Bueno, para cuando leáis estoy probablemente esté medio muerto, muerto entero o como mínimo de resaca warhammera. Por suerte nuestros colaboradores me cubren, y hoy lo hará Enric con las aventuras gnoblars por el torneo "solo pielesverdes 2" de Kekolandia. Primera ronda, gnoblars contra verdes, a por ellos, que no son pocos pero sí cobardes.
¡Muy buenas de nuevo!
Continuamos con el segundo (de cuatro) informes de… la Horda Gnoblar, que saqué
a estrenar en el torneo temático de pielesverdes de Kekolandia. A continuación,
la primera partida.
Los torneos pielesverdes
molan un montón por su ambiente divertido, relajado, y filosofía de los
jugadores (hasta hay “bonus” para elegir recompensas por ser el jugador que más
fanáticos en contra se ha comido, por animosidades XD).
En este torneo, en el que
Víctor (de St.Cugat, que tenemos dos Víctors pielesverdes XD) le tomó el relevo
a Emili para organizarlo, tuvimos una sorpresa matutina al pagar la tasa: un
pack de setas para rellenar peanas, y una plantilla plastificada de gigante
caído, ¡que muy pocos tenemos! Olé. Así se empieza bien el día. Además, en un
sobre nos vino la hoja de torneo para apuntar resultados, y… una misión secreta
para el primer escenario, que sería diferente -personalizada- para cada
jugador. Debíamos abrir el sobre una vez desplegado el ejército… Esto de la un
plus y un misterio a la partida que mola un montón.
Nota de Cordo: Me mola fuertemente lo del objetivo secreto.
En la primera ronda me
enfrenté a Pablo, que llevaba un ejército temático de goblins nocturnos. Hicimos
coña de que… parecía un ejército de élite, ya que llevaba “solo” unas 140
miniaturas, jaja, compactadas en 9 unidades. Por mi parte, llevaba 163
miniaturas (contando el tirasobras como una), pero separadas en 14. Seguramente
la primera vez que un goblin nocturno debe luchar en inferioridad numérica XD
Si no recuerdo mal,
llevaba un gran chamán goblin nocturno de nivel 3, a Odgit (nivel 2, ignora la
primera disfunción, y lleva las setas sombreroloco), un chamán g.noct de nivel
1, un gran jefe en garrapato, y un gran jefe (su general) a pie.
En cuanto a hechizos,
afortunadamente no le salió ni el pie ni el Gorko camina con noz… El gran
chamán obtuvo el ¡Morko Zálvanoz! Y el ¡Gorko Protégenoz! Del Gran Waagh
(repetir 1d3 tiradas, y repetir armadura… para mí, el hechizo menos útil del
saber), y el Explotacerebros del pequeño Waaagh (Desconozco por qué eligió un
hechizo del pequeño Waaagh… y, de hecho, mirándolo aquí en casa, no tengo claro
que se pueda hacer. De todos modos, me parece tan bueno el gran Waagh que no
renunciaría a sus hechizos ni loco). Odgit obtuvo otro Explotacerebros, y los
Puñoz de Gorko (que en mi ejército podía causar estragos si se acercaba una
unidad de “gnoblars de élite”). Y el chamán pequeño se quedó con la Mirada de
Morko.
Nota de Cordo: Los chamanes pielesverdes de nivel 3 o 4, antes de generar hechizos pueden elegir cuantos hechizos generarán en cada saber (mezclando). En todo caso, merece la pena generar todo en el Gran Whaaagh, ya que aunque sean del Gran Whaaagh se cambian por el identificativo del Pequeño Whaaagh...y más vale maximizar que te salgan el Morko Zálvanoz o uno de los Pies.
