar, consiguieron matar a todos los goblins de la dotación del lanzapiedroz, y el espabilagoblins asustado no consiguió hacer nada a cambio. Huyó automáticamente por ser superado en número y fue alcanzado y descuartizado. Para acabar, la ingente cantidad de heridas que hicieron los vargheists y el general strigoi (creo que 8 entre los dos) superaron con creces mis puntos estáticos, e incluso con la repetición de tirada del portaestandarte de batalla huyeron, y fueron alcanzados por los vargheists, que no salieron del campo de batalla por los pelos, y que aprovecharon a capturar su estandarte. El vampiro Strigoi decidió no perseguir para no salir del campo de batalla, al ver que no había unidades que lo tuvieran en su línea de visión y pudieran cargarle. Jordi había conseguido darle la vuelta a la partida en un (nefasto) turno. Ahora en casa caí que al tener odio, el Strigoi tendría que haber perseguido también. No nos fijamos en su momento. Cosas del directo

...pero no era tan genial XD (además, Grimgor está huyendo, huehue)

Turno 4 Orco

Las cosas habían cambiado en un momento: Grimgor huyendo, mis dos unidades de disparo eliminadas, y una de las unidades totalmente muerta en un solo turno. Glupss… No obstante, tenía aún un As en la manga: el general vampiro había quedado solo, y mi unidad de Orkos Grandotes con héroe no podía cargarle aún… Pero tenía su estandarte, con el hechizo la Mano de Gorko. Si se despistaba, podía encararme en la fase de movimiento y cargarle en la de magia, destruyendo su vil general en un solo golpe. ¿Funcionaría?

Pero antes, había mucho por hacer. En el flanco izquierdo declaré carga con el carro y los jinetes de jabalí… ¡Y los muy ineptos fallaron el chequeo de miedo! Dejando al pobre carro solo ante esos monstruos devoradores de carne. En aquel momento lo vi claro: ese acto de cobardía y la des-sincronización subsiguiente acababa de hacerme perder el flanco izquierdo. En el centro, por suerte, Grimgor consiguió reagruparse, y se encararon hacia la unidad de zombies con Strigoi otra vez. El otro carro orco se le acercó por el flanco, buscando hacer una carga combinada si Jordi volvía a fallar en su fase de magia. Para acabar, el chamán orco vio que los 3 necrófagos lo miraban con caras hambrientas, y se escondió detrás del tótem orco, con la intención de hacerse un “Benny Hill” si hacía falta.

En la fase de magia, lancé el Explotacerebros con 3 dados a la doncella espectral, sacando un 14 en la tirada. Jordi decidió gastar sus 4 dados de dispersión y sacó un 12. ¡Pumm! La Doncella se volatilizó. Y ya no le quedaban dados. Era el momento: activé el portahechizos de la Mano de Gorko para cargar a su solitario general Strigoi… y lanzó su pergamino de dispersión. Grrrr. Había matado al nigromante que no los llevaba. Fue bonito mientras duró, pero Jordi lo tenía calculado. Fallé la Mirada de Morko a un dado… ya había tenido suerte el turno anterior.

En el único combate que hubo, el carro no consiguió hacer más que una herida a los Horrores (un 2 en los impactos por carga), y estos lo dejaron hecho un cristo. Encima, huyó muy poquito con sus 8d6 y los horrores le atraparon, quedándose muy cerca de los acojonados jinetes jabalíes. Malditos ineptos montados en puerco. Se merecían lo peor.

Turno 4 Strigoi

Las cosas habían mejorado mucho para los Strigoi, que no dudaron en aprovechar su ventaja: los Horrores cargaron contra los jabalíes, y decidí huir con ellos, para que al menos tuviera que pasar unos cuantos turnos persiguiéndolos si quería destrozarlos (y para que no me capturara el estandarte).

El vargheist y el general Strigoi cargaron a los orcos Grandotez, que decidieron aguantar. Confiaba en que con los bonificadores estáticos, más alguna herida del héroe o campeón podría aguantar la embestida… pero fallaron el miedo e irían a 6s… no pintaba bien. En cuanto al resto de movimientos, el varghulf voló detrás de los vargheists en apoyo de estos, mientras los necrófagos convocados, a falta de un objetivo mejor empezaban a rodear el tótem orco, a ver si cazaban al chamán.

