Buenas jugadores de juegos de azar (no he dicho ludópatas, no lo he dicho). Otra semana, y otra dosis de la I Liga Novata de Blood Bowl y por fin esperaba que alguien no me mandase a la enfermería. En la cuarta ronda jugaba contra los skaven de Peto, y aunque daba por hecho que lo iba a pasar mal, pensaba que solo sería por temas de movilidad...
Cuarta jornada
En la cuarta jornada me tocaba jugar contra Peto, que iba encabezando la liga empatado con Abraham, con el que había empatado en el partido anterior. Teniendo en cuenta la diferencia de nivel de experiencia entre ambos jugadores, que mi equipo iba menos desarrollado, y que la movilidad de los skavens penaliza muy rápido cualquier error del rival, veía el partido muy cuesta arriba, y solo pretendía salir del partido con el equipo en mejores condiciones de lo que entraba.
Peto tenía a su lanzador lesionado ese partido, por lo que jugaba con tres corredores de alcantarilla (uno con agilidad 5 y otro con echarse a un lado), rata ogro, dos blitzers y cinco líneas. Sabía que tenía que intentar evitar a la rata ogro, y machacar a algunos de sus jugadores para obtener superioridad numérica y abrirme huecos, ya que solo moviendo el balón no iba a pillarle en un renuncio.
Empezamos por empatar en fan factor, lo que suponía que ninguno de los dos nos llevaríamos las 10.000 monedas adicionales al final del partido (buuuh), y Peto ganó la tirada para elegir quién empezaba. Me advirtió de que los dados le suelen tratar bien, y vaya si tenía razón...
Eligió recibir, yo dispuse mi línea para que los tortazos se los llevaran los jugadores más prescindibles y para no dejar huecos para que se colara. Pero daba igual. De manera sorprendente, en el turno 1 de cuatro placajes, me sacó un jugador inconsciente y otro aturdido. ¿No era yo el que iba a pegarle a él? Eso sí, se jugaba placajes a un dado sin mucho miedo, y el cuarto le salió mal, por lo que acabó el turno sin coger la pelota. Yo intenté recomponer la línea, y empecé a malgastar mis segundas oportunidades con un A por Ellos tonto. No saqué nada del otro mundo, pero lo más loco es que en su segundo turno, además de colarse y abrirme en canal la defensa, me dejó inconsciente otro jugador. Turno 2 contra skavens, 9 jugadores contra 11...
A partir de aquí la cosa se fue bastante de madre, Peto usó el turno 3 para posicionarse, y en el turno 4 el corredor de alcantarilla de AG5 salió por patas, se cruzó medio campo, se la dió a otro corredor y puso el marcador 1-0 a su favor. Un TD académico.
Era consciente de que pararle para mí era muy difícil, pero esperaba que a él le costara quitarme la pelota. Uno de sus jugadores tenía patada así que puso la pelota con bastante precisión en una banda. Yo me llevé a un jugador para proteger el balón si fallaba cogiéndolo, y mandé a mi número 11 a por él. El número 11 era el mercenario contratado la tercera jornada, que tenía 5 puntos de experiencia, y con un pase me subía. Pues falló cogiendo el balón. Opté por no gastar mi última segunda oportunidad, y sellé mi derrota. El balón se salió por el lado izquierdo del campo. Entró y se salió por mi fondo. Volvió a entrar y se fue a la otra banda. Yo con mi equipo en la línea o en lado izquierdo, y la pelota fuera de mi alcance. Peto, obviamente, usó su turno 5 para acercar jugadores y fijar a los míos, y en el turno 6 cogió la pelota y marcó de nuevo.
En el resto de la parte, lo único notable es que logré coger el balón del suelo (usando la segunda oportunidad) y hacerme un pase, con lo cual ese jugador pillaría habilidad al final del encuentro. Pero 2-0 para los skavens al descanso. Creo recordar que Plaga (mi guerrero número 2) mandó a la enfermería un skaven, no sé si al final de la primera parte o al principio de la segunda.