Por mi parte, los
Gnoblars no tienen magia, pero aproveché ese momento de la partida para tirar
las 1d6 repeticiones… me pareció temáticamente correcto, como si los gnoblars
jugaran a hacer magia como sus hermanos mayores XD … y, tacháaan. 6
repeticiones. Genial. Empezaba bien el torneo 😊
Eligió su lado de la
mesa, en el que había una gran colina central (lo cual no se si era bueno o
malo para mí, ya que sus goblins podrían disparar en dos filas… pero a cambio
yo podría disparar con todas las mías), y ahí en el centro colocó casi todo su
ejército: 3 grandes bloques de 30 goblins nocturnos, y delante, dos bloques de
20 arqueros goblins nocturnos. Los flancos quedaron más poco protegidos. En el
izquierdo, un garrapato despachurrador junto a una manada de garrapatos
saltarines con el jefe en garrapato metido dentro, y en el derecho, el infame
escupegarrapatos, y más en un rincón y alejado de todo, el Ídolo de Gorko (para
que no cargara a sus propias tropas).
Nota de Cordo: Igual me equivoco, pero que yo sepa no se pueden disparar más filas por disparar a una colina, solo a un objetivo grande.
Por mi parte, pude poner
la suficiente morralla sobre la mesa como para ver su despliegue, y reaccionar
a ello (acostumbrado a ogros o druchiis que he jugado últimamente, se me hace
raro tener tanto que desplegar XD).
En el flanco izquierdo tenía claro que tenía que asegurarme poder cargar yo al despachurrador con alguna unidad “altamente insignificante”, antes de que me hiciera un cristo. Por desgracia, había colocado la morralla en el centro y no pensé en guardarme una para esto. Fallo matutino… pero tenía una baza: los tramperos gnoblar, que podría colocar al final para ello. Había poco espacio en este flanco, ya que había un pedrusco impasable por el medio, así que elegí dos unidades que pudieran funcionar por sí solas lejos del general: el Jinete de Rinobuey, que ocupaba poco, y tenía suficientemente movimiento como para cargar él a los saltarines (aunque no aprovechara su Terror…), y a los gnoblars de la suerte, que al poder repetir todo, podían funcionar decentemente aunque fueran cargados. Además, con el Kolmillo ogro tenían un turno de inmunidad a psicología, para ignorar miedos, pánicos, etc. Finalmente, detrás de aquella montañota, apretujé a los tramperos gnoblar, que serían los indicados para ir a tocarle las narices al despachurrador
En el centro, hice una
primera fila de gnoblars sacrificables, con “la élite” detrás (rinobueyes, Gnobo, muerdehombres y Krujemadrez), dispuestos a ir lo más rápido posible
hacia los goblins nocturnos, sacar fanáticos con las unidades prescindibles, y
cargar “con lo gordo” una vez los fanáticos hubieran hecho “lo suyo”. Los yethis
los metí en el bosque, ya que mi frente iba muy lleno y estos tienen cruzar. En
el flanco derecho dejé solo “porquería”. Con F2 no podía hacer nada frente al
Ídolo, así que la idea sería avanzar a saco a por el escupegarrapatos… a ver si
se distraía y disparaba a estas unidades, y redirigir y empantanar al Ídolo
mientras el resto del ejército hacía lo suyo.
Y… una vez desplegado, la
misión. La partida, que no lo he dicho, era una batalla campal normal, pero con
esta pequeña sorpresa. En mi caso la misión era “Altamente insignificantes…
menos Johny”… Debía designar ocultamente a un jefecillo gnoblar que estuviera
metido dentro de una unidad. Si el jefecillo, y la mitad de la unidad
sobrevivían, ganaría 100 puntos de victoria (es el gnoblar favorito de Gnobo y
no quiere que muera). Por su parte, no recuerdo el nombre del objetivo… pero
era algo así como “matar a Johny”. Si conseguía matar al jefecillo, ganaría 100
puntos de victoria. Para ayudarle a descubrir quien era, uno de sus chamanes
obtendría un hechizo, a 5+, que, si entraba, me obligaría a desvelar quien era
Johny.
Por mi parte, elegí al
jefecillo porta de batalla, que llevaba loz Dadoz de Grubbi (cuando sufre la
primera herida, tira 1d6, con un 1 muere, pero con 2+ ignora esa herida y todo
el resto que fuera a sufrir esa fase), así que tendría bastantes números de
seguir con vida.