En la fase de magia, como el general Strigoi estaba ahora cerca de Grimgor, Jordi pudo volver a lanzar 2 Neheks a 3 dados para levantar zombies delante de Grimgor. Con mis 5 de dispersión dependía de una baja tirada en alguno de los intentos, que no se produjo: dispersé el primero y me entró el segundo. Los zombies volvían a estar ahí.

En la fase de combate cometí otro error: se me olvidó que había fallado el chequeo de miedo e iba a 6s, y activé el estandarte del Beztia de Nogg (que me podría haber ido mucho mejor en futuros turnos). Los vargheists y el general en conjunto me hicieron un destrozo: 8 bajas, y por culpa del miedo no conseguí darle a nada. Yo tenía 3 filas, superioridad y estandarte… pero seguía perdiendo de 3. Fallé el chequeo de desmoralización a seises… pero gracias al porta de batalla pude repetirlo y superarlo la segunda vez. ¡Fiuuu!

Turno 5 Orcos

Las cosas pintaban muy mal… Grimgor seguía atascado, sin poder avanzar más allá de los zombies invocados (aunque poco a poco iba haciendo puntos… las cosas como son), el flanco izquierdo estaba perdido por la incompetencia de mi caballería, y en el derecho la unidad de grandotes iba a ser descuartizada en esta ronda de combate si no hacía algo. ¡Pero seguía teniendo un as en la manga, en forma de estandarte mágico!

Cargué con Grimgor a los zombies recién levantados, para seguir con la rutina habitual… pero este se me rebeló, fallando el chequeo de miedo: ya estaba harto de tanta morralla, y no iba a hacerme caso. El carro que me quedaba, en cambio, sí consiguió cargar a los zombies por el flanco. No era una buena carga: superioridad, estandarte, 3 filas… necesitaba hacer muchas bajas para ganar el combate, pero a estas alturas iba perdiendo, y tenía que arriesgarme.

Los jinetes de jabalí se reagruparon (aunque iban a morir de todos modos el turno siguiente) y el chamán orco siguió haciendo el Benny Hill con los necrófagos, con la particularidad de que, al girar hacia la izquierda, dejó de tener el bosque entero tapando al nigromante que quedaba… y sonrió maliciosamente.

En la fase de magia lancé el Explotacerebros al nigromante, pero  Jordi me lo dispersó con tres de sus cuatro dados. Ahora era el momento de jugar la última carta: en una lista de ejército normal, tiene poco sentido tener portaestandarte en una unidad que también contenga al portaestandarte de batalla, ya que no se pueden aplicar ambos estandartes a la vez. Pero en esta lista, cada estandarte tiene un portahechizos, así que mi unidad de grandotez iba cargada de ellos. Ya había gastado el de la Mano de Morko, donde Jordi gastó su pergamino para no ser cargado… pero me quedaba el ¡A por ellos! Que me permitiría atacar primero y repetir las tiradas para impactar. Justo lo que necesitaba este turno. Recé para que el nigromante “vivo” no tuviera un segundo pergamino… y por la cara de horror de Jordi vi que no. El objeto portahechizos tiene nivel 4, +1 si está liderado por un jefe orco negro (SI), +1 si la unidad tiene más de 15 miniaturas (ya no, me quedaban 12 tras la carnicería del turno anterior), y +1 si está trabado en combate. Así que necesitaba un 6 para dispersarlo, y no tuvo tanta suerte.

¿Habría cambiado mucho si Jordi hubiera dejado morir a su nigromante para evitar mi portahechizos y asegurarse la muerte de los Grandotez? Viéndolo en perspectiva desde casa, me quedaba un solo turno más, así que Grimgor ya no podía alcanzar al vampiro Strigoi y no era necesaria una poderosa fase de magia invocazombies por su parte… y en cuanto a la dispersión, no teniendo yo ya más portahechizos, tampoco era muy importante disponer del dado extra de dispersión de ese mago. Pero, eran 150 puntos que me regalaba, y el no tener la posibilidad de, por ejemplo, regenerar heridas para que yo no ganara tantos puntos al final de la partida por unidades a la mitad. Por otra parte, atacar primero y repetir para impactar da miedo… pero los Strigoi iban muy sobrados en cuando a daño, y yo había perdido dos de mis filas ya, y tuve una suerte extrema en los ataques. Sacrificar un mago por un “y si” tiene que ser una decisión muy meditada, y podría haber pasado que el a por ellos no hubiera servido de nada con peores tiradas. Cuando te lanza un proyectil mágico a tu nigromante un orco que ya no tiene más hechizos… el instinto te pide dispersarlo. Si me hubiera pasado a la inversa creo que habría hecho lo mismo.