No os vayáis a creer que la segunda parte fue muy distinta. Esta vez pude coger el balón, lo llevé al lado izquierdo, e intenté mantener la línea a base de derribar a sus jugadores. Peto de manera muy astuta, puso en contacto con mi corredor tres jugadores (corredor de alcantarillas, línea y rata ogro), de manera que yo solo podía derribar a uno, y quizás a otro si el tío con balón penetraba. Le di bastantes vueltas, y opté por la jugada de mayor recompensa. Me posicioné para tener apoyos y penetré con el tío del balón hacia la rata ogro, ya que si la derribaba luego no me hacía falta esquivar, tenía un buen pasillo, y me quedaba algún jugador por mover para protegerme. Era mi oportunidad. A dos dados...y sale que me voy al suelo. Gasto mi segunda oportunidad...y al suelo o empujar. Vale, empujo. Pero entonces si le sigo, me quedo a rango de su cola prensil o su placaje. Opto por quedarme donde estoy, ya que solo hay corredor de alcantarillas y línea...
Pues nada, Peto se abre camino para acercar un apoyo, y a un dado sin habilidades me derriba. Y por supuesto, sus ágiles corredores de alcantarilla esquivan 17 veces y se hacen con la pelota. Hago lo que puedo por quitársela, pero sigo fallando miserablemente todo lo que intento: A por Ellos, placajes, pases, esquivar, recepciones, coger el balón del suelo...turno 12, 3-0, en este caso penetraba para derribarle, y fallé el A por Ellos final.
No sé si antes del 3-0 o después, pero para más inri, me lesiona a uno de mis dos hombres bestias con placar. Saca un 51 (lesión permanente, +1 a ser herido las siguientes veces y no juega el próximo partido), uso el médico por primera vez...y sale un 54 (-1 a la armadura). Me quedo con el 51, lloro amargamente, y continuamos.
Por el camino, entre tortazo y TD, consigo otra heridita en mi haber, menos da una piedra. Pero es igual, me sigue saliendo mal todo, ya que esta vez me monto una caja, salgo hacia la izquierda cuando me la abre, me intento cubrir, y me vuelve a levantar la pelota a un dado sin habilidades. La pelota cae entre dos jugadores míos. Da igual, llega el corredor de agilidad 5, se mete esquivando, la coge, se sale esquivando e incluso hace un pase. Peto se pone casi fuera de mi alcance. Lo único que llega es una cabra que para ello necesitaba esquivar 3 veces y hacer dos A por Ellos. No importa, porque mi turno no duró tanto, ya que en una de las patadas iniciales nos habían dado un soborno a cada uno, y pisando a una rata saqué doble en la armadura, usé el soborno, y volví a sacar doble en la herida. Sin mandarla fuera del campo claro. Turno 16, 4-0.
Madre del amor hermoso que paliza. Está claro que Peto jugó (y juega) mucho mejor que yo. El resultado es justo y refleja claramente el partido. Hice lo que pude, e intenté de todo, pero mientras que a él le salía las cosas más inverosímiles, a mí ni lo fácil ni lo difícil. Cuando os digo que fallé todo lo fallable, creedme, lo fallé. E incluso me iba con una lesión durilla del partido...
Del final del partido, Peto se sacó 60.000 monedas y le subieron tres jugadores, y yo tuve suerte y me saqué 50.000 (algo es algo) y me subió el tío del pase. Por supuesto el MVP le cayó a uno de los pocos jugadores con 0 puntos de experiencia. Obvio. La cabra que ganó habilidad se podía llevar placar como siempre, pero ya quedaba poca liga, mis opciones eran nulas, y creo que esta liga es para aprender, así que aunque fuera tarde, intenté hacerme un jugador que lleve el balón. Dudaba entre Manos Seguras (repite el dado para coger el balón el suelo, y anula la habilidad que te quita el balón aunque no te derriben) o Brazos Adicionales (+1 a coger el balón del suelo, interceptar y atrapar). Lo discutí largo y tendido con Álvaro, e incluso busqué en internet, porque la mutación en principio me gusta más (tienes un poco menos de probabilidad de coger el balón del suelo, pero hace alguna cosita más), pero me he ido por lo fiable, que es Manos Seguras, y a ver qué tal.
Mi próximo partido sería contra Javi, otra vez con Orcos, pero su plantilla estaba más desarrollada que la de Rafa...
La clasificación seguía parecida, ya que Rafa había ganado 1-0 a Fran (Orcos vs Norses), Javi 2-0 a Iñaki (Orcos vs No muertos) y Abraham 1-0 por los pelos a Aecio (Enanos vs Halflings). Me tocaba intentar acabar la temporada en la mitad superior supongo.
