Buenos días escaladores en acto o en potencia. Estoy seguro que el mes pasado echasteis de menos en la escalada de los lectores a nuestros queridos Barones de Pretto, pero tenían una buena excusa, así que sin que sirva de precedente se lo vamos a perdonar.
Buen día a todos, legendarios de todas las razas y etnias a un lado y otro del mar.
Es una
alegría para nosotros, los barones, reencontrarnos con todos después de dos
meses. Compartimos con vosotros una gran nueva: el nacimiento de un joven
baroncito, heredero de nuestro título ficticio y futuro esgrimidor de pinceles.
Ojalá dentro de muchos años pueda compartir él sus propias escaladas. Es para
nosotros un motivo de inmensa alegría. Sin embargo, no todo el monte es
orégano: además de nuestro déficit de sueño —que gracias a nuestras oraciones a
la Gran Cornuda parece ir mejorando tras su primer mes de vida— también ha
habido dramáticas consecuencias para nuestro plan de escalada, peores que las
previstas en enero. En todo caso, aún no hemos llegado al ecuador de este año.
Queda tiempo de sobra y habrá ocasión de ponerse al día para evitar que Cordo
invoque el pie de Morko sobre nuestras cabezas.
Para comenzar
esta entrada queríamos exponer aquí otro de los responsables del descalabro de
abril y mayo con nuestra escalada:
Nota de Cordo: Esa cantidad de huesitos lleva su tiempo...
¡Nadie nos avisó
que desmontar, volver a pegar y reimprimar el triste plástico del pasado podía
consumir tanto tiempo! En efecto, cometimos un error de primero de escalada: no
contar en el plan anual con las sesiones consagradas al cutter, al superglue y
al spray. El lado positivo: cinco jinetes, seis carros de guerra, veinte
arqueros y unos veinticinco guerreros de hueso de los Reyes Funerarios han
resucitado —nunca mejor dicho— de nuestro fondo de armario y están listos para
su bautismo de color. Además, tras no pocos quebraderos de cabeza por fin hemos
definido las ideas clave de su esquema cromático. Que tiemble la marea gris:
La idea es pintar los huesos para darle una apariencia algo podrida. Incluso puede que experimentemos para darles más podredumbre. Las calaveras fueron lavadas con tinta color fucsia para que parezca que albergan algún tipo de fuego maligno. Este va a ser un color clave en nuestro esquema. Es la evolución de las ideas que os presentamos en nuestra escalada de enero.
Nota de Cordo: Francamente, las pruebas previas no me terminaban de convencer, pero viendo el pintado en conjunto, creo que ese toque mágico queda muy bien. ¡Mis dieses!
Los escudos alternan una —en nuestra opinión— exótica combinacion de morados y turquesas con fondos blancos, y esperamos introducir algún granate ocasional. Los metales son dorados pero muy deslustrados y las lanzas verde oscuro, y tanto estas como los escudos están surcados por vetas y grietas. A fin de cuentas, llevan siglos enterrados bajo las arenas de Khemri. Por último, otro rasgo atrevido es el color de las peanas. Aun nos falta trabajar un poco para iluminar la arena con más detalle, pero la idea es huir del típico desierto de arena amarillenta e imaginarnos un yermo cuya tierra está empapada en sangre, la cual también salpica escudos, tarsos y metatarsos. Bien podría pertenecer también al Reino del Caos. Un poco siniestro, ¡pero esto es Warhammer!
Quizá no son los colores más clásicos de los Reyes Funerarios —aunque hemos llegado a probar cosas más bizarras, como huesos morados e intersticios y agujeros con un lavado amarillo brillante… no funcionó—. En cualquier caso, una de nuestras ideas es que estos esqueletos puedan trasladarse a una horda de Condes Vampiros sin desentonar mucho. Creo que el objetivo está bastante logrado.
El próximo mes iremos ampliando la hueste.
Por otro lado,
hemos seguido cultivando nuestra devoción a la Rata Cornuda. Dos señores de las
bestias han sido pintados con un esquema bastante clásico.
¿Qué señor de las
bestias que se precie no desaría tener una buena manada de ratas ogro? Con
estos tres nuevos ejemplares ya podríamos desplegar una manada de diez.
Para completar
estos dos meses se han sumado a los roedores un mosquete jezzail impreso en
casa con un nivel de detalle que deja por los suelos a los modelos
tradicionales, y un escurridizo portador de incensario que escapó de su unidad
presentada en nuestra escalada de enero:
Esto es todo. Esperemos que en junio volvamos a retomar velocidad de crucero. Inicialmente nuestro plan de escalada incluía respetar el reposo estival de agosto, pero vistos los desajustes vamos a tratar de cargar con todos los bártulos durante nuestro periplo entre Madrid, Albacete y La Coruña. A fin de cuentas, tras el sacrificio de horas de sueño por el recién nacido ha llegado el momento de hacer notar los cuatro meses de baja por paternidad/maternidad para disfrutar de un verano como no los recordamos desde que fuimos estudiantes.
Cordiales saludos
a toda la comunidad.
Barón y Baronesa de Pretto
¡¡¡Enhorabuena por el niño!!! Me alegro por vosotros y si habéis tardado tan sólo un mes en poder coger los pinceles es porque seguro que es un santo. Muchas felicidades y a disfrutar del bebé.
ResponderEliminarY por cierto, geniales esos esqueletos, debo reconocer que han quedado extraordinarios.
Muchas gracias, Javi. Pero los santos son sus abuelos. ¿Qué sería de nosotros sin ellos? Abrazos
EliminarMuchas felicidades, pero ¿cómo lo diría? La parte difícil no es ahora. Es cuando (glups) empiezan a caminar...
ResponderEliminarBien mirado, es como con los esqueletos.
Gracis, Haiger. Sí, nos consta. Compraremos correas y alambradas para la temida fecha de la bipedestación.
EliminarUn saludo
Enhorabuena por la nueva miniatura que habéis adquirido, Barones!
ResponderEliminarDisfrutadlo mucho y enseñadle desde peque que los muñecos de papá y mamá no son para jugar!
Muchas felicidades!
¿Cómo que los muñecos no son para jugar? Ya verás cuando le demos tu devorador de almas a tu sobrina si es para jugar o no...:P
EliminarAlgo me dice que nuestra colección va a sufrir importantes bajas en los meses venideros... por suerte, tenemos algún sigmarine de los coleccionables de Salvat que podrá hacer de chivo expiatorio, o mejor, de sacrificio para aplacar a los dioses.
EliminarEnhorabuena por el pequeño gnoblar!
ResponderEliminarLos esqueletos de Khemri están muy chulos, me gustan mucho esos escudos exóticos y la idea de peanas y fuego en las calaveras los cohesiona muy bien.
Gracias, Cneus. A ver cómo evoluciona la idea de ejército. Os mantendremos informados :)
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