En la fase de combate, el carro (muajaja, me dejo el otro combate para el final) consiguió hacer solo 3 impactos (otra vez un maldito 2+1 de las ruedas) y heridas a los zombies por impactos, los jabalíes hirieron a uno más, pero los orcos con lanzas no estaban por la labor. 4 heridas y ataque por el flanco, frente a superioridad numérica, estandarte y 3 filas era un empate… que ganó por el músico. Al dar miedo los zombies, el carro huyó automáticamente.

Y en el combate grande…los orcos iban primero y repetían para impactar, huee. Dado que quería eliminar el máximo de ataques posibles, y sospechando que el general iba dopado de “cosas strigoi que dan aguante”  los grandotez y el porta de batalla se dedicaron a darle muy duro a los vargheists, causándoles nada menos que  7 heridas. A cambio, el vargheist superviviente y el Strigoi causaron 6 bajas. Una fila, superioridad y estandarte me daba la victoria por 4. Ahí cometimos un error, que fue repartir las 4 bajas por resolución entre los vargheists (las 2 que les quedaban) y 2 al general Strigoi. Realmente, como el Strigoi no puede ir en unidades voladoras y tiene que ir solo, se hubiera comido las 4 heridas él solo también, dado que las bajas por resolución se aplican a cada unidad por separado. Habría muerto, y su ejército habría empezado a caerse a pedazos.  Era el punto débil del general volador: o ganas o mueres. Jordi tendría que andarse con ojo en el torneo.

Pocos orcos quedan ya, pero han conseguido darle una buena somanta e palos a esos muerciélagos :D

No obstante, no caímos en ello y repartimos las heridas… y el general quedó con una sola herida, dispuesto a dar guerra costara lo que costara. ¡Las apuestas estaban más emocionantes que nunca!

Turno 5 Strigoi

Aquello había sido un gran revés para los Strigoi, que tenían una victoria asegurada, y ahora parecía que se le podía escapar de las manos. El varghulf cargó a los pocos grandotez que quedaban para ayudar a su amo, aunque esta vez estos superaron el chequeo de miedo. Los necrófagos, cansados de rodear el tótem a la caza del chamán, cargaron a Grimgor por el flanco: una táctica inteligente. Dado que solo 2 orcos negros podrían atacar, si al menos un necrófago vivía y huía, Grimgor tendría que perseguir, distanciándose de la unidad de zombies recién creada. Dado que esta valía 60 puntos y los necrófagos 24 (si los alcanzaba y no se reagrupaban)… podía rascar puntos. Además, alejaría a Grimgor hacia el cuadrante sur para que no consiguiera bloquear la dominación norte de los vampiros, consiguiendo 100 puntos extra. Hay cosas que parecen un detalle o una tontería, pero que si paras a calcularlo pueden significar 130 puntos de diferencia. ¡Nada mal!

En la fase de magia, Jordi intentó curar las heridas a su general. Dispersé el intento del nigromante, pero solo me quedaban 2 dados para dispersar los 3 que iba a lanzar con el Strigoi para curarse a si mismo… ¡Y disfuncionó! En ese momento crucial, con una sola herida, el general disfuncionó, y sacó uno de los peores resultados que podía obtener, un 5: quedarse atontado. No podría atacar, y sería impactado automáticamente en cuerpo a cuerpo. Muajaja. El jefe orco vio la oportunidad, y retó al vampiro a un duelo, que como no iba en una unidad no pudo rechazar (¿Valiente el orco negro, eh? A pisar al pobre vampiro indefenso en el suelo XD). El vampiro no atacó, y el orco le dio 3 mamporrazos que impactaron automáticamente e hirieron los tres. El strigoi, no obstante, tenía regeneración… y con mucha tensión tiramos los dados. Al ser un duelo, no era suficiente con regenerar la herida que había sufrido para morir, sino que tenía que tirarse por las 3: la primera herida regeneró, la segunda también… pero la tercera falló, y el general murió en el fango de aquel bosque.

A pesar de ello, el varghulf hizo una carnicería con mis orcos, matando a 4 de los 5 que quedaban, y dado que ahora los grandotez eran superados en potencia, huyeron y fueron alcanzados. El varghulf retuvo el estandarte de la unidad… por poco tiempo.

En el otro combate, los necrófagos no consiguieron herir a los orcos negros, pero estos tampoco consiguieron devolver ninguna herida. Les hicieron huir 8d6, por la regla de Grimgor, pero aun así este estaba tan cabreado que saqué un montón de 6es y los atrapé igualmente.