TURNO 1 GNOBLAR
Gané la tirada para
empezar, y viendo la magia, disparo y fanáticos que había, tenía que avanzar lo
máximo posible antes de que empezara el jaleo. Empecé el turno mal, sacando un
1 en animosidad en Zuertudoz (que repitieron y se salvaron, fiuu), y en las dos
unidades de guerreros gnoblars. Pensándolo a posteriori, tenía 6 repeticiones y
debería haber gastado una en los gnoblars de la izquierda, que me obstruyeron
el paso a los rinobueyes… pero quise ser avaricioso y guardármelos para más
adelante…
Básicamente avancé con los
honderos y los caballeros gnoblar al máximo, ya que, como se había quedado un
poco atrás, aún no podría lanzarme fanáticos ni cosas de esas, mientras el
resto avanzaba de manera más prudencial, para guardar distancias. Intenté
maniobrar con el tirasobras para rodear a los gnoblars animosos, pero no me dio
el movimiento como para subir a la colina…. Tendría que haberlo dejado en el
hueco entre Krujemadrez y gnoblars, grr…
En el flanco izquierdo,
los tramperos se desplazaron hacia un lado, para estar preparados a cargar al
despachurrador si este avanzaba demasiado con sus 8d6.
Sin fase de magia ni de
disparo, había sido un turno rápido…y ahora vendrían las represalias.
TURNO 1 NOCTURNO
En su turno, empezó a
darse cuenta de un problema que no había tenido en cuenta: si metes tus
chamanes en unidades… pueden quedarse animosos. Eso fue lo que le pasó al
bloque de la derecha con Odgit dentro, dándome un respiro en la fase de magia.
Avanzó un poco con todo,
colocando los arqueros de la derecha en la colina, pero a distancia prudencial,
mientras el Ídolo avanzaba todo lo rápido que podía. En el flanco izquierdo,
sacó tiradas moderadas, así que aún estaría lejos como para efectuar una carga…
En fase de magia, dejé
pasar las 1d3 repeticiones y la salvación especial en los goblins arqueros de
delante (podía haber usado La roca lila… pero no quise arriesgarme a herir ya
al jefecillo), y dispersé la Mirada de Morko del chamán de nivel 1 -¿O me lanzó
el hechizo para desvelar jefecillos? Lo intentó un par de veces, pero o bien
falló con los dados o logré dispersarlo-. Al estar el Gran Chamán oculto, y el
otro animoseando, me salvé de los proyectiles gordos.
En fase de disparo, el
Escupegarrapatos lanzó 3 dados, pero no llegó a poder disparar… afortunadamente
para mí, estaba aún haciendo la digestión. Los arqueros de la izquierda
dispararon a mis honderos, causando una baja. “Ooh, ha muerto el primero. Te
quedan aún 163 minis XD poco a poco”. En
cambio, los arqueros de la colina tuvieron mejor suerte, aún yendo a seises
para impactar (por moverse, y por estar a largas) consiguieron herir a 5
honderos de la segunda unidad, que fallaron el pánico y dieron media vuelta.
Grrrr, aquellos gnoblars no debían morir así… antes tenían que sacar fanáticos ☹
TURNO 2 GNOBLAR
Esta vez fallé animosidad
con los muerdehombres, y decidí no repetir la tirada tampoco, para que fueran a
la par con sus colegas gnoblars que habían fallado el turno anterior. De todos
modos, no tenía demasiada prisa por llegar al otro lado, hasta que los
fanáticos hubieran hecho de las suyas.
En el flanco izquierdo,
los tramperos recularon, a esperar que los garrapatos se acercaran y ser yo
quien tuviera la carga. Como el jinete de rinobuey es objetivo grande, seguía
teniendo línea de visión. Aquí no lo pensé mucho, pero yo tenía bastantes
puntos hipotecados entre los suertudos y el rinobuey. Pablo podría directamente
haber dado media vuelta con los garrapatos y haber ido mareándome media partida…
pero afortunadamente no cayó en ello.