En la cuarta jornada me tocaba jugar contra Peto, que iba encabezando la liga empatado con Abraham, con el que había empatado en el partido anterior. Teniendo en cuenta la diferencia de nivel de experiencia entre ambos jugadores, que mi equipo iba menos desarrollado, y que la movilidad de los skavens penaliza muy rápido cualquier error del rival, veía el partido muy cuesta arriba, y solo pretendía salir del partido con el equipo en mejores condiciones de lo que entraba.
Peto tenía a su lanzador lesionado ese partido, por lo que jugaba con tres corredores de alcantarilla (uno con agilidad 5 y otro con echarse a un lado), rata ogro, dos blitzers y cinco líneas. Sabía que tenía que intentar evitar a la rata ogro, y machacar a algunos de sus jugadores para obtener superioridad numérica y abrirme huecos, ya que solo moviendo el balón no iba a pillarle en un renuncio.
Empezamos por empatar en fan factor, lo que suponía que ninguno de los dos nos llevaríamos las 10.000 monedas adicionales al final del partido (buuuh), y Peto ganó la tirada para elegir quién empezaba. Me advirtió de que los dados le suelen tratar bien, y vaya si tenía razón...
Eligió recibir, yo dispuse mi línea para que los tortazos se los llevaran los jugadores más prescindibles y para no dejar huecos para que se colara. Pero daba igual. De manera sorprendente, en el turno 1 de cuatro placajes, me sacó un jugador inconsciente y otro aturdido. ¿No era yo el que iba a pegarle a él? Eso sí, se jugaba placajes a un dado sin mucho miedo, y el cuarto le salió mal, por lo que acabó el turno sin coger la pelota. Yo intenté recomponer la línea, y empecé a malgastar mis segundas oportunidades con un A por Ellos tonto. No saqué nada del otro mundo, pero lo más loco es que en su segundo turno, además de colarse y abrirme en canal la defensa, me dejó inconsciente otro jugador. Turno 2 contra skavens, 9 jugadores contra 11...
A partir de aquí la cosa se fue bastante de madre, Peto usó el turno 3 para posicionarse, y en el turno 4 el corredor de alcantarilla de AG5 salió por patas, se cruzó medio campo, se la dió a otro corredor y puso el marcador 1-0 a su favor. Un TD académico.
Era consciente de que pararle para mí era muy difícil, pero esperaba que a él le costara quitarme la pelota. Uno de sus jugadores tenía patada así que puso la pelota con bastante precisión en una banda. Yo me llevé a un jugador para proteger el balón si fallaba cogiéndolo, y mandé a mi número 11 a por él. El número 11 era el mercenario contratado la tercera jornada, que tenía 5 puntos de experiencia, y con un pase me subía. Pues falló cogiendo el balón. Opté por no gastar mi última segunda oportunidad, y sellé mi derrota. El balón se salió por el lado izquierdo del campo. Entró y se salió por mi fondo. Volvió a entrar y se fue a la otra banda. Yo con mi equipo en la línea o en lado izquierdo, y la pelota fuera de mi alcance. Peto, obviamente, usó su turno 5 para acercar jugadores y fijar a los míos, y en el turno 6 cogió la pelota y marcó de nuevo.
En el resto de la parte, lo único notable es que logré coger el balón del suelo (usando la segunda oportunidad) y hacerme un pase, con lo cual ese jugador pillaría habilidad al final del encuentro. Pero 2-0 para los skavens al descanso. Creo recordar que Plaga (mi guerrero número 2) mandó a la enfermería un skaven, no sé si al final de la primera parte o al principio de la segunda.
No os vayáis a creer que la segunda parte fue muy distinta. Esta vez pude coger el balón, lo llevé al lado izquierdo, e intenté mantener la línea a base de derribar a sus jugadores. Peto de manera muy astuta, puso en contacto con mi corredor tres jugadores (corredor de alcantarillas, línea y rata ogro), de manera que yo solo podía derribar a uno, y quizás a otro si el tío con balón penetraba. Le di bastantes vueltas, y opté por la jugada de mayor recompensa. Me posicioné para tener apoyos y penetré con el tío del balón hacia la rata ogro, ya que si la derribaba luego no me hacía falta esquivar, tenía un buen pasillo, y me quedaba algún jugador por mover para protegerme. Era mi oportunidad. A dos dados...y sale que me voy al suelo. Gasto mi segunda oportunidad...y al suelo o empujar. Vale, empujo. Pero entonces si le sigo, me quedo a rango de su cola prensil o su placaje. Opto por quedarme donde estoy, ya que solo hay corredor de alcantarillas y línea...