Al final de la fase de combate, dado que el general había muerto, Jordi tuvo que tirar para ver si sus unidades caían. Sacó muchos 1os, salvando a los zombies, pero el varghulf se desintegró, abandonando el estandarte que había logrado capturar.

Turno 6 Orcos y Strigoi

Pues no quedaba mucha cosa por hacer… ambos ejércitos estaban reducidos a casi nada, había habido una buena matanza por ambos lados, y, aparte de reagrupar el carro, y lanzar mis proyectiles mágicos (el explotacerebros fue dispersado y no logré lanzar la mirada de Morko) no tenía nada más por hacer.

Y Jordi, tras hacer las tiradas para ver que les pasaba a sus no muertos, sin ninguna pérdida grave, intentó curar la unidad de zombies, que estaba 1 por debajo de la mitad, para rascar puntos, pero se lo dispersé.

Menuda escabechina por todos lados

Resultado

La partida había estado decantándose hacia uno y otro lado de manera muy emocionante todos los turnos. Acudieron espectadores a ver cómo nos machacábamos el uno al otro… y resultaba difícil decir quien había ganado, ya que no nos quedaba casi nada a ninguno. A mí: Grimgor y su unidad de Orcos Negros, un carro, y el chamán. A Jordi: El héroe Strigoi en su desgastada unidad de zombies, un nigromante, y los Horrores de la Cripta, más un cuadrante.

Sumando puntos al final se vio que, dado que la unidad de Grimgor valía muchos puntos y seguía en pie, mis orcos habían conseguido matar algunos puntos más que sus Strigoi (y al general), los suficientes para conseguir una victoria marginal en el último momento.

Los orcos habían conseguido atravesar el Bosque Oscuro, aunque a un duro precio, y necesitarían asaltar una nueva fortaleza orca para reclutar un nuevo Waaagh. El neonato Strigoi lanzó gritos de venganza por la muerte de su maestro mientras se retiraba a su cubil, con los Horrores de la Cripta arrastrando al pobre nigromante superviviente… alguien debía ser culpado de la derrota.

Los supervivientes

Conclusión

La partida pendió de un hilo hasta los últimos turnos, y fue solo realmente gracias al objeto portahechizos del portaestandarte de batalla que se decantó hacia un lado. Si Jordi hubiera dejado morir a su nigromante, y dispersado ese hechizo, los vargheists y el general hubieran ganado la batalla, arrasado la unidad, y la victoria hubiera sido suya (aunque si yo me hubiera guardado el Estandarte del Bestia de Nogg para ese turno, sin miedo, quizás podría haber aguantado un poco más…Nunca lo sabremos).

Jordi jugó muy bien su ejército, mucho mejor que yo creo, al saber entretener a Grimgor toda la partida en ese cuello de botella con la invocación de zombies que no supe gestionar bien. Además, tampoco supe cómo defenderme y posicionarme ante esas unidades voladoras, y tendría que haber usado los elementos de escenografía para cubrirme y no dejarle decidir donde cargarme.  Además, mi despliegue, pensado más para evitar ser rodeado “a la defensiva” que agresivo para enfrentarme a su infantería, no fue óptimo, dedicando muy pocos recursos al flanco izquierdo.

Para lanzar balones fuera, el ejército de Machotez, consistente en bloques de infantería rígidos y estáticos, no funciona muy bien contra ejércitos de mucha movilidad que pueden empantanarte, decidir donde cargar, conseguir puntos, y retirarse, haciendo que mis unidades más poderosas estuvieran perdiendo el tiempo la mayor parte de la partida. Junto con el Liderazgo orco, que es para darles de collejas en cuanto vuelvan a casa.

No todo fue malo. También hay que saber valorar las cosas buenas: el uso de la magia con solo un chamán fue clave en esta partida gracias al uso de los portahechizos en los estandartes en el momento preciso: yo tenía solo 4 dados de magia, pudiendo usar como mucho 3 de ellos en un hechizo. La parte buena: que al ser su ejército de élite, y un cañón de papel, era muy vulnerable a los proyectiles mágicos y podía amenazarle con ello, obligándole a decidir como gastar sus dados de dispersión y colando estandartes o miradas de morko a un dado.

Bueno. Esto es todo por hoy. Espero que no se os haya hecho muy pesado el informe de batalla, y si os gusta, intentaré hacer más :D