En el centro, los
honderos de la izquierda marcharon e hicieron salir los primeros fanáticos. Los
arqueros no llevaban ninguno, así que la primera unidad en hacerlos salir fue
la del Gran Chamán que estaba detrás en el bloque de la izquierda. De los dos
que llevaba, lanzó uno a través de sus arqueros, que sacó un buen resultado y
los dañó a estos, causando un par de bajas, y a mis honderos, matando a 5, y
haciendo que fallaran el pánico (lo cual no me importó, su función ya estaba
hecha). El otro fanático lo lanzó hacia el descampado central, a ver si causaba
estragos más adelante… pero pinchó vilmente, ese fanático no quería salir… sacó
un 9 o algo así, y el fanático se quedó peligrosamente cerca de sus unidades.
Muajaja.
Con el resto del
ejército, avancé un poco más, aún prudente (aunque me empantané un poco con las
unidades, menos con los gnoblars de la derecha, que marcharon directos a por
Odgit, a hacerle saltar sus peligrosos fanáticos).
Viendo que el Ídolo se acercaba,
posicioné a la caballería gnoblar para obligarle a cargar encarándose a
villaporculo, y alejarlo de la batalla unos turnos más.
En fase de disparo me fue
algo mejor: el tirasobras acertó de lleno en el bloque derecho nocturno, que,
aunque se dispersó 5cm hacia atrás, consiguió matar a 4 de ellos… poco a poco.
TURNO 2 NOCTURNO
El turno empezó muy bien
para mí, ya que la unidad del Gran Chamán falló su animosidad, así que me
libraría de una buena en fase de magia. El Ídolo de Gorko tuvo que cargar a los
caballeros gnoblar, que huyeron. Del mismo modo, los arqueros de la izquierda
cargaron a los honderos que ya estaban huyendo, haciéndolos huir hacia mis
tropas, para impedirme mover bien el turno siguiente. Bien jugado. Y entonces
llegó la fase de movimiento obligatorio:
En el flanco izquierdo,
el garrapato despachurrador avanzó un montón, y se quedó delante de los
tramperos, genial. Por su parte, los saltarines intentaron cargar a los
gnoblars del lado izquierdo, pero necesitaba una muy buena tirada para
alcanzarlos, y no le salió. Otra razón para hacerlo, es que no quería acercarse
demasiado al Jinete de Rinobuey, y eso sí que le salió mejor… la distancia a la
que quedaron era de “carga dudosa”…
Tendría que pensar si arriesgarme o no.
Por parte de los
fanáticos… cuentan que Gnobo en persona había envenenado las reservas de setas
con “veneno de bumerang” (aunque los observadores históricos dicen que fue
simplemente mala suerte), pero ambos fanáticos decidieron dar media vuelta. Uno
de ellos atravesó a la unidad de goblins central con el general-matando a dos
goblins-, y el otro dio media vuelta también, colocándose en medio de los
bloques goblins.
En su fase de magia,
tenía pocas opciones al tener al Gran Chamán Animoso: dispersé su mirada de
Morko con mis dados, y el Explotacerebroz de Odgit con la Roca Lila, aunque
tuve que gastar una de las repeticiones de dado.
En disparo no le fue
mejor, el escupegarrapatos, que ya iba a 4 dados… se volvió a quedar a las
puertas de poder disparar, mientras que con los arqueros intentó empezar a
desgastar a los muerdehombres, matando a dos de ellos, pero la unidad de la
colina no logró causar ninguna baja.
Y… venía mi momento de
empezar las tortas.
TURNO 3 GNOBLAR
Empecé el turno superando
animosidades, y comiéndome el Diente de ogro con éxito, así que no tendría que
preocuparme por miedos indeseados.
Decidí ir a por todas en
el flanco izquierdo: los tramperos cargaron al despachurrador (donde murieron
todos), y el Jinete de Rinobuey a los saltarines, donde iba más justo de
distancia, pero llegó decentemente. Los gnoblars suertudos avanzaron, para
apoyar al Rinobuey en los turnos siguientes si hacía falta.
