[TUTORIAL/ESCENOGRAFÍA] Creando montañas (y colinas)

Buenos días manitas. Aquí estamos un día más intentando que las mesas de juego cobren vida, y para eso vamos a contar con la ayuda de Javielasur, que ante un proyecto importante se ha liado con la escenografía, y al final le he podido engañar para que nos haga un tutorial de esta parte: las montañas.

Muy buenas a todos:

Agradecer a Cordo y demás la oportunidad de compartir con vosotros mi experiencia haciendo un elemento de escenografía para poder ambientar mejor las mesas de juego.

Comentar en primer lugar que el tema de la escenografía pienso que es una de las grandes olvidadas en las mesas, y quizás sea que ya tenemos bastante faena con pintar miniaturas como para empezar con otros elementos, pero creo que la experiencia de juego no tiene color, y sobre todo, es algo que siempre vas a poder jugar y disfrutar por tanto, amén que su coste es infinitamente más bajo que cualquier unidad o personaje que vayamos a poner (y además, te dura durante toda la partida en el campo de batalla, las unidades, normalmente no duran tanto). Otro factor por el que merece la pena dedicar tiempo a la escenografía, es que los niños pequeños pueden ayudar en su elaboración. Yo tengo dos niñas de 5 años y en la preparación de este elemento han podido ayudarme en algunas cosas, y es una forma de ir metiéndolas en el vicio.

Bueno, pues vamos a ello.

El elemento que os traigo es cómo hacer una montaña. No es un elemento muy común y tutoriales hay cientos por internet, pero os contaré mi experiencia, primando la economía (debe salir mucho más barato que si lo compras en tienda) y un buen resultado final.

Lo primero que tienes que tener claro es qué quieres hacer, me refiero a tamaño, altura, forma, uso que le vas a dar en el campo de batalla...

En mi caso en concreto, quise que la montaña tuviera una parte que fuera transitable como si fuera una parte de colina, siendo el resto del elemento impasable. Además, mi montaña es de Ulthuan, donde la vida rebosa por doquier, por tanto, no tendría mucho sentido la típica montaña gris “pelada”, los colores predominantes deberán ser por tanto el ocre y el verde.

Lo primero que usé fue una plancha de porexpan blanco (lo que también se llama “corcho blanco”) de 40x30 cm y 2cm de grosor. Lo partí por la mitad exacta y pegué ambas mitades, de forma que te queda un elemento de 20x30x4cm. Ya con esto podrías tener una colina la mar de bonita cortando un poco los bordes para suavizar la pendiente.

Pero aquí hemos venido a hablar de nuestra montaña, así que seguimos.

Muchos vídeos siguen pegando más planchas y las van tallando para dar la forma deseada, pero tenía en casa un trozo de malla metálica y con ella la puse encima dando la forma que tendrá la montaña. La unión entre la malla y la plancha la hice con la pistola de silicona.

Para hacer las paredes rocosas usé espuma de poliuretano, usando como negativo cortezas de árboles (corcho y pino en mi caso, que lo tengo fácil de conseguir pues tengo a 20 minutos de casa un bosque y con esto del coronavirus hemos cogido la sana costumbre de ir al bosque todos los fines de semana). El proceso es sencillo: coloca las cortezas sobre una bandeja, frótalas con un cepillo mojado en lavavajillas mezclado con algo de agua y asegúrate de empaparlas bien, que veas espuma por todos lados. Esto es para evitar que la espuma de poliuretano se pegue. Proyecta la espuma sobre las cortezas y con unos guantes puestos (y mojados en lavavajillas) aplasta ligeramente para asegurar que la torta que has expandido coja bien la forma de las cortezas.

Una vez hecho esto, espera unos 5-6 minutos a que coja algo de dureza y con muchísimo cuidado ve retirando la plancha de la corteza y la colocas sobre la malla (dejando el lado que estaba en contacto con la corteza mirando hacia fuera de la montaña). El proceso lo repetí varias veces hasta conseguir cubrir completamente la montaña.

Ojo y repito, para retirar la espuma ponte guantes y mójatelos con lavavajillas para que no se te quede pegada la torta que has hecho con la espuma. El lavavajillas es la clave para trabajar la espuma de poliuretano.