Pues nada, Peto se abre camino para acercar un apoyo, y a un dado sin habilidades me derriba. Y por supuesto, sus ágiles corredores de alcantarilla esquivan 17 veces y se hacen con la pelota. Hago lo que puedo por quitársela, pero sigo fallando miserablemente todo lo que intento: A por Ellos, placajes, pases, esquivar, recepciones, coger el balón del suelo...turno 12, 3-0, en este caso penetraba para derribarle, y fallé el A por Ellos final.
No sé si antes del 3-0 o después, pero para más inri, me lesiona a uno de mis dos hombres bestias con placar. Saca un 51 (lesión permanente, +1 a ser herido las siguientes veces y no juega el próximo partido), uso el médico por primera vez...y sale un 54 (-1 a la armadura). Me quedo con el 51, lloro amargamente, y continuamos.
Por el camino, entre tortazo y TD, consigo otra heridita en mi haber, menos da una piedra. Pero es igual, me sigue saliendo mal todo, ya que esta vez me monto una caja, salgo hacia la izquierda cuando me la abre, me intento cubrir, y me vuelve a levantar la pelota a un dado sin habilidades. La pelota cae entre dos jugadores míos. Da igual, llega el corredor de agilidad 5, se mete esquivando, la coge, se sale esquivando e incluso hace un pase. Peto se pone casi fuera de mi alcance. Lo único que llega es una cabra que para ello necesitaba esquivar 3 veces y hacer dos A por Ellos. No importa, porque mi turno no duró tanto, ya que en una de las patadas iniciales nos habían dado un soborno a cada uno, y pisando a una rata saqué doble en la armadura, usé el soborno, y volví a sacar doble en la herida. Sin mandarla fuera del campo claro. Turno 16, 4-0.
Madre del amor hermoso que paliza. Está claro que Peto jugó (y juega) mucho mejor que yo. El resultado es justo y refleja claramente el partido. Hice lo que pude, e intenté de todo, pero mientras que a él le salía las cosas más inverosímiles, a mí ni lo fácil ni lo difícil. Cuando os digo que fallé todo lo fallable, creedme, lo fallé. E incluso me iba con una lesión durilla del partido...
Del final del partido, Peto se sacó 60.000 monedas y le subieron tres jugadores, y yo tuve suerte y me saqué 50.000 (algo es algo) y me subió el tío del pase. Por supuesto el MVP le cayó a uno de los pocos jugadores con 0 puntos de experiencia. Obvio. La cabra que ganó habilidad se podía llevar placar como siempre, pero ya quedaba poca liga, mis opciones eran nulas, y creo que esta liga es para aprender, así que aunque fuera tarde, intenté hacerme un jugador que lleve el balón. Dudaba entre Manos Seguras (repite el dado para coger el balón el suelo, y anula la habilidad que te quita el balón aunque no te derriben) o Brazos Adicionales (+1 a coger el balón del suelo, interceptar y atrapar). Lo discutí largo y tendido con Álvaro, e incluso busqué en internet, porque la mutación en principio me gusta más (tienes un poco menos de probabilidad de coger el balón del suelo, pero hace alguna cosita más), pero me he ido por lo fiable, que es Manos Seguras, y a ver qué tal.
Mi próximo partido sería contra Javi, otra vez con Orcos, pero su plantilla estaba más desarrollada que la de Rafa...
La clasificación seguía parecida, ya que Rafa había ganado 1-0 a Fran (Orcos vs Norses), Javi 2-0 a Iñaki (Orcos vs No muertos) y Abraham 1-0 por los pelos a Aecio (Enanos vs Halflings). Me tocaba intentar acabar la temporada en la mitad superior supongo.
Jejejeje, forma parte del ritual de iniciación que un skaven (o elfo) experimentado te meta una tunda. Es el cambio de niño a hombre en bloodbowl
ResponderEliminarNo sé yo si he madurado algo en el proceso, cada vez me pasan cosas más raras y lloro más. Maldito juego de mierda...me encanta.
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