En el flanco derecho, los
caballeros gnoblar siguieron huyendo (pero el turno siguiente tenía pensado
usar el Cuerno del rinobuey, así que tendría más números de reagruparlos), y
los guerreros gnoblar marcharon hacia Odgit para hacer saltar los fanáticos. De
los dos que llevaba, lanzó uno de ellos a por los gnoblars, matando a 7 de
ellos (Odgit lleva las setas sombreroloco), y obligándoles a huir, y el otro lo
lanzó hacia el centro (a por los Krujemadrez y yetis). A mi gusto, los dejó
demasiado cerca de sus propias unidades… pero es lo que había, con esa
animosidad del primer turno.
Aprovecho para lanzar la
duda: ¿Una unidad que huye de un fanático, hacia donde va? Si huye de quien le
ha provocado la baja -el fanático- esto lo enviaría “hacia las líneas enemigas”
intentando evitar unidades. Es lo que hicimos, porque considerar que huía de la
unidad goblin, y volver a atravesar al fanático no nos pareció correcto.
Nota de Cordo: Huye del punto donde el fanático ha colisionado con la unidad (no por donde sale) y no se come otra vez impactos al huir, se considera que la huida se produce durante el movimiento del fanático de atravesar y todavía no está "detrás de la unidad".
En el centro, ambas
unidades de honderos se reagruparon, con el L7 de Gnobo… En el caso de la de la
izquierda, me fastidió un poco, ya que me crearon un cuello de botella que no
me dejó avanzar gnoblars ni rinobueyes. No obstante, con lo que había tendría
que bastar: los Muerdehombres marcharon hasta ponerse a distancia de carga de
los arqueros nocturnos de la izquierda, y los yethis y Krujemadrez de los de la
derecha. Dudé con los yethis… como aquel fanático acabara girándose, les podía
hacer pupilla… pero tampoco podía dejar a los Krujemadrez solos, que algún
turno iba a superar las animosidades y el disparo del escupegarrapatos, y ese
turno lo pasaría mal…
En fase de disparo, ahí
si… Kabooom. Una gran masa de espadas, herraduras, bolas de plomo, gnoblars
despistados y restos varios aterrizó de lleno en la unidad de nocturnos del
centro… matando a 7 de ellos. Ya solo quedaban 21… Por desgracia, superó el
chequeo de pánico a 6s, grrr….
Y en fase de combate, el
Jinete de Rinobuey pinchó. Había causado una sola baja con sus impactos por
carga. El ogro falló todo al impactar, y el Rinobuey, aunque logró que entraran
3 ataques… sacó dos 1s al herir… así tuve que gastarme dos repeticiones… y volví
a sacar otro 1, causando solo dos bajas más. Había causado 3 en total… así que
los saltarines no responderían… pero el jefe de encima sí. El gran jefe no hizo
nada, pero el bicho de abajo si que logró hacerme una herida. Como tenía él la
superioridad, gané solo por uno (suerte de las repeticiones… sino el turno que
viene tenía él más iniciativa, y aquellos porrocientos ataques de F5 no son
nada amistosos)… Con el pobre liderazgo 6 Nocturno, ganar de 1 es más que
suficiente. Huyeron, y los atrapé, acercándome a la unidad del Gran Chamán.
¡Por los pelos!
TURNO 3 NOCTURNO
Pim, pam, pum… los
fanáticos volvieron a liársela al pobre Pablo, causando dos bajas en la unidad
de nocturnos central. Lo curioso, es que de los que había, más o menos se
intercambiaron la posición, como si estuvieran danzando en medio de su ejército
XD Mira que hay partidas en las que te lo dan todo… y otras que no sabes en que
bando están. Suerte que esta vez fuera de las segundas, jejeje.
Su movimiento no tuvo
mucha miga: la unidad del Gran Chamán se reposicionó para dar el frente al
Jinete de Rinobuey amenazador, los goblins se reajustaron un poco, y el Ídolo
se encaró para acercarse al combate. El escupegarrapatos superó la tirada para
no ir a cazar gnoblars.
En la fase de magia, yo
iba un poco aterrado… era la primera vez que sus tres chamanes estaban
operativos. Por suerte, Odgit disfuncionó con el primer Explotacerebros (pero
se salvó de una probable muerte gracias a su habilidad especial), así que pude
dispersar el segundo con la Roca Lila, aunque no logré dispersar las 1d3
repeticiones (depende de los dados hubiera intentado repetir alguno… pero saqué
bajas tiradas en ambos, así que lo dejé pasar… a sabiendas de que aquel
escupegarrapatos iría ya a 5 dados, y me iría muy bien que explotara).