También puedes tirar directamente sobre la malla la espuma, pero no controlas igual la cantidad y al final quedan bultos por todos lados que no son nada naturales. Este proceso de las cortezas es sencillo, limpio y super efectivo. He visto vídeos usando papel de cocina mojado en cola diluida con agua para recubrir la malla, pero se ensucia más y creo que es más lento que el método de la espuma. Aparte, la dureza y textura que coge la espuma no es equiparable.

Un truco también para ahorrar tiempo del siguiente paso es aprovechar para espolvorear arena por encima de la torta de espuma mientras todavía está fresca para que así se quede ya pegada la arena y dar más textura al conjunto. No lo hagas por todos lados, piensa en las zonas que naturalmente tendría más vegetación, que básicamente serían las zonas más horizontales y las grandes cavidades, y debe haber más arena cuanto más abajo estemos, en la parte alta de la montaña debe haber menos arena pues es más escarpado. En mi caso no lo hice porque se me levantaron las niñas y ya tuve que recoger el puesto, pero en mi intención original estaba usar esta idea XD.

Una vez la espuma está seca (en una hora está más que seco y endurecido), y si no lo has hecho antes, mezcla cola blanca con agua a partes iguales y con un pincel dale a las partes que llevarán principalmente la vegetación de la montaña. Espolvorea arena sobre esas zonas.

Lo siguiente sería empezar a pintar. En mi caso le di una primera capa de pintura con un gris oscuro (proporción 1:1 blanco y negro) bastante aguada para más que nada dar profundidad a las zonas más profundas y a los huecos y recovecos de la montaña que ha quedado por las rugosidades de la forma de las cortezas.

Una vez seca esta primera capa, con un spray de color ocre le di una capa muy leve por encima, y algo más intensa en la parte baja. En las zonas donde espolvoreé la arena le di unos ligeros toques de verde también en spray. Si te pasas no pasa nada, lo corriges con ocre y listo.

En mi caso, aparte, y como no conseguí la suficiente definición de algunas cavidades, hice un lavado con marrón para darle más profundidad al conjunto en las grietas más profundas de las paredes.

Lo siguiente sería poner la decoración de césped y matojos para dar mayor vida al conjunto.

En mi caso combiné el césped ferroviario de toda la vida con trocitos de musgo pintado. Del césped poco os contaré, pero el musgo lo que hice fue coger un puñado (si no lo encontráis de forma natural, se puede conseguir musgo para belenes), le di un poco de pintado superficial con el spray verde para unificar un poco y luego lo mojé en cola blanca (en este caso, pura para dar más consistencia). Usé este musgo para colocarlo al azar por la montaña para representar matorrales.

No quise poner árboles porque en el conjunto me parecía que la escala de tamaños no era la adecuada, y con los matorrales quedaba bien.

Y eso es todo, sólo me queda deciros el coste de todo.

Para hacer esto compré o tenía (pongo sus precios aproximados en muchos casos):

• Plancha de porexpan blanco: 2 euros

• Malla metálica: 1 euro

• Espuma de poliuretano: 3,50 euros

• Spray ocre y verde (tiendas todo a 100): 3 euros

• Cola, pintura, césped, arena, silicona: ¿1,50 euros?

  TOTAL: 11 euros

Con estos 11 euros me pude hacer dos montañas más o menos de un tamaño 30-35cm de largo, 20-25cm de ancho y unos 25cm de altura (la segunda montaña la hice sin la parte de colina, fue directamente usando como base un par de trozos de panel de madera que iba a tirar sobre el que pegué la malla metálica y el resto ya todo igual). Por tanto, cada montaña me salió por un coste de 5,50 euros cada una. Se que no es correcto este cálculo pues el spray por ejemplo no se gasta ni de cerca pero bueno, pongo el bote entero y listo.

Y ahora sí, me despido. Si se os ocurre alguna sugerencia me decís, pues mi intención es mejorar mi técnica en la escenografía, que nunca le he prestado atención y la verdad que es muy agradecida si se le dedica también algo de tiempo.

Muchas gracias por llegar hasta aquí, espero no haberte aburrido.

Un saludo

Javi