Pero no, no lo hizo, no
explotó, sino que disparó, con 5 dados, a los Krujemadrez… y al volver a lanzar
los 5d6… Pum. Un 26. 26 impactos con 5 dados. La madre…y sin gastar
repeticiones… La mala suerte que había tenido hasta entonces se había compensado.
11 Orcos negros muertos ☹ De los 15,
quedaban 4. Buff… Aquel centro ya no
pintaba tan bien. Como tenían furia asesina, los 4 desgraciados sobrantes ni se
inmutaron.
TURNO 4 GNOBLAR
La unidad más cara, a la
porra. Empecé el turno haciendo sonar el cuerno para que mis gnoblars (y los
Krujemadrez) sumaran +2 al Liderazgo, y superando las “riñas” gnoblar.
Como tenía furia asesina,
tenía que cargar con los Krujemadrez a los arqueros, así que hice lo propio con
los yethis en primer lugar, aunque se comieron un fanático por el camino, para
no dejarlos solos, y también para evitar que aguantara y disparara a los
desgraciados orcos negros que quedaban. El fanático logró causar 3 heridas,
matando a un Yethi… así que me tocaba chequear pánico, pero por suerte lo
superé. Viendo lo rápido que podrían huirme, decidí acercar a Gnobo en medio
del meollo, que hasta el turno 5 tendría L9.
No fueron las únicas
cargas que hice, por supuesto. El Jinete de Rinobuey se lanzó a lo loco a por
los Nocturnos con su gran Chamán… en parte, porque si no lo hacía, no tendría
nada más que hacer. En combate era difícil que ganara con ese +5 estático, pero
si que podría empatar y entretener hasta que llegaran los gnoblars por el
flanco… pero ese era el plan B. El plan A, era obligarle a chequear terror con
L6… ¡Y sí!, aquellos advenedizos goblins dieron media vuelta y se largaron, atravesando
a uno de los fanáticos, muajaja. Con un poco de suerte, no volverían más, se
acabaría la fase de magia, y extenderían el pánico al resto de sus unidades.
(Spoiler: nope)
También cargué con los
muerdehombres a los arqueros, que causaron una baja con su aguantar y disparar…
pero que caerían y serían atrapados en la fase de combate. Con aquello, el
flanco izquierdo era mío.
En el flanco derecho… las
cosas no iban tan bien. El Ídolo de Morko se acercaba, y, aunque no podría
cargar el turno siguiente, sí que podría encontrar mi retaguardia en el 5º y
sexto… tenía que lograr distraerlo. Me planteé redireccionarlo con el
tirasobras… pero si colocaba a este en su trayectoria y huía, me iría directo
al bosque. Pero entonces… se me ocurrió una idea macabra. ¡Tenía al jefecillo
Yoda en el bosque! (El de la Roca Lila) El muy idiota le dijo a Gnobo: espera,
yo tengo poderes mágicos, me pondré delante de la roca e impediré que se mueva,
ya verás… y así lo hizo XDD hala, a pastorear, jaja.
Ah, y con el liderazgo
extra, logré reagrupar a los honderos del centro pero no a los gnoblars de la
derecha, que siguieron paseándose por delante del escupegarrapatos… ni a los
caballeros gnoblar, que a pesar de ir a 8s prefirieron largarse, grrr… la
unidad entera de 88 puntazos. ¡Aquello costaba lo mismo que dos unidades de
gnoblars enteras! (Coñas aparte, genial que las unidades sean tan baratas, ¡Que
gusto da!)
En fase de disparo, el
tirasobras volvió a dispersarse, pero de refilón logró causar dos bajas a la
unidad de Odgit (la única que no tenía riesgo de herir a mis propias tropas).
-Nota: con unos bloques tan grandes, debería haber causado grandes estragos con
el tirasobras, que va con la plantilla grande. No obstante, siempre dejo que mi
rival me diga cuantos impactos y parciales hay… y en este caso fue un poco
ranciete con los números 😉. Como
la partida me iba de cara, tampoco quise protestar).
Y en combate, pasó lo que
tenía que pasar: los muerdehombres destrozaron a los arqueros nocturnos,
persiguieron, los capturaron, y se quedaron muy cerca de los nocturnos del Gran
chamán, por si decidía reagruparse, y entre los yethis y krujemadrez… mataron a
11 arqueros ellos solitos (no está mal, de 16 ataques), los hicieron huir y los
atraparon. En la persecución, los yethis se trabaron con la unidad de nocturnos
del gran jefe de detrás, pero los Krujemadrez pasaron entre medias. Aquí yo
tenía ya la partida bastante ganada: los dos bloques de nocturnos que quedaban
tenían que chequear pánico, con L5 y L6… y si no, a correr, dejando la partida
solo con el bloque del Gran Chamán huyendo, el escupegarrapatos, y el Ídolo
siendo pastoreado. Peeero, nos vinieron de la mesa de al lado a preguntarnos
unas dudas de fanáticos, y al volver a la mesa nos olvidamos de los chequeos…
cosas del directo.
TURNO 4 NOCTURNO
En aquel momento de la
partida, ya quedaban pocas decisiones que tomar: el Gran Chamán y sus nocturnos
se reagruparon, Odgit se encaró hacia los Krujemadrez para freírlos a magia, y,
por supuesto, el Ídolo de Gorko cargó al jefecillo que estaba inútilmente
haciendo fuerza a ver si lo detenía con la mente… Éste, al ver que la mole se
le venía encima, prefirió largarse de la zona y volver al bosque. Los fanáticos decidieron que ya era hora de
disolverse, o de quedar ajenos a la partida sin hacer nada…
Ahí me di cuenta de un
fallo de mi plan para redireccionar Ídolos: este turno no contaría con la
piedra. Upps… y lo iba a pagar. Por suerte, Odgit falló su Explotacerebros,
pero el Gran Chamán no, y acabó con 8 muerdegnoblars, dejándome la unidad a 13
(11 y los dos jefecillos)… por suerte, esa ronda iban con L9 de Gnobo y
superaron el pánico.
En fase de disparo, el
escupegarrapatos tenía pocas ganas de hacer su trabajo, y volvió a acumular
dados.
Y en fase de combate… uno
de los yethis intentó matar al general, y el otro al chamán… pero ambos fallaron
tontamente con tiradas pésimas, y los hicieron huir…
TURNO 5, “6” GNOBLAR
¿Por qué turno vamos? Yo
ya hacía tiempo que me había descontado…teníamos un dado por ahí para marcar el
turno, pero hacía un tiempo que no lo tocábamos “Es el último ya, creo”. “¡Ah,
ok!” Dije… Haciendo ahora el recuento con las fotos en casa, nos faltaba un
turno entero aún por resolver, que mal…XD. En mi defensa, la niña había
decidido que justo esa noche no quería dormir y yo iba un poco zombie…
Pues… al lío: el rinobuey
gigante y los muerdehombres cargaron a los goblins nocturnos y al Chamán… (Que
acabaron destrozados en el combate subsiguiente).
Yoda decidió seguir
huyendo, pero en cambio, los gnoblars de la derecha, esta vez sí, se
reagruparon, aunque no podrían hacer nada, y… el tirasobras superó su chequeo
de mal genio, aunque para ello tuve que gastar el penúltimo o último dado de
repetición, fiuu. Intenté disparar con él al bloque de Odgit, causando unas
cuantas bajas, pero no las suficientes como para causar pánico… lástima.
Y respecto al resto… hice
alguna baja a base de pedradas, consiguiendo reducir la unidad del general a
menos de la mitad (¿o fueron los fanáticos?), pero poco más. Tenía los
rinobueyes por ahí cerca, pero, siendo “el último turno”, no merecía la pena
acercarlos y exponerlos…
Ah, el yethi que quedaba
siguió huyendo, así que daría puntos la unidad entera, y los Krujemadrez se
encararon hacia los Goblins nocturnos de Odgit, para morir con dignidad…
Como comentario final,
los gnoblars zuertudoz llegaron a la zona de despliegue nocturna XD esos sí que
tenían suerte, no habían tenido que trabajar en toda la partida, jaja
TURNO 5 “6” NOCTURNO
Con 4 unidades sobre la
mesa, el turno fue rápido:
-El Ídolo no llegaba a
nada…
-La unidad de nocturnos con el general no tenía nada que hacer…
-El escupegarrapatos intentó disparar por segunda vez en la partida… pero Pablo
llevaba una mala racha con él… y volvieron a no querer disparar, pese a ir con
4 dados. Solo habían disparado una vez por partida (por suerte, si cada vez que
disparan se llevan por delante casi una unidad entera…)
-Y la duda estaba en qué hacer con Odgit y sus nocturnos… ¿Cargar a los
Krujemadrez y asegurarse de que huían, con el riesgo de que Odgit muriera?...
¿O freírlos a magia rezando para que no sobreviviera el Jefe? Y, si os soy
sincero… no recuerdo al 100% que hizo… me quiere sonar que sí, que cargaron
(supongo que con desafío de campeón nocturno para evitar que el Gran Jefe
pegara a Odgit…) y les hicieron huir…
CONCLUSIÓN
Contamos puntos… y la
cosa acabó en una Victoria marginal para mí. Cierto es que parecía que le
quedaba pocas cosas sobre la mesa, pero realmente lo que más puntos valían eran
el Ídolo, el escupegarrapatos, y los personajes… y de estos le quedaban tres
aún.
Por mi parte,
numéricamente seguía teniendo mayoría, pero perder yethis y Krujemadrez es un
duro golpe en puntos… En cuanto a la misión, los muerdegnoblars quedaron justo
por debajo de la mitad, así que ninguno de los dos nos llevamos los puntos.
Lástima de no haber
jugado el sexto turno, pero… antes de empezar el torneo, mis expectativas con
los gnoblars eran “no llevarme tres masacres/decisivas a casa”. Cualquier otro
resultado era una victoria moral XD. Así que conseguir una primera victoria era
algo que no me esperaba de ninguna manera, jaja, y salté y sonreí feliz como un
Gnoblar con un zapato nuevo (uno solo, no hace falta ni el par).
Cierto es que la lista de
Pablo era muy pachanguera, y que él aún está empezando con sexta (tiene más
experiencia en otras ediciones, y eso se notó al no ponerle el nivel 4 al gran
chamán, no elegir gran waaagh al completo, meter los personajes en unidades,
dejar las unidades de movimiento aleatorio apretujadas en un rincón, separar al
Ídolo, etc), así que no me hacía ilusiones de cara a las siguientes partidas si
aparecía una horda orca con ganas de mamporros… pero, hey, los Gnoblars ya
habían hecho un buen trabajo :D.
Y… esto es todo por hoy.
Nos leemos en la ronda siguiente :D
Me encanta tu ejército gnoblar, me has dado ganas de montarme uno! Solo necesito más hueco en casa y ganas para pintar tanta miniatura jajaja.
ResponderEliminarEnhorabuena por el ejército y la victoria, muy buena redacción también!
Oooh! Siii, más gnoblars :D Realmente, hace falta paciencia, hay momentos de desesperación en los que te cansas de pintar verdezuelos XD
EliminarEsperando ya con impaciencia la próxima entrega de las aventuras de Gnobo! Y ya puestos, molaría bastante ver a la horda gnoblar en acción en un videoinforme (ejem), o en su defecto alguna partida entre dos listas temáticas pielverdes.
ResponderEliminarRespondo con retraso que desde el móvil no me deja. jeje. Gracias por comentar! Yaaaa, tenemos la partida pendiente, a ver si el mes que viene la podemos hacer en Moria
EliminarEnric, nos tienes en ascuas con esta primera fase del Cantar del Mío Gnobo. ¿Llegará la horda gnoblar a lo más alto del torneo? Próximamente en Leyendas en Miniatura.
ResponderEliminarXDD Me encanta El Cantar del Mío Gnobo. Como buen gnoblar, lo voy a robar y quedarme el mérito